Capítulo 10: Compatibilidad

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Las baldosas del baño estaban frías. La mejilla de Nunew estaba pegada a ellas mientras el alfa lo embestía por detrás, su cuerpo dolía, pero no podían parar. La atracción era demasiado fuerte para controlarla, así que ambos se dejaron cautivar por completo por lo que sentían. Toda la noche la pasaron juntos. Incluso, en la mañana, cuando el omega entró a tomar una ducha, se vio abrazado de repente por el alfa, colocado contra la pared y penetrado sin permiso.

Las sensaciones seguían estando a flor de piel y ambos sentían que cada vez el lazo se volvía más intenso. Nunew quería que su mente funcionara mejor, pero sentía que desde la noche anterior su perspectiva estaba nublada por el deseo. Mientras que el alfa, acostumbrado a dejarse llevar por sus pasiones, disfrutaba completamente del cuerpo frente a él sin preocuparse por lo que su mente le dijera.

- Mmm... así, se... siente bien.

- Tú te sientes bien - dijo el alfa casi sin aliento - Sigues estando muy... estrecho cada vez que te penetro.

Los gemidos y los olores se mezclaban en el baño, era una combinación entre el olor dulce del omega y el cítrico del alfa. Este despliegue de feromonas los hacía sentirse a gusto, tranquilos y en confianza. Era extraño que ahora recordaran lo mal que se llevaban antes porque el olor les ofrecía una certeza que no tenían en días anteriores.

Finalmente, luego de acelerar el ritmo, el alfa se vino dentro del pequeño omega. Nunew ya estaba tan acostumbrado a que la esencia del mayor lo lubricara que sonrió cuando esto pasó. Era su alfa, su semen... era su destinado. Sólo suyo y de nadie más. Lamentablemente, este pensamiento no duró mucho. Cuando el alfa salió de su cavidad, terminó de bañarse y dejó a Nunew parado bajo la regadera. Su cuerpo protestaba por haber sido utilizado por varias horas, pero hallándose ahí solo, bajo el agua tibia, reflexionó un poco sobre el lazo.

Nunew disfrutó cada segundo de los actos sexuales con el alfa. Ninguna de sus exparejas había logrado que se viniera tantas veces y quedara verdaderamente satisfecho. Además, sentía que una parte de su alma se había llenado por completo cuando encontró a su destinado. Sin embargo, estaba consciente que no debía ser tan confiado y que el sexo no era suficiente para una relación.

Una parte de él quería dejarse llevar, pero los omegas nunca tienen elección y el poder siempre lo tiene el alfa. Algo con lo que Nunew nunca ha estado de acuerdo. Cederle ahora ese poder al alfa detonaba en él un sentido de supervivencia que no estaba dispuesto a ignorar. Y es que no había sufrido ningún trauma de pequeño, simplemente se había topado con alfas que jamás lo tomaban en cuenta más que para satisfacer sus necesidades y le trataban como empleado. Como si toda su existencia fuera servirles. Así que, si Pruk quería que lo de ellos funcionara, destinados o no, debía poner de su parte pues ser tratado de esa forma no iba con las expectativas de pareja de Nunew.

Al terminar de ducharse, se vistió rápido con jeans y una camiseta, y salió. El alfa ya se había terminado de vestir y estaba acomodando las costosas mancuernas en sus muñecas. Nunew lo observó en silencio, no cabía duda que el alfa tenía porte y era extremadamente antojable. 'Vamos' - pensó - 'Deja de verlo así o comenzarás a lubricar de nuevo y al olerte te estará volviendo a coger como conejo'. Quiso entretenerse secando su cabello, pero pronto unas manos lo voltearon, tomaron su rostro de una manera delicada y sus labios fueron besados.

- Voy a cambiarme de ropa a mi casa. Te veo en la oficina. - dijo el alfa, su voz era notoriamente tranquila y sin la arrogancia que lo caracterizaba.

- Eh... bueno, en realidad no nos veremos porque trabajo en otro piso. - contestó Nunew. De inmediato pensó que quizás el alfa sólo lo dijo como tema de conversación.

- Mmm... tienes razón. Puedo hacer que tu oficina sea ahora junto a la mía. - la voz algo posesiva comenzaba a mostrarse.

- No, recuerda que tenemos que conocernos y trabajar en áreas distintas, mantener nuestra distancia en el trabajo será lo mejor.

Infierno en tu mirada - ZEENUNEWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora