Corazón indomable

Planes

Varios meses después.

Ya que Kara había estado en el hospital un buen tiempo el cumpleaños de Kiara se había llevado a cabo de manera privada, la pequeña no se quejó ni un poco, al contrario, a su tierna edad comprendía demasiado se podría decir.

Luego de los acontecimientos la vida de Kara y Lena se tranquilizó.

Kara estaba mirando las noticias en el sofá, Cat Grant estaba en su pantalla , se recostó en el pecho de Lena y suspiró—Me alegra tener algo de paz.—susurró.

—Y yo también mi amor—Lena sonrió—Estaba pensando, ya que estás mejor podríamos tener esas vacaciones—dijo Lena acariciando los rizos rubios de su novia.—Alura , Eliza y todas irán.

—¿En serio?—Kara la miró emocionada.

—Muy en serio, y hablando de cosas serias...

Kiara venía correteando con sus pequeñas chancletitas que hacían sonidos—¡Mami mira!—dijo corriendo hacia ellas y se subió al sofá.

Kara se echó a reír bajito—Pareces una pandereta hija—dijo alzándola en brazos.—Gruaaaaaaaaarrrrrrrrrr me comeré tu pancita—sonrió haciéndole peditos a la niña.

—¡No mami no!—Kiara se reía y le hacía manitos a Lena para que la "salvase" del monstruo come pancitas.

—Kiara—Lena la cargó y le besó la carita—¿Qué tal si vamos con mamá de vacaciones a la playa?

—Sí mami, quiero—dijo besuqueando a Lena en sus mejillas de forma torpe.

Kara las miraba con amor, cualquier cosa que hubiese pasado, había valido la pena, sus jaguarcitas estaban a salvo.

—¿Y a donde iremos a vacacionar?

—Eso será un secreto hasta que lleguemos—dijo Lena con picardía.—Ya lo verás te va a gustar.

Lena bajó a la niña que en seguida fue a jugar con la cachorra de pantera, que ahora tenía un tamaño mucho más grande, pero la niña la seguía molestando como siempre, se llevaban de maravilla.

El sonido de toques en la puerta las interrumpió—Señora, soy Vadim, la señora Alura las espera—dijo suavemente.

—Vadim cuiden a la niña—dijo Lena suavemente y se levantó del sofá después de Kara.

—¿A donde vamos Lenita?—preguntó Kara algo emocionada, se le veía en todo su rostro la curiosidad.

—A ver a Alura, hay que ver qué quiere amor—sonrió la Luthor.

Al bajar ambas encontraron el auto de Alura y la mujer bajó la ventanilla —Buenas, suban—dijo con una sonrisa, la mujer mayor como siempre lucía impecable vestida de traje blanco.

Kara miró a Lena y luego ambas se subieron al auto, no sabían a donde iban pero cuando vieron el enorme edificio de Catco fue más que obvio.

—Alura mi mujer no está para entrevistas ahora—dijo Lena seriamente.

—No vinimos para eso—dijo Alura rodando los ojos y se bajó del auto—Vamos.

Cuando todas llegaron al despacho de Cat la mujer las recibió con una sonrisa —Hola, mis chicas favoritas—dijo la mujer abrazando a Lena y a Kara.

Kara la miró con sospecha—La señora del chisme.

—Periodismo se le llama cariño—le dijo con una sonrisa.—Y bien siéntense, me gustaría decirles algo.

Las tres se sentaron, Lena miró a Alura quien era obvio que ya sabía a qué venían, Kara por su lado parecía algo nerviosa y miraba toda la oficina con asombro.