Capítulo 50

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Pov María José

Han pasado días desde que Dani y yo tuvimos ese momento de pasión romántico.

¿Qué cómo estamos ahora? Ojalá pudiera decir que me lancé y le confesé todo mi amor y que ella me correspondió y somos felices y todo es amor, pero no. Ambas estamos como si no hubiera pasado nada, ¿el por qué? Supongo que es el miedo a decir o hacer algo indebido que acabe definitivamente con lo que hemos creado, esta "amistad", o lo que sea.

No es que nos estemos evitando solo que no hablamos de ello.

Andaba por los pasillos cuando me encontré una escena de lo más peculiar.

Mi querida amiga Amalia y mi mejor amiga Nela estaban besándose, tan ocupadas se encontraban que no notaron mi presencia.

Poché: Esto es un lugar PÚBLICO –grité detrás de ellas. Nela alargó el brazo haciendo la seña de que me fuera, sin dejar de besar a mi amiga-. Ya, déjala, chica -la separé de Amalia- ¿Alguna me va a explicar esto?

Nela: Mmm -estaban las dos delante de mí-. Vale, mira -tomó a Amalia y la besó, así como en las películas y yo seguía ahí mirando.

Y al parecer eso de los polos opuestos siempre se cumple.

Poché: Vale, vale, ya entendí -me acerqué a Nela y le apunté con el dedo-, haces sufrir a mi amiga y no lo cuentas -después me dirigí a Amalia de igual manera- Haces sufrir a mi amiga y tampoco lo cuentas -rieron-, y bueno, me alegro por ustedes y esas cosas -les di un abrazo.

Estuvimos hablando un rato, me explicaron como Nela se declaró. No paraba de mirarlas, eran muy amorosas, intentaban comportarse "normal" porque no me querían incomodar, pero se les notaba que querían estar juntas.

Nela se tuvo que ir a entrenar no sin antes tener su momento romántico con Amalia al despedirse, mientras yo no podía hacer otra cosa que mirar.

Fuimos a la habitación de Amalia.

Amalia: Poché, ¿no te molesta que esté con Nela? - me sorprendió la pregunta.

Poché: ¿Qué? ¿por qué me iba a molestar? Claro que no.

Amalia: No sé, es tu mejor amiga y yo tu otra mejor amiga, ¿no te resulta violento?

Poché: Tú eres feliz con ella, ella es feliz contigo, eso es lo único que me importa.

Amalia: Sabes, te voy a confesar algo, una de las dos razones por las que no salía con Nela y no me animaba a decirle nada era por lo que podías pensar, por si te enfadabas conmigo por ella o algo parecido.

No puede ser tan buena amiga, ponía mi bienestar al suyo.

Fui a abrazarla.

Poché: Nunca me enfadaría por verte feliz sea con Nela o con el Papa de Roma, ¿entendido? -me separé de ella- Ahora, si me enfadaré si no me haces madrina de tu boda -reímos.

Amalia: Para eso aún queda mucho.

Poché: Yo solo te aviso, que después no quiero malentendidos... Por curiosidad, has dicho que había dos razones por las cuales no salías con Nela, una era yo ¿y la otra?

Amalia: Era Daniela.

Poché: Oh -dije secamente.

Amalia: Creía que estaban juntas y los celos se apoderaban de mí.

Me tranquilizaba saber que no era la única celosa con toda la situación Nela-Daniela; celos que ahora veo un poco estúpidos teniendo en cuenta que a Nela le gusta Amalia, claro, pero eso yo no lo sabía.

Cuestión de Tiempo | CachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora