Capítulo 26

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Pov María José

Poché: Bueno, qué esperas, abre la puerta.

Calle: Poché, yo no cogí la llave, tú lo hiciste.

Poché: Mmm, no, tú. Vamos, déjate de bromas y abre.

Calle: No estoy de broma, yo no tengo la llave.

Poché: ¿Y ahora qué? ¿tengo que bajar a por una a recepción? -me quejé.

Calle: Sí, por fa, ve tú, yo te espero aquí -dijo tiernamente.

Bajé a recepción y tardé algunos minutos en conseguir una llave nueva ya que abajo todavía había algo de revuelo por lo del incendio.

Me encontré a Daniela apoyada en la puerta de la habitación, sonrió al verme llegar.

Calle: Por fin, ¿qué has ido a fabricar tú misma la llave? -dijo separándose de la puerta y se la di. Le sonreí-. ¿Qué?

Poché: Estás deseando volver ahí dentro conmigo.

Calle: Uno -dijo poniéndose cerca de mi- estoy deseando entrar porque hace frío y tengo sueño, y dos... -hizo una pausa-. Como si tú no estuvieras deseando volver ahí dentro conmigo.

Poché: Va, abre la puerta -dije, se giró hacia mí después de meter la llave en la cerradura.

Calle: Uy, cuanta prisa tienes, ¿no? -dijo burlándose.

Poché: Hace frío y tengo sueño -dije imitándola.

Calle: Aja, eso será.

Poché: ¿Quieres abrir ya?

Calle: Voy, voy, tranquila... -abrió la puerta.

Ella pasó delante y cerré la puerta detrás de mí, nos quedamos mirándonos unos diez segundos la una a la otra sin saber muy bien que hacer o que decir y, como si ambas nos hubiéramos puesto de acuerdo telepáticamente, ella corrió hacia mí y yo hacia ella, saltó encima de mí rodeando mi cintura con sus piernas y mi cuello con sus brazos, nuestros labios se unieron como si hubieran estado años sin tocarse.

Calle: Vamos a provocar nuestro propio incendio -dijo separándose de mí, la miré con cara de "no acabas de decirme eso" y le sonreí coquetamente.

Poché: El lado sexy de Calle... Mmmm, me encanta -dije atacando de nuevo sus labios, fui hasta la cama y nos dejé caer en ella.

Calle: Yo siempre soy sexy, Garzón -dijo después de volver a besarme.

Poché: Claro, sí, obvio, siempre -dije con un poco de burla en mis palabras.

La agarré de la cintura y la acomodé más en la cama.

Calle: Esto es mío -dijo refiriéndose al pijama.

Poché: Quítamelo entonces -eso hizo. Se levantó quedando sentada con la espalda apoyada en el cabecero de la cama.

Calle: Te queda bien -dijo levantando la camiseta y poniéndola de nuevo del derecho-. Te ves muy adorable... Vale, nunca pensé que diría eso en voz alta -rió. Puse cada una de mis rodillas a un lado de las de ella y me senté en sus piernas.

Poché: ¡Eh! Yo soy adorable -dije poniendo cara de enfadada.

Calle: Lo que tu digas -agarró mi cuello y me "obligo" a besarla, sin despegarme de ella bajé la cremallera de la chaqueta y acaricié su piel. Después de un rato sintiendo sus cálidos y suaves labios fundirse en los míos se separó y suspiró.

Cuestión de Tiempo | CachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora