Genshin Things

8. Viajes II

TW: Kazuha x Scaramouche

•| ⊱✿⊰ |•

—¿Quién es Kazuha?

Acababa de volver de la academia, tenía hambre y Nahida le había puesto una emboscada, esperando a su hora de salida para cenar. Y ahora estaban comiendo juntos en la misma mesa y eso era insoportable. Nahida tenía, y todos en Sumeru lo sabían, muy malas habilidades sociales. Así que cuando sin querer le leyó la mente, porque estaba muy acostumbrada a hacer eso cuando había mucho silencio, y cuando luego, también sin quererlo, le preguntó al respecto, Wanderer sabía que no era adrede.

Aún así, escupió sus fideos de vuelta al plato en cuanto la escuchó.

—¡Oye! ¡Eres la arconte con peores modales que existe!— Nahida se tapó la boca con ambas manos y tal vez la razón principal por la que Scaramouche no la golpeaba era porque lucía adorable.

—¡Lo siento mucho!— se disculpó dándose pequeños golpesitos en los labios— ¿No debía preguntar?

—No debiste meterte en mi cerebro, grosera.

Nahida resopló.

—Nunca me cuentas nada.

—¡No eres mi madre!

—Desapareces, vuelves, te castigo, y no me cuentas dónde te fuiste.

Scaramouche se acarició la sien y apartó su cena, porque comer de un plato donde había devuelto los fideos no sonaba atractivo. Tomó un sorbo de vino y miró a la deidad infantil.

—No te puto incumbe.

—Tenemos un trato.

—Nuestro trato no involucra que te cuente sobre cada relación social que tengo.

—Lo dices como si tuvieras muchas— okey, Nahida era una pequeña mierda. Pero era divertida e inofensiva. Rodaba los ojos y se cruzaba de brazos, luciendo adorable hasta con las cosas más groseras saliendo de su boca.

—...

—¿La vez que conoces a alguien no me lo quieres contar? Yo podría ayudar.

—No, gracias.

—¿Él está en Sumeru? Yo puedo...

—¡No! Quiero decir, si. Pero no, tu no te le acerques.

—Mn, eres tan quisquilloso

—Y tu una entrometida.

Nahida resopló, quitándose un mechón de cabello del rostro y continúo comiendo tranquila. Scaramouche se cruzó de brazos, admirando el horizonte desde la ventana del palacio de la arconte Dendro, que hace tiempo ya había dejado de ser una cárcel. Y suspiraba. Y Nahida lo miraba de reojo.

—Tus pensamientos son muy fuertes, tu...

—¡Deja de hacer eso!

—¡No es mi intención, solo piensas muy ruidosamente!

—¡Buer!

—¡Lo lamento!... ¿"Kahedehara" Kazuha, en serio?

—Dioses, eres la peor, te odio.

—Shhh, no digas esas cosas.

—No me hagas decirlas.

—¿No había alguien más en tu viaje de autodescubrimiento del que puedas enamorarte?

—Dejame en paz, en serio voy a enfadarme y no nos conviene a ninguno de los dos, Buer.

—No me llames así, y cuentame más de ese chico sin que tenga que arrancartelo de la mente.