Please love me ୧ (Editando)

Capítulo 53

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Al día siguiente, el reloj de mesa fue el causante de que se despertara. Estirando uno de sus brazos apagó el ruidoso aparato y se sentó en su cama mientras pasaba sus manos por todo su rostro. 

Si no tuviera responsabilidades y deberes que hacer, él se quedaría acostado todo el día en la cama. Sin embargo, para poder sustentarte en la vida debes trabajar. 

Salió de su cama de forma perezosa y para que su cuerpo pudiera reaccionar, se metió al baño, abrió la llave de la ducha y dejó mojar todo cuerpo. 

El agua recorría desde su cabeza hasta las puntas de sus dos pies y humectaba todo su cuerpo. Mientras se duchaba, pensaba en que es lo que haría hoy y en definitiva serían muchas cosas. 

Al finalizar, se vistió, bajó a desayunar y unos minutos después se fue a la empresa. Hoy debía hacer varias cosas por la empresa. 

— Señor Jeon. -le habló su secretaria desde el escritorio al verlo pasar. El nombrado se detuvo y la observó. — ¿Cómo se encuentra hoy? 

Jungkook parpadeó confundido hasta que luego de unos segundos comprendió. Se refería a lo que pasó ayer y se sintió avergonzado. 

— Bien, yo… yo siento mucho lo de ayer. -se disculpó acercándose a su secretaria quien le miraba desde su asiento hacia arriba. — No debí hablarte así. 

— No, no se preocupe. -negó de inmediato mientras movía sus manos. — Es mi jefe. 

Jungkook cambió las facciones de su rostro a uno más serio. Aquello no le gustó. — Un jefe no debería tratar así a las personas con las que trabaja. Jamás. -su secretaria iba a responderle pero Jeon fue más rápido. — Por eso, lo siento mucho y no se volverá a repetir. 

— Pero Jefe… 

— Pero nada. -negó de inmediato con voz firme. Su secretaria juntó sus labios con indignación y agachó su cabeza. — Señorita Jisso, quiero que entiendas que no porque yo sea tu jefe significa que tengo el derecho de gritarte o sentirme superior a ti. Soy tu jefe, si, pero eres una persona igual que yo y mereces el mismo respeto ¿Me entiendes? 

— Si entiendo Jefe, gracias por sus disculpas. -le agradeció levantándose de su asiento y haciendo una reverencia. — Umh… tiene una sesión de fotos en quince minutos, puede ir a prepararse por mientras. 

Jungkook le agradeció con una reverencia y caminó hacia su oficina para dejar su maletín y sacarse la chaqueta de su traje formal. Dejándola en el respaldo de su asiento salió nuevamente de su oficina y se dirigió a una que se encontraba casi al fondo del pasillo. 

Su fiel secretaria jamás se fue de su lado. Al entrar a la sala, más de diez camarógrafos con sus cámaras en mano le miraron y le sonrieron. 

El lugar estaba prácticamente listo, detrás había una pared de color verde pastel con unos sillones de casi el mismo color solo que eran más oscuros, y unas carpetas negras que dentro de unos minutos tendría en sus manos. 

Una de las estilistas se le acercó y le dijo con voz suave que debía dirigirse a los vestidores porque debía colocarse un traje más claro. El que llevaba Jungkook era pantalón negro junto con una camisa blanca y lo ideal era que estuviera de blanco. 

Luego de unos minutos estaba listo. Todos los que estaban presentes quedaron asombrados, aquel traje le caía a la perfección. Era como si estuviera hecho para él. 

Los camarógrafos comenzaron a preparar sus cámaras, listos para sacar las fotografías correspondientes. La idea de esta sesión era mostrar una cara más juvenil hacia el público, además de qué por ahora él es el encargado de la empresa por mientras que su padre se recupera.