Era un nuevo día en Avonlea; la mañana estaba fresca, pero no al punto de llegar a estar helada.
Lo único que se podría oir tan temprano eran los cánticos de los pájaros; el revolotear de los árboles; la danza del agua que era movida por el viento. Pero, específicamente en esa mañana, un sonido peculiar se hizo oir: pasos.
Los pasos de un muchacho, de cabello levemente alborotado, y respiración agitada, se escuchaban contra el verdoso pasto. Él estaba trotando.
Sus pasos se detuvieron en un rosal hermoso, pero apagado. Casi todas sus flores estaban decaídas, sin su esplendor. Pero una en especial, y muy especial, tenía aún la cabeza de sus pétalos en alto, con su color rojo tan vivo como el de la sangre o el vino. Era imponente.
El color, tan rojizo y único, le hacia recordar a ella.«El color de sus labios; mejillas; vestido y moños. Y hasta el color de su aura, y lumbre. El color de ella.»
Se inclinó para recojer la flor, y la cortó por lo bajo de su tallo.
Mientras que con una mano sostenía un hermoso plato dorado, que tenía una delicia preparada por él, con ayuda de su madre, y un sobre rojizo con un sello dorado que tenía las iniciales M.S, con la otra sostuvo la rosa. No le importó el haberse clavado una pequeña espina en la palma de su pálida mano, porque quería apreciarla y tocarla el mismo, con la yema de sus dedos y la suavidad de las delicadas caricias que le daba a cada pétalo. Era algo extraordinario para él, poder sentir la sensación tan rasposa del tallo, y tan frágil del pétalo. Era otra cosa que le recordaba a ella, a __________, a su amada.
Él sabía que ella podría llegar a ser tan fina como un pétalo de rosa; y a su vez tan dolorosa como una espina clavada en la piel. Era algo que él admiraba de ella, la forma en la que podría ser un sueño y a la vez la pesadilla. A Moody Spurgeon le enloquecía esa forma de ser. Ella lo enloquecía por completo.
Moody acercó su rostro a la bella rosa, y olió su aroma. Tenía olor a flor, claro, pero su mente le hizo oler el fino perfume de Amore Appassionato de 1894, italiano, que a __________ le gustaba tanto usar. Era un olor extraño, y agradable. Era dulce como la vainilla, pero no era un olor tan grácil, porque de alguna forma el olor se volvía una esencia mentolada y picosa. Y era otra cosa en la que a Moody le parecía acertado de su persona.
Siguió su camino.
Se sentía relajado con el paisaje tan calmado. Los silbidos de los pájaros era algo que disfrutaba bastante, y le gustaba sentir que ellos cantaban para él. Era algo que amaba de las mañanas, su tranquilidad y finura. Diferente a las tardes, que parecían tener más ímpetu e intensidad; y a las noches, que tenían más gallardía y sosiego. Tal vez lo que disfrutaba de la noche eran las estrellas. Las miles, y miles de estrellas que decoraban sólidamente el cielo negro azulado.
Eran maravillosas, y si tuviera el tiempo, las contaría a todas.
Pero le gustaban por una razón: eran un brillo, un lucero. Eran el destello que siempre que la miraba, estaba en sus ojos.
Para alguien que es externo, es cansado tener que escuchar que todo lo que el ama, quiere, le gusta o sueña, tiene que ser alrededor de la chica de la cual estaba enamorado, pero así es. A él no le molestaba que ella fuera el centro de su mundo (aunque realmente eso no fuera del todo sano), pero si le molestaba cuando los demás, específicamente sus compañeros, se metían con él por priorizarla a ella en su mente: «Ya deja de hablar de ella, Moody», «Su nombre es el único que pronuncias» «Te esfuerzas demasiado por alguien que a duras penas sabe que existes.»
Pero los comentarios que él realmente detestaba, los que le hacían querer golpear a alguien -Casi siempre a Billy, por no decir que todas las veces.- eran los: «Sí, está buena», «¿Qué tiene que tengan dieciséis? Ya deberías habertela llevado a la cama», «¿El pequeño Moody se toca pensando en __________ Barry?».
Los odiaba, los detestaba, despreciaba con todo su ser que pensaran que él podría llegar a si quiera mirar por debajo de su vestido sin su permiso, o de atreverse a tocarla.

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𝑴𝒚 𝑩𝒆𝒂𝒖𝒕𝒊𝒇𝒖𝒍 𝑳𝒂𝒅𝒚 | 𝐉𝐄𝐑𝐑𝐘 𝐁𝐀𝐘𝐍𝐀𝐑𝐃
Fanfiction┇Actualizaciones lentas. 𝐌𝐁𝐋 | "𝘐'𝘷𝘦 𝘯𝘦𝘷𝘦𝘳 𝘭𝘪𝘬𝘦𝘥 𝘢𝘯𝘺𝘰𝘯𝘦 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘸𝘢𝘺 𝘰𝘳 𝘮𝘢𝘥𝘦 𝘮𝘦 𝘭𝘰𝘴𝘦 𝘮𝘺 𝘮𝘪𝘯𝘥 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘺𝘰𝘶" ↳ᴬ ᴶᵉʳʳʸ ᴮᵃʸⁿᵃʳᵈ ᶠᵃⁿᶠⁱᶜ↲ Dónde la hermana mayor de los Barry co...