Please love me ୧ (Editando)

Capítulo 32

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¿Qué harías tú si quién creías muerto, aparece frente a ti? ¿Qué harías o sentirías tú al notar que esos sentimientos que creías que estaban enterrados en lo más profundo, vuelven a florecer? ¿Qué harías si te dijeran que de un día a otro todo lo que amabas se fue?.

Jimin quedó estático en su lugar dándole la espalda a Jungkook. Sus ojos estaban llorosos, quería llorar. No podía creer lo que veían sus ojos, quién estaba frente suyo, quién creyó jamás volver a ver en la vida, quién fue tan importante en su vida.

Quería correr a sus brazos para abrazarle y sentirse protegido y amado una vez más por aquella persona. Pero se sentía diferente, no parecía real.

-¿Taemin?. -quiso acercarse y acariciar su rostro para asegurarse de que no era un sueño, de que era real. Pero no lo hizo, sus pies parecían reacios a querer moverse.

-Hola cariño. -le sonrió dulcemente. -Te extrañe tanto.

Yo también.

Fue un pensamiento instantáneo el que tuvo así como los mil recuerdos que invadieron su mente, esos que añoraba con tanta pasión pero que no los recordaba frecuentemente por lo doloroso que llegó a ser en algún momento.

-Taemin. -sollozó Taehyung acercándose lentamente mientras posaba una mano en la cálida piel del chico. -Dios ¿En serio eres tú?.

-Lo soy. -rió levemente aceptando la acaricia en su mejilla. -¿Quién más podría ser?.

-Pero tú.... -titubeó Jimin. -Tú tuviste un accidente automovilístico y falleciste.

-Tuve el accidente, creí que moriría y que no volvería a verte. -se acercó a Jimin, sin embargo un metro los separaba. -Pero no morí. Mi padre fue el culpable de todo.

-¿Tú padre?. -sollozó dando un respiro intranquilo.

Hace cuatro años Jimin y Taemin llevaban una hermosa relación de dos años, se conocían desde pequeños, siempre fueron buenos amigos junto a Taehyung, sin embargo sentimientos empezaron a florecer entre ellos cuándo tuvieron dieciséis años.

Su relación era hermosa en todos los sentidos, se entendían mutuamente, ambos amaban la música y la danza. Eran el dúo perfecto.

Se querían incondicionalmente, su cariño era inmenso, casi nunca discutían y si lo hacían, en menos de cinco minutos estaban abrazándose, repartiéndose besos por la cara, pidiendo perdón. No podían estar alejados, sentían  un vacío enorme dentro de sí mismo.

-Cariño. -llamó el mayor. -Iré a ver a mi padre ¿Nos vemos luego?. 

-¿Quieres que te acompañe?. -preguntó el rubio. -Se que no le agrado a tu papá, pero desearía saludarlo.

Al papá de Taemin nunca le agradó Jimin, ni cuándo eran amigos, ni mucho menos ahora que son novios y están comprometidos.

Nunca se supo el porqué, aún así ellos se amaban y eso nadie podía cambiarlo.

-No amor. -negó tomándolo de la cintura para besarle la frente. -Ire a hablar algo importante con él. Yo voy y vuelvo, no te preocupes por eso cariño.