Cuestión de Tiempo | Caché

Capítulo 11

Pov María José

Pasábamos nuestras últimas horas en la gran manzana.

Dejamos el lujoso hotel y fuimos a comer antes de que el autobús nos llevara al aeropuerto para volver a Miami.

Mariana: Chicas, ¿cuándo volvamos a Miami, si las saludo por el pasillo del instituto me saludarán? -preguntó tímidamente.

Amalia: Ay, que adorable eres Mariana. -le pellizcó la mejilla-. Pues claro, por lo menos yo sí lo haré, y espero que sea más que un saludo, almorzar con nosotras y salir por ahí de vez en cuando.

Poché: Sí. Ahora te tocará aguantarnos, créeme que no es bonito que Amalia te cuente cada capítulo de cada serie que ve. -todas reímos.

En este viaje han pasado muchas cosas pero lo mejor ha sido encontrar a Mariana.

Estábamos dejando las maletas en el autobús cuando Calle y su grupito se acercó.

Ella y Mariana dejaron su maleta al mismo tiempo, cuando Calle se iba a ir otra vez con los estúpidos de sus amigos Mariana la cogió del brazo.

Mariana: Eh, Calle, quiero que sepas que no voy a contarle a nadie, ninguna de las conversaciones que hemos tenido.

¿Qué querrá decir con eso?

Calle: ¿Y qué? Me da igual lo que digas o lo que cuentes, es tu palabra de perdedora contra la mía. -ahí estaba la Calle engreída de siempre.

Mariana: Solo quería que lo supieras, nada más. - se fue hacia donde estábamos Amalia y yo, mirando la escena pero se volvió a girar - sabes, te invito a que tengas las mismas conversaciones que tuviste conmigo con cualquiera de esas. -señaló al grupo de Calle con la cabeza- A ver cuanto tardan en burlarse de ti. -no espero respuesta y subió al autobús.

Yo me senté con Amalia y Mariana se sentó detrás de nosotras sin nadie al lado.

Amalia: ¿Qué ha pasado ahí fuera? ¿Qué era todo eso Mariana?

Sí, yo también quería saber.

Mariana: Nada chicas, lo siento, pero he dicho que no diría nada y no lo haré, aunque fuera a la estúpida de Calle le he dado mi palabra. Perdonadme.

Poché: Camacho, te acabas de ganar todo mi respeto, siempre eres fiel a tus pensamientos sin importarte lo que piensen de ti. Muy bien. -ambas sonreímos.

Llevábamos un trozo de camino.

Poché: Ay, Amalia, ve y siéntate con Mariana que también está durmiendo y déjame leer tranquila. - la empujé lejos de mí.

Amalia: ¡Uyy! Que mal humor. -se sentó con Mariana se apoyó en ella y volvió a dormirse.

A los diez minutos el profesor avisó que íbamos a parar en una estación de servicio por si alguien quería ir al baño.

Poché: Chicas -las llame-. Chicas, ¿bajan? Voy al baño y a comprar chicles. ¿Quieren algo? ¿Chicas? ¿Amalia? ¿Mariana?

Seguían durmiendo.

Amalia: Yaaaaa, Poché, baja y no molestes -dijo malhumorada.

Mariana: Eso, no molestes. -dijo apoyando su cabeza en la de Amalia.

Poché: Que amor de personas, ahora vuelvo. - avisé. Agarré mi abrigo y la mochila donde llevaba el dinero y salí del autobús.

Compré los chicles y fui al baño.

Pov Daniela

Pensé todo el camino en lo que Mariana me dijo.

P.Fick: El que quiera bajar que baje ahora. -dijo el profesor.