Nacimiento del abejorro

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En la enorme nave Decepticon el lìder de estos se encontraba ansioso y desesperado sin saber el por què. Como si una fuerza le llamara, pero no sabia de donde provenia. Sus instintos alterados hacia rugirle a sus subordinados quienes mejor se quitaban y ocultaban de su camino. Todos excepto uno. 

- Mi lord Megatron ¿por què se encuentra tan ansioso? Es demasiado obvio para todos su inestabilidad. Permìteme ayudarlo a relajarse..

- ¡Agh, Starscream! Largo de mi vista, maldita rata voladora ¡mejor sirve de algo y encuentra a esos autobots! 

- Agh, como ordene, mi lord. 

Megatron camino haciendo sonar sus pasos al pasar por los pasillos hasta llegar a su càmara de recarga cerrando la puerta con suma fuerza haciendo temblar esa secciòn de la nave. 

- ¿Què estaras haciendo, Prime? ¿por què eres lo ùnico en que puede pensar mi cabeza? ¡ahg! Si supiera donde estas.. serìa màs facil gobernando a tu lado. 

Se dejo caer sin cuidado en su càmara de recarga mirando hacia arriba suspirando irritado de que su cabeza solo rondaba la imagen de Optimus y una gran preocupación que no  entendìa por quee. 

- Aay si pudiera volverte a tener en mis brazos esta vez no te dejarìa escapar. 

Mientras tanto en una pequeña y desolada estrella un grupo de autobots se refugiaba entre las cuevas mientras esperaban ansiosos noticias de su lìder y del sparkling que estaba naciendo justo ahora.

Entre todos los autobots solo habìa una sola pregunta que rondaba sus sistemas. 

- ¿¡Ya naciò!?.- pregunto por enèsima vez un preocupado Jazz a Ironhide. 

- ¡Agh, no Jazz! ¡todavìa no nace! 

- ¡Pero han pasado ciclos! 

- Solo lleva ahì un tiempo, Ratchet sabe lo que hace. Debemos tranquilizarnos si queremos los dos esten bien.- dijo Ultra Magnus tratando de evitar màs nervios entre los demàs. 

Dentro de una de las cuevas Ratchet manejaba algunos aparatos que utilizò para abrir la caja de Optimus. Al no tener anestesia el dolor recorrio todo el cuerpo del mayor.

- ¡Mgh, ahg!.- se quejo Optimus de las heridas de la dolorosa operaciòn para extraer a su sparkling. Su interior estaba sangrando de energon y el dolor era entumecedor. Cuando logro recuperar algo de fuerzas pudo hablar.- ¿e-esta bien?... ¡Ratchet! ¿¡por que no llora!?.- se empezo a desesperar de no escuchar el llanto de su sparkling pensando lo peor. 

- Shhh esta dormido. Debiò ser para el muy agotador nacer. 

Optimus se relajo de las palabras de su mejor amigo. Si Ratchet decìa que estaba bien es porque asì era. 

- Èl esta bien, todo ha salido bien Optimus. Hiciste un buen trabajo.- sonriò Ratchet tomando en sus brazos al nuevo autobot que yacìa a un lado de ellos. Miro con detenimiento al nuevo sparkling de su lìder y no pudo evitar reìr al ver al pequeño.- ¡es todo un autobot! Ni un solo rastro de ser un decepticon.- dijo orgulloso.  

El agotado Optimus aùn se recuperaba del enorme esfuerzo de sus sistemas para sacarlo de su caja protectora de su interior. Tuvieron que romper y cortar varios cables para sacarlo de su vientre, pero lo harìa de nuevo por solo escuchar sus sistemas de voz. 

- Quiero verlo.- pidiò el lìder autobot.- Bumblebee. 

- Bumblebee. Bumblebee Prime.- dijo acercandose con el pequeño both en brazos. 

- No Ratchet, solo nosotros sabemos su verdadero origen. Megatron no debe sospechar que èl es mi sparkling, si lo sabe entonces no habrà nada que lo detenga hasta matarlo por creer que lo traicione. 

Separados por la guerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora