Capítulo 31: un golpe de realidad.
Tiempo después...
Lucrecia despertó con mucho sueño y un ligero dolor de cabeza. Era impresionante que la edad te quitara la facultad de trasnochar sin consecuencias matutinas. Peor aún si había tomado una botella completa de vino antes de la cena.
Se levantó de la cama con la misma parsimonia de siempre y decidió aventurarse en las cálidas aguas de su enorme tina. Un baño seguramente le sentaría bien, pero justo cuando estaba por meterse en ella, su teléfono sonó. Era del Hospital central y, al menos que ella supiera, no tenían razón alguna para llamarle.
- Sí, diga - respondió Lucrecia al recibir la llamada.
- ¿Habla la señora Lucrecia Pruk? - dijo una voz suave y femenina del otro lado del teléfono.
- Así es, el identificador de llamadas dice que me hablan del hospital, pero no tengo ninguna cita programada ni estoy esperando ningún tipo de análisis o resultados, así que no entiendo muy bien qué desean. - dijo Lucrecia, todavía algo atontada por acabar de despertarse.
- Sí, señora Pruk, una disculpa por molestarla tan temprano. Verá, el hospital se está poniendo en contacto con usted porque necesitamos algún familiar que firme la responsiva que queda pendiente con respecto a la situación del Alfa Zee Pruk.
- ¿Responsiva? - Lucrecia no entendía algo de lo que le estaban diciendo.
- Sí, siempre hacemos firmar una responsiva cuando abandonan el hospital sin que se les haya dado de alta, para que sepan que el hospital no se hace responsable de lo que pueda pasar.
- Un momento... ¿Quiere decir que Zee estuvo internado en ese hospital y decidió irse sin que lo dieran de alta?
- Oh, este...bueno... veo que no sabía nada al respecto. Una disculpa, pero es que al no firmar la responsiva, se debe acudir a un pariente cercano y usted es la primera persona a la que llamamos.
¿Zee estaba enfermo? ¿Responsiva? Sólo se firman esos papeles cuando la vida corre riesgo de alguna forma, los hospitales nunca quieren ser llevados a juicio por algún tipo de tragedia. Lucrecia estaba algo confundida, pero eso no la hacía ser menos astuta.
- De acuerdo, firmaré. Iré en una hora para que puedan contarme detalles, no pensará que firmaré sin antes saber qué estoy aceptando, ¿verdad?
- Claro, normalmente la información de cada paciente es confidencial, pero en los casos que se requiera esta firma, siempre se le explica a la persona lo que está aceptando cuando lo hace. No se preocupe, aquí la esperamos.
Cuando Lucrecia colgó, su cabeza daba algo de vueltas por el licor que había tomado la noche anterior, pero poco a poco estaba empezando a comprender las cosas. Así que, en lugar de un relajante baño de tina, decidió tomar una ducha rápida y dirigirse al hospital lo más pronto posible. Todo estaba muy raro y mientras antes se enterara de qué sucedía...mejor.
____
Dos meses habían pasado desde que Nunew había rechazado a Zee. El omega aún recordaba el rostro desencajado del alfa. Como si el alma se le hubiera ido en ese momento. Y era una imagen que no quería recordar, pero que al parecer ahora era el pan de cada noche en sus sueños.
Zee nunca volvió a buscarlo. La empresa lo contactó para hacerle llegar su finiquito y todos los trámites pertinentes, pero estaba asombrado de que ni siquiera Max haya insistido. Nunew se había preparado para una contienda, pues supuso que el alfa daría pelea por el bebé, pero esta afrenta nunca llegó.
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Infierno en tu mirada - ZEENUNEW
FanfictionZee Pruk es un alfa soberbio y caprichoso, acostumbrado a tener lo que quiere cuando quiere. Nunew es un joven omega metódico que también quiere el control de cada situación. Cuando sus mundos se encuentran no se toleran. Son muy distintos y a la ve...