Genshin Things

4. Una Vez al Año [+18]

TW: Xiao x Venti

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Primero era un punto verde destellante en el cielo oscuro de la medianoche, lleno de pequeñas estrellas débiles, y luego era Barbatos volando, o cayendo, a toda velocidad sobre él. Porque no importaba desde que tan lejos o que tan rápido, Xiao siempre iba a abrir los brazos a tiempo e iba a atraparlo.

Luego lo regañaria y se enfadaría, con ese semblante pesado de "odio a todo el mundo excepto a dos personas, y ninguna eres tú" Había al menos dos mentiras en esa oración.

Porque Xiao amaba a más de dos personas, y amaba a Venti más que nadie en el mundo. Tanto que dolía. Lo amaba tanto que su pecho dolía como un puñal, y él sabía de lo que estaba hablando. Lo amaba tanto y pasaban tanto tiempo separados que Xiao a veces solo quería darse por vencido, dejar de cumplir sus promesas, dejar de pelear contra el Karma y liberar su cuerpo al destino. Porque sus días eran aburridos, sin Venti él simplemente no sonríe y el proteger personas pierde el sentido.

Hasta que Venti llega, día por medio a veces, mes por medio otras veces, una vez al año en algunas épocas. No importa la frecuencia, para Xiao nunca es suficiente. Venti cae del cielo a sus brazos con una enorme sonrisa y se deja cargar como una novia nupcial hasta el cuarto de Xiao en la Posada, mientras es regañado por sus imprudencias y por dejarlo solo demasiado tiempo.

Venti rie a carcajadas melodiosas, ruiditos musicales salen de su boca, dientes blancos, nariz pequeña y reapingona. Se sostiene del cuello ajeno como si sus manos vivieran en su nuca. Le acaricia el cabello con las uñas lo suficientemente largas como para tocar la lira, y le lanza besos. Es insoportable. Xiao es un desastre de sonrojos cada vez. Y llevan así al menos mil años. Es vergonzoso.

Xiao lo lanza a la primer superficie acolchonada que encuentra, sacándoselo de encima lo antes posible. Es terrible, no puede con esto. Es repentino, meses solo y su "novio" (Lumine lo dijo, ella tuvo que explicarle que Venti era su novio, él no lo hubiera llamado así jamás) solo aparece y lo toca demasiado y se lanza sobre él y hace que lo toque. Xiao trabaja solo, se rodea de personas lo menos posible, esto es un poco shockeante cada vez.

Tenerlo tan cerca, sonriéndole y tocándole el cabello, con una mano en la espalda ajena y otra en los muslos regordetes y recubiertos en pantimedias blancas. Todo él estaba por entrar en combustión

La cabeza de Venti rebota contra el sofá de la habitación de Xiao, su gorro se pierde por allí y un par de flores caen al suelo. Ríe a carcajadas cada vez más. Xiao lo observaba parado junto al sofá.

-¿Qué haces aquí?

-¿Me extrañaste?

-Siempre te extraño.

Venti rió otra vez. Xiao había hablado con Paimon una tarde con tofu con almendras sobre la mesa, sobre lo exasperante que era la carcajada burlona de Venti.
Ambos estaban de acuerdo. Y Lumine asintio sin participar de la conversación. Los tres estaban de acuerdo.

Xiao se dejó caer en el sofá, clavando una rodilla entre las piernas ajenas y lo escuchó jadear asustado. Se quitó un guante y con la mano ahora desnuda desató el moño que mantenía a la capa de Venti sobre sus hombros. Luego se deshizo del otro guante y comenzó a desabotonar el corset ajeno con suma paciencia y experiencia.

Está ropa era agotadora, él quería, necesitaba, ver piel desnuda, besarle el cuello, las clavículas delgadas, pero Venti tenía está estúpida camisa de cuello de tortuga demasiado alto y el corset sobre ella no lo dejaba quitarla. Eran incontables las veces que simplemente la había desgarrado con sus manos. Pero cada vez, luego de que sus actividades llegan a su fin y Venti recupera la compostura, él se queja y chilla enfadado y con la cara roja, y Xiao se sentía un poco culpable luego de que sus instintos habían sido liberados y todo volvía a la normalidad.