✨ Epílogo✨

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Cinco meses más tarde.

Emily.

El amor no mata, pero si duele.

Esa es la típica frase ¿Verdad? No mata pero duele, pienso en que, realmente el amor no debe de doler, pero de alguna manera siempre termina haciéndolo ¿No? Por lo menos a mí sí. Me hizo sentirme como si estuviera en alguna nube cómoda y feliz, para después dejarme caer de golpe.

Es una ideología algo compleja o extraña, pero supongo que muchos le encontramos algo de sentido. El cómo te enseñan a amar, pero no a olvidar y tienes que vivir con ese caleidoscopio de recuerdos en tu mente y con ese dolorcito en tu pecho por un largo tiempo.

Supongo que, aunque sea una vez en la vida queda quien tiene que pasar por eso ¿Verdad?

Hoy cumplo diesiocho años, no me genera mucha emoción, pero trato de que no se note  ante los ojos de las demás personas. Sobre todo a los ojos de mis amigos que me han invitado a salir y que aún no han llegado llegado por mí.

No tengo mucho que decir de esto último cuatro menses. Todo ha ido momentáneamente bien.

Issac y Thomas, siguen como siempre, por supuesto que no cambiarán absolutamente nada. Siguen siendo ellos. Andrea al igual, volvió en enero de argentina, como lo hace siempre y a todo esto cabe decir que  Thomas y ella siguen juntitos. Extremadamente juntitos.

Duran más en una relación que nosotras.

En cambio yo... Yo sigo como siempre, salvó que ya no llevo el cabello pintado de rojo. Y aparte de eso he decidido tomarme un año antes de ir a la universidad, aunque ya tenga todo planeado; la carrera y la universidad. Es todo lo contrario a lo que han decidido mis amigos.

Por otro lado, la relación de mi mamá con su novio, Miguel, a avanzado muchísimo. Lo resumiré: Miguel le ofreció a mi mamá que viviera con él, mamá le dijo que no así que llegaron a un acuerdo y ahora es Miguel quien vive con nosotras desde hace unos dos meses. Y debo admitir que al principio me resultaba extraña la presencia de él en mi casa, pero creo que ya me voy acostumbrado. Ahora me agrada más y además me trata como si fuera su hija.

Despues de aquel día en dónde básicamente me rompieron el corazón, si se puede decir así; los siguientes en enterarse de lo de Evan fueron Thomas e Isaac que sinceramente se enfadaron tanto como se sorprendieron. Andrea se enteró después de que regreso de navidad y prometió matarlo con sus propias manos, algo parecido a lo que me dijeron los chicos. Y sin embargo les dije que no tenian que arruinar la amistad que tenían con Evan, por algo que solo tenía que ver con nosotros dos, y aunque casi me comen viva al escucharme decir eso, me comprendieron y me ofrecieron sus hombros para desahogarme, más los consejos poco servibles de Isaac, pero que sin duda valieron oro.

Mentiría al decirle que esa noche dormí y no espere un mensaje de su parte, después de ver el dibujo, leer la carta y contarle lo que pasó a mi mamá y ella en llenará de caricias consoladoras, diciendome que yo no tenia la culpa de nada, que a veces la gente se va sin dejar muchas  razones.

Y de hecho estuve esperando un mensaje, una llamada, cualquier cosa por parte de él, durante días, pero fueron algo que nunca llegó.

También mentiría al decir que no intente yo comunicarme con él, porque ya sabríamos que es mentira. Porqué lo intente, lo intente inumerables veces, pero siempre obtenía la misma respuesta; Nada. 

Esos días de diciembre fueron un infierno.

Luego me di cuanta de que me bloqueó de sus redes sociales, y lo peor es que nunca recibí nada, ninguna explicación. Nada. Eso fue lo que más me dolió. Me cuestione si todo el tiempo que pasamos juntos realmente fue real, si todo lo que me dijo y lo que me mostró fue real y no un simple juego todo el tiempo como una vez lo asegure yo.

Un curioso desastre [nueva versión] [Libro #1] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora