ENTRE LOS PIES Y LAS MANOS; pablo gavi.

MAL PRESENTIMIENTO

Estoy con Marc en la sala de fisio pero hay algo que no me deja concentrarme con claridad, tanto que estoy metiendo en el botiquín cosas que no necesitamos. La voz de Marc me saca de mis pensamientos.

- Vega ¿te pasa algo? - dice acercándose a mí-. Estas en las nubes y tú nunca sueles estar en las nubes.

- No se Marc, tengo un mal presentimiento de este partido.

- Como que un mal presentimiento.

- Sí, no sé, una sensación me dice que algo no va a salir bien- digo viendo su cara de desconcierto-. No te preocupes Marc seguro que no es nada, soy una paranoica.

Salimos al banquillo con mi padre y nos ponemos a hablar de la táctica que va a usar con los chicos mientras ellos acaban de calentar.

Entiendo de lo que hablan, llevo toda la vida entre este mundo y claramente se cuales son todas las tácticas y estrategias que se usan, pero la verdad soy más de las tácticas de defensa de balonmano, un 3-3, un 6-0 o un 5-1. A mí me gusta más mi 40x20, es mi sitio seguro.

Los chicos entran al vestuario seguidos de mi padre y su cuerpo técnico y yo me quedo a fuera con Marc.

- ¿Sigues pensando en lo mismo no?

- Si, pero no te preocupes, se me pasara cuando comience el partido, estoy segura.

El partido comienza y a los 20 minutos de empezar el partido Gavi mete un golazo, digno de admirar. Con esto ya tiene para saciar su ego una temporada.

El partido sigue su curso correctamente y yo ya puedo reírme de mi misma por haber pensado esa estupidez.

A falta de 15 minutos para acabar el partido pedri y gavi suben el balón rápidamente hacia la portería. Los jugadores del Sevilla les persiguen por detrás hasta que una entrada muy fea hace que Marc y yo nos sobresaltemos, mi padre se gire a mirarnos y todo el banquillo se lleve las manos a la cabeza. Rápidamente saltamos al campo cuando el árbitro nos da la señal.

- Pedri, Pedri, estas bien- digo agachándome a su lado e intentando que se ponga boca arriba para que me mire y poder ver si está consciente.

- Agg- el solo gime de dolor y se lleva las manos a la espalda.

- Ehh vale, tranquilo- digo intentando tranquilizarle porque estoy viendo lo nervioso que esta-. Respira conmigo. Inhala, exhala-. Le digo haciendo las respiraciones con él.

- Vamos a intentar que te pongas de pie- dice Marc agarrando a pedri por un brazo mientras que yo lo hago del otro.

El golpe que ha tenido pedri no es moco de pavo, le han empujado y se ha dado con el palo de la portería en la espalda, podría haberse hecho mucho daño.

Es que como lo sabia. Sabía que algo malo iba a pasar, lo sabía, mi intuición nunca falla. Odio que sea así, pero es que cada vez que me pasa, no fallo.

Pedri se levanta y poco a poco le llevamos al vestuario. Una vez allí Marc sale a fuera por si hubiese algún otro problema y yo me quedo con Pedri.

- Toma, póntelo- le digo dándole un paquete de hielo.

- Me duele que flipas.

- Es que la ostia ha sido muy fuerte Pedrito, te podrías haber quedado parapléjico.

- Eres una exagerada- dice riendo.

- Pedri no tiene gracia, nos has asustado mucho a todos.

- Lo siento lo siento- dice levantando las manos. - Quiero salir fuera a ver el partido- dice intentando levantarse.