v e i n t i s i e t e ;

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Ese día de escuela estaba siendo bastante agotador. Había tenido dos exámenes un mismo día y me dejaron toneladas de tarea para dentro de dos días. Aunque estaba algo ansioso porque acabara la jornada. Luego de la cena había parado de llover, por lo que Namjoon vino por Taehyung a casa, aunque se quedaron algunos minutos hablando con mamá, para ponerse al día. Jimin también se marchó, diciendo que quería enseñarme algo importante y que me buscaría luego de la escuela. No podía dejar de pensar en aquello que Jimin quería mostrarme, por alguna razón estaba muy emocionado por saber de qué se trataba. Y mi emoción aumentó aún más cuando lo vi en la salida esperándome.

-¿A dónde vamos? -pregunté curioso, observándolo.

-Sé paciente, va a gustarte.

¿Querrá llevarme a algún lugar para pintar? No había traído mis latas hoy. Caminamos por una gran avenida un largo rato y luego doblamos hacia un barrio silencioso, donde luego de caminar unas calles más, llegamos a un estudio de baile. El lugar era muy grande, pintoresco y muy iluminado. Había bastante gente en este momento y en cuanto notaron a Jimin, vinieron a saludarlo y darle la bienvenida. Imagino que es su academia de danza y ellos son sus compañeros.

-Jungkook, esta es mi academia. -volteó a verme-. Y ellos son mis amigos. Chicos, él es Jungkook, amigo y vecino.

-Hola. -dije tímidamente con una reverencia. ¿Por qué habría de querer presentarme con sus amigos? Se notaba que varios de ellos eran más grandes que él, por ende, más grandes que yo.

-¡Ah, es un encanto! -soltó una chica, alta, delgada y muy sonriente-. ¿Qué te trae por aquí, Jungkook? ¿Quieres unirte al grupo de baile con nosotros? -por alguna razón me hablaba como si fuera un niño; había inclinado su cabeza hacia un costado, se había agachado apenas unos centímetros y había colocado sus manos sobre sus rodillas.

-Uh-...

-Necesitamos hablar con el señor Song, ¿lo han visto hoy? -habló Jimin por mí, pasando un brazo por mis hombros.

¿Quién demonios era el señor Song?

-Yo lo he visto irse al local de al lado, saludó y se marchó. -dijo un chico de tez morena.

-No te atreverías a dejarnos, ¿verdad, Jiminie? -otro chico, un poco mas bajo, lo miraba con algo de recelo. Jimin rio.

-Todo lo contrario. Gracias.

Nos marchamos por una puerta de vidrio polarizado que había en uno de los laterales del gran salón, ingresando a otro igual de inmenso con poca gente, en su mayoría hombres, estaba menos iluminado, diría también que hasta menos cuidado y... ¿con un ring en el centro? No puede ser.

-Espera aquí, iré a buscar al señor Song. -me decía Jimin, que se marchó por un pequeño pasillo, dejándome en una zona algo oscura, solo.

Observé el lugar con más detenimiento. Las paredes estaban de un blanco sucio y con manchas de humedad, que intentaban ser decoradas con unos graffitis viejos y saltados. Había algunos focos de luz, pero esta era amarillenta y algo tenue para la dimensión del salón. Las ventanas estaban tapadas con diarios y papeles oscuros, algo que llamó profundamente mi atención. Realmente era un gran contraste entre ambos salones. A lo lejos podía observar cómo las personas golpeaban sacos de arena, saltaban una soga, hablaban entre ellas y reían, había buena vibra, se notaba desde lejos. Y detrás de mí noté un gran ventanal, también polarizado, que me dejaba ver toda la sala de prácticas de baile.

Jimin regresó con un hombre a su lado, hablando animadamente.

-Señor Song, él es Jungkook, el chico del que le estuve hablando. -me reverencié ante el hombre y él amplió su sonrisa.

﹗𖥻 ˖𓍯  𝑌𝑜𝑢 𝐴𝑟𝑒 𝑀𝑒, 𝐼 𝐴𝑚 𝑌𝑜𝑢 » 𝙅𝙞𝙠𝙤𝙤𝙠 ✔︎ ©𝐌𝐢𝐤𝐡𝐚𝐢𝐥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora