XXXI

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"¿Quién es él?"


"Tienes las manos frías"

"El inframundo no es un lugar muy cálido"

"Ven conmigo."

Una voz le suplicaba.

"Te estoy pidiendo muy poco, solo ámame y podrás tener todo lo que tú desees."

Lo miró, arrodillado frente a él, suplicando por él.

"¿Por qué tienes tanta prisa?"

"Porque te amo ti y solo quiero estar contigo. Y mientras más tiempo dejemos pasar, menos será lo que podamos estarlo."

"Eres cálido y haces que mi miserable existencia tenga una razón de ser"

Había un tono de tristeza en aquella voz y el sentimiento de alejarla se plantó en su pecho.

"yo no te voy a dejar."

"Pero tú no eres eterno."


"¿Quién es él?"


Miró el anillo en su dedo anular, se sentía demasiado bien llevarlo.

"¿No crees que es muy pronto para un anillo?"

Hizo contacto con aquellos ojos que mantenían inquietas las mariposas en su estómago.

"Tómalo como una promesa."

Quería ser escuchado, quería que su opinión también sea tomada en cuenta.

"Lo quiero solo a él."

"¿Que hay en tus sueños?"

"Solo fuego."

Estaba corriendo hacia él, cada paso se sentía pasado pero solo podía pensar en llegar a él.

No importaba nada, había atravesado el fuego solo por él y recibiría la flecha solo por él.

"¡Jungkook!"


"¿Quién es él?"


sentía frío su pecho, pero no había más. Lo miró, dándole lo que serían las últimas palabras, se despidió, mientras él lo sostenía con su mirada cristalizada.

"No pude quitarte las pesadillas."

Se disculpó, aunque no hubo nada por lo que debiera hacerlo. Jungkook no lo culpaba.


"¿Quién es él?"



-YoonGi.








-¿Que pasó?- humedeció sus labios con la lengua, parecía como que acababa de despertar de un largo sueño.

-Te desmayaste.- conforme iba recuperando sus sentidos, el tacto de una mano sobre la suya fue intensificándose.- Tú... mientras dormías...- Se estuchaba titubeante. Jungkook se incorporó un poco en el sofá para mirarle.

Jungkook lo miró, de arriba a abajo y de todos los ángulos posibles.

-Dijiste mi nombre en tus sueños.- aunque él todavía no se animaba a devolverle la mirada.- Jungkook ¿Me...?

Sus ojos se cristalizaron, estaba comenzando a llorar y sus sollozos fueron rápidamente escuchados por el Dios frente a él.

Solo tuvo que ver su rostro otra vez, y todo regresó a él, como una bomba de información.

Todo.

Lo que creyó que eran solo sueños, todo aquello de verdad lo había vivido y tenerlo allí de frente, mirándolo, tocándolo, hizo a Jungkook darse cuenta que nada nunca fue un sueño.

-YoonGi.- Dejó las lágrimas correr por sus mejillas, no trato de ocultarlas o limpiarlas. Solo quería una cosa.

Una sola.

-Por Zeus, Jungkook.- YoonGi no se hizo esperar más y soltó el dorso de la mano de Jungkook para envolver todo su cuerpo en un abrazo.

Se sentía lleno.

Se sentía completo.

YoonGi no se atrevió a soltarlo, hasta que pudo sentir como su llanto se calmaba, solo entonces se apartó un poco, lo suficiente para ver su rostro. Estaba rojo, de sus mejillas y su nariz, sus ojos aún brillaban por las lagrimas pero aún con todo eso seguía mirándose hermoso. Llevo sus manos a las mejillas de Jungkook y limpio los restos de lágrimas que habían quedado en ellas.

-¿De verdad me recuerdas?- aún estaba la duda. Después de todos los años que espero, era de extrañarse que dudará.

-Tienes las manos frías.- Fue apenas un susurro que solo escuchó YoonGi.

-¿Te he dicho que el inframundo no es un lugar cálido?- YoonGi sonrió, contagiando a Jungkook, que también lo hizo.

-Creo que ya había escuchado eso.- YoonGi sintió haber liberado un gran peso de encima suyo.

No sabe por qué, pero le dieron una segunda oportunidad de vivir de nuevo al lado de YoonGi.
Esta vez no la quería desaprovechar.

-¿como es posible que recuerde todo?- después de que Jungkook despertara, comenzaron con la sesión de preguntas.

-Porque yo se lo pedí a Gea.- explicó YoonGi.- No pude soportar tener que llevar tu alma y Gea me prometió traerte de vuelta.

-Los recuerdos de tus vivencias eran parte del trato, supongo.- hablo la nana.- Aun así, hay algo que me preocupa.

-¿Que cosa?- preguntó Jungkook, el tono de voz de la mujer no decía nada bueno.- "para poder estar juntos, uno de ustedes deberá sacrificar algo"-recordó entonces las palabras que le había dicho aquel tiempo.

Aquellas palabras eran las mismas que le habían dicho antes, el sacrificio de algo importante.

-¿Que significa eso?- Preguntó YoonGi mirando a Jungkook.

-Eso fue lo que nunca te quise decir.- Suspiró, tratando de recordar más de aquel día.- Yo tampoco supe que significó en su momento.

-Uno de ustedes deberá renunciar a lo que es.- Habló NamJoon, captando la atención de todos.

-¿Como sabes que a eso se refiere?- preguntó YoonGi.

-A eso me refería cuando te dije que no podrían estar juntos.- YoonGi lo miró aun más confundido.- no pueden amarse siendo Dios y mortal. Ambos deben de ser un igual.

-¿Te refieres a...?

-A que para estar juntos Jungkook debe aceptar la inmortalidad.- explicó SeokJin.- O...

-O tú debes aceptar la mortalidad.- YoonGi y Jungkook se miraron mutuamente.







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YA LO RECORDÓ
saben cuanto tiempo espere para que esté capítulo llegará?
Mucho

Espero que tengan buena memoria y recuerden los diálogos del principio (porque yo no me acordaba, tuve que buscarlos en el otro libro)

Ya estamos en los últimos, viendo cómo está avanzando la historia en los borradores que tengo, este acaba en el 40 (espero)

Gracias x leer <333

Until I Find You Donde viven las historias. Descúbrelo ahora