Capítulo Cuatro: Reconstrucción para Cooper.

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—Dove no...

—Antes de que digas algo más, solo quiero que sepas que lo hago por mí no por algún tercero. Me gustaría cerrar este capítulo, creo que es algo que debemos hacer ambos.

—Pero yo no quiero—susurró Hero sentándose de golpe en el sillón llevándose las manos a la frente—. Si quieres te puedo dar mucho más tiempo para que pienses y reconsideres esto, de verdad te amo y me arrepiento de besarla. Te esperaré lo que sea necesario si es lo que quieres amor.

—No es eso Hero, ambos vimos esas fotografías y tu actitud distante. Te dejaré los papeles deben estar firmados antes del fin de semana.

La chica se levantó del lugar, pero fue detenida por el hombre quien se aferró a su cintura escondiendo su cara en el abdomen de la chica.

—No te vayas, no te vayas, no te vayas por favor.

—No hagas esto Hero, piensa bien si te divorcias podrás contraer nupcias con Delia, harás feliz a tu madre y así serás feliz tú.

—Pero yo no quiero eso, yo te quiero a ti—guardó silencio por unos minutos—. Tus votos en nuestro matrimonio.

—¿Qué hay con eso?

—Dijiste que ibas a amarme a pesar de todo, que era el amor de tu vida y no me ibas a dejar hasta .

—Tenía veinte años y no eras el hombre en que te convertiste unas semanas antes de marcharme.

—Y me arrepiento mucho de lo que hice, si quieres puedes ir y estar con alguien, pero vuelve a mí en algún momento.

—No se trata de eso Hero, entiende.

Dove tomó los brazos del hombre para quitarlos de su cintura.

—Mi dirección está en el reverso del sobre, ve a dejar los papeles antes de que acabe el domingo.

Hero quedó desecho en la sala, soltando lágrimas a montones mientras que Dove trataba de retener el nudo que tenía en su garganta al verlo deshecho.

La chica tomó el plomo de la puerta y miró a un lado de ella donde había una mesa pequeña con llaves en ella y una fotografía, fue del día que adoptaron a Raider el pequeño gatito que encontraron en una bolsa de basura.

Eddie volvió a la sala mirando a Hero con lastima, se sentó a un lado del hombre par secar sus lágrimas y extenderle su peluche.

—Cuando Estoy triste el siempre está conmigo—abrazó el brazo del hombre sonriendo para cantar una canción infantil.

...

La chica entró a su casa dejando el bolso y sus tacones en la entrada, escuchó algunos utensilios moverse en la cocina lo cual era extraño, ya que Seb solo disfrutaba de comida congelada cuando no estaba Dove en casa.

Se adentra a la cocina sorprendiéndose al ver la amplia espalda de Nils moverse con destreza en la cocina.

—Huele estupendo—Nils se dio la vuelta asustado.

—He preparado un platillo típico de Francia, me lo ha enseñado mamá y me obligó a aceptar que ella hiciera el postre.

—Adoro los postres de tu madre, son tan dulces como ella.

—Ve a lavar tus manos y cambia tu ropa por algo más cómodo, será una tarde entretenida y la nieve estará de nuestro lado.

Dove asintió encaminándose a su habitación para cambiarse por algo más cómodo y amarrar su cabello en una baja coleta.

Nils sonrió orgulloso cuando Dove disfrutaba la comida, acarició el cabello de la chica para limpiar la comisura de su labio cuando un poco de salsa se había quedado ahí.

The Other Face LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora