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(tal vez este no sea un escritor o poeta, pero no encontraba alguno, que encajara para el capítulo).

"Protector o posesivo. Llámalo posesivo o agresivo"
-Nick Jonas (Jealous)

El rizado preparaba el desayuno mientras la radio se encontraba encendida reproduciendo alguna que otra canción de algún artista conocido, aunque no era lo favorito de él, solo la ponía para llenar la soledad y el silencio que rotunda por la habitación.

El alfa argentino talló sus ojos con pereza mientras con pasos titubeantes se encaminaba a la cocina. Bosteza.

-Buenos días, Lionel-saluda el mexicano desde la cocina.

-Buenos días, Memo-responde casi durmiendo aún, pero con una sonrisa en su rostro.

-Toma asiento, que en un momento traigo tu desayuno-Messi asiente y se sienta en una de las sillas del comedor.

Memo regresa con el desayuno, pan tostado con mermelada y tés. Algo ligero por el momento, pues el rizado para la comida tenía algo en mente, para que Lionel lo probará por primera vez. Los dos se sientan a desayunar, está vez había uno que otro comentario, no como las veces pasadas, que lo solo se escuchaba el ruido de los cubiertos, mordiscos o sorbos a sus cafés o tés.

Terminaron de desayunar y cada uno hacia alguna actividad para no aburrirse. El tiempo paso demasiado rápido, cuando observaron el reloj eran las cuatro de la tarde. El mexicano como su parte favorita del día, cocinaba un platillo que solo su familia siempre hacia en ocasiones especiales en casa, y que solo sus padres y él conocían aquella receta de memoria. El timbre resonó haciendo que Lionel se levantará velozmente del suelo y caminara para así abrir la puerta. El argentino abre la puerta encontrándose con su mejor amigo y confidente de locuras, Sergio Agüero.

El rizado sale de la cocina y con el trae la comida, aquellas deliciosas tortas cubanas y ahogadas que su familia sabía preparar tan bien. Las deja en la mesa y se dirige hacia la puerta.

-Lionel, ¿Quién es?-dice acercándose a él albiceleste.

Ochoa observa a Messi, quién se encuentra abrazado de Sergio Agüero, ambos sonríen ampliamente.

-Es Kuni-Dice demasiado feliz.

-Oh ya ví. ¿Y a que se debe tu visita, Sergio?-lo cuestiona al hombre y escanea cada moviendo que esté da.

-Umh, pues solo quería saber cómo estaba mi celestito-Agüero besa la mejilla del capitán.

-Como puedes ver el se encuentra excelente-le sonríe un poco.

-Guillermo, Kuni; ¿Puede quedarse a comer con nosotros?-mira a el rizado y le sonríe.

-Okay-responde. -Adelante, pasa-

Memo suelta un suspiro y sigue a los argentinos hasta el comedor, ambos albicelestes se sientan alado del otro y se regalan una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Y qué tal te está yendo con lo del juicio de Benja?-le pregunta Lionel a su amigo.

-Pues aún no se sabe nada, las cosas con mi ex esposa son confusas, ella sigue queriendo que yo no pueda ver a mi hijo-echa su cabeza hacia atrás y suelta un agotador suspiro.

-Tranquilo, kuni. Todo saldrá bien, ya lo verás-

-Bueno creo que es mucha habla, coman que la comida se enfría-el rizado se sienta enfrente de los dos y los mira con atención.

-Tenés razón, che-dice sonriente y toma una torta que se encuentra en el plato del centro.

Los argentinos comen gustosos la comida que ha preparado el mexicano, entre charlas y risas, mientras que el mexicano solo mira a Lionel con seriedad.

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