Hemos pasado estás últimas semanas, en una luna de miel inminente y hemos evitado a toda costa el tema de su alistamiento. Bueno, Jules lo ha evitado. Yo he tratado de obtener algún tipo de información de él, pero se niega a cooperar y compartir cualquier tipo de información conmigo. Estoy a solo unos días de irme al campo de entrenamiento, en el que no se me permite el contacto con el mundo exterior por al menos cuatro semanas. Y me voy a volver totalmente loco sin saber de él y la decisión que ha tomado finalmente.
Sin embargo, cuándo me despierto, Jules no está a mi lado como de costumbre. Cuando toco su lugar está frío, y una sensación de malestar se instala dentro de mí. Siento mi corazón caer hasta mi estómago en un horrible presentimiento. Algo no se siente bien. No sé qué es, pero no se siente bien.
— ¿Julie? —pregunto con voz ronca, creo que he hablado demasiado despacio como para que me escuche si él está en la cocina, aunque una voz dentro de mi cabeza me dice que él no está más aquí. Esto es lo que he estado temiendo por mucho tiempo. Hay un nudo en mi garganta del tamaño de la puta Alaska. — ¿Cariño? —intento nuevamente, pero no hay respuesta. Me desenredo de las mantas y voy a la cocina, que es el lugar más lógico para encontrarlo, sin embargo, él no está aquí y todo está mal.
No hay sonido de pezuñas en el suelo de madera cuándo me acerco, el enorme perro pitbull color chocolate no está. Angie no está y Julie no está. Todo está jodidamente mal. Y sé, por alguna razón que no están dando sólo un paseo por el parque, lo sé, no me preguntes como lo sé, pero lo hago. Porqué cuándo me muevo para buscar la cama de Angelina no está, y tampoco están sus dispensadores de agua y alimento. Y cuándo voy a nuestra habitación, gran parte de la ropa de Julie tampoco está, y no sé cómo demonios aun estoy de pie y respirando cuándo siento que mi corazón está partido por la mitad.
Él se fue. Él se fue y no me dio ni siquiera una jodida advertencia. Simplemente se alejó de mí como si no fuera importante para él.
Mi tiró en la cama y me cubro la cara con su almohada. Huele a él. Maldita sea. Hay un agujero en mi pecho que duele tan malditamente tanto, y amenaza con tragarme vivo. Y no es hasta que muevo la almohada que me doy cuenta que he estado derramando lágrimas silenciosas, por el hecho de que la tela está húmeda.
Cuando me giró de costado, me doy cuenta que hay un papel doblado delicadamente sobre la mesita de noche, supongo que lo pasé por alto cuándo salí apresuradamente a buscarlo.
Zev.
Sé que soy un cobarde, ¿de acuerdo? Sé que ahora mismo me odias por hacerte esto, por quitarte la oportunidad de despedirte de mí, supongo que al final no soy mejor que mi madre, ¿no es así? Supongo que por primera vez entiendo sus motivos para protegerme. Aunque esto es totalmente diferente. No estoy protegiéndote, estoy protegiéndome a mí. Por qué no puedo soportar tu mirada decepcionada cuándo veas que es lo que he elegido finalmente.
Te amo. Más que a nada y más que a todo. Pero esto es algo que va más allá de mí mismo, es algo que tengo que hacer. He estado pensando en esto desde hace mucho tiempo, más tiempo del que recuerdo, creo que ha estado conmigo desdé que mi madre me arrancó mi oportunidad de despedirme de él. Creo que al final tenías razón, ¿no es así? Quizá esto se trate de algún complejo de héroe u honrar su memoria. No lo sé, sólo sé que es algo que tengo que hacer.
Además, ¿cómo se supone que vivamos una vez que estés en la NFL? Cariño, aceptar que tienes un novio te traerá todo tipo de dolores de cabeza con tu equipo y la prensa, mucha presión para tu primer año de novato, ¿no lo crees?
Sé que te preguntarás ¿dónde diablos está Angelina? Bueno, ella está en Filadelfia con mi madre. Ella la cuidará mientras yo esté desplegado, cuándo vuelva, puedo hacerme cargo yo mismo de ella, pero supongo que este será un arreglo permanente hasta que pague mi montaña de deudas.
Sí, estoy dando un montón de vueltas alrededor para no tener que hablar de nosotros, pero ¿hay un nosotros después de esto? La respuesta es obvia, ¿no lo crees? No puede haberlo. Voy a estar a miles de millas lejos de ti, probablemente en un país desconocido o algo así y tú alternaras entre estar en Detroit y correr por el resto del país. Nunca te pediría que me esperes, eso sería tremendamente egoísta de mi parte y no puedo hacerte eso.
Se feliz, Zev.
-Jules.
Claro, porqué la única vez que es un jodido egoísta hijo de puta, es la vez que me patea el trasero.
¿Cómo coño puedo ser feliz? Mi felicidad es este hombre, él es todo lo que quiero y él me pide que sea feliz como si no hubiera empacado mi puto corazón en su jodida maleta también. Además, se llevó a nuestra chica, y ni siquiera me dio una oportunidad para ser yo quién la tuviera. Quizás así, solo tal vez podría verlo por lo menos de vez en cuando.
— ¿Que mierda, Julie? —sollozo y es tan patético. Soy el mayor cliché del mundo, llorando frente a una carta de la persona que ama. Maldita sea. El papel está manchado por grandes gotas de agua que caen de mis ojos y lo alejo rápidamente para no estropearlo.
Si la partida de Karime se sintió como una bofetada, la partida de Jules es literalmente una patada en las bolas.
¿Cómo demonios debo seguir con mi vida? Ese hijo de puta no pensó ni un segundo en mí, ni como me afectaría. Pero, ¿cómo lo haría? Si nunca hablamos sobre sentimientos o alguna mierda. Todo giró en torno al sexo, y me siento como una mierda, sólo de pensar en que si le hubiera dicho cuánto lo amo desde mucho antes, probablemente hubiese habido alguna diferencia sobre su decisión.
Maldita sea, lo amo.
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Mentiras
RomanceEs tu mejor amigo, Zev. Deja de pensar con tu puto pene. Sin embargo, mi mejor amigo se inclina y roza sus labios suavemente con los míos. Y resistirme a su beso es solo una prueba de que hemos estado acumulando una pila de explosivos durante los do...