Roommates | Jake Sim

capítulo 10

Terminé de maquillarme y me miré en el espejo, me veía muy bonita. No solía maquillarme muy seguido pero en verdad me gustaba hacerlo, simplemente me daba flojera.

Guardé mi celular en mi bolsa y me levanté para salir de la habitación, no faltaba mucho para que Sunoo pasara por mí. Para mi mala suerte, Jake estaba en el departamento y justo en ese momento estaba en la sala viendo la televisión.

Suspiré yendo a la cocina para tomar un poco de agua antes de irme. Sentí unos pasos acercándose a mí y vi de reojo a Jake buscando algo en el refrigerador.

— ¿Vas a salir?—no me esperaba que me hablara.— Te ves bien.

— Gracias... Voy a salir con un amigo, vamos a ir al cine.—respondí sonrojándome por su cumplido, le di la espalda para que no lo notara mientras lavaba el vaso que usé.

— ¿Es una cita?

— No, sólo una salida de amigos.—la verdad no estaba muy segura de si era una cita o no, Sunoo me agradaba pero no éramos tan cercanos como para llamarnos amigos, así que mentí un poco ahí. Tampoco podía saber si estaba interesado en mí, siempre que hablábamos era muy cariñoso y juguetón, tal vez así era su personalidad.

— ¿Un chico y una chica solos en un lugar oscuro? A mí me suena a que es una cita...

— ¿Y? ¿Te molesta que tenga una cita?—lo miré molesta, rodó los ojos tomando de la cerveza que tenía en la mano.— Te molesta que salga con un amigo pero ayer dejaste que tu amigo me tocara sin mi permiso y... ¿Sabes qué? Olvídalo, ya me voy.—caminé hacia la puerta, esperaría a Sunoo abajo.

(...)

— ¿Qué película veremos, Sunoo?—pregunté cuando llegamos al cine.

— Una de terror, se me olvidó preguntarte si estabas bien con eso...

— Nah, está bien, me hubiera molestado si veíamos una de romance o acción.—le sonreí pellizcando su mejilla.— ¿Quieres palomitas?

— No, tengo reservación para un restaurante así que no quiero llenarme con palomitas. Vamos.—comenzó a caminar mientras yo me quedaba parada en mi lugar, ¿tenía una reservación? ¿En verdad era una cita?— ¡Noona, vamos, no te quedes atrás!

Salí de mis pensamientos y lo alcancé antes de llegara a la arquilla. Sunoo empezó a hablar con la empleada del cine pero no presté mucha atención, tenía muchas preguntas, ¿le gustaba a Sunoo? ¿Desde cuándo? ¿Por qué? Yo no lo veía de manera romántica, para mí era como un primo al que vez todos los días porque es tu vecino, lo quieres pero no tanto, te agrada pero no tanto. Lo miré de reojo, el trabajo era mi lugar seguro, por así llamarlo, no tenía dramas amorosos y podía estar en paz un rato. Al menos hasta ese momento.

Sunoo, por favor, no gustes de mí. Por favor, por favor.

— Noona, vamos a la sala, la película está por comenzar.—tomó mi mano y me llevó con él hasta la sala de proyección. Los asientos que escogió estaban justo en el medio, era un buen lugar. Nos quedamos en silencio mientras la película iniciaba. 

La película era buena, no daba mucho miedo pero estaba entretenida. Volteé a ver a Sunoo, parecía disfrutar de la película también. Eso me sorprendía, por su apariencia adorable creí que estaría totalmente asustado.

Eso me recordó a un día que uno de nuestros profesores nos puso una película de terror ya que era el último día de clases, sólo habían pasado quince minutos cuando Jake salió asustado del salón. Me pareció muy tierno... Fruncí el ceño, ¿en serio tenía que pensar en Jake todo el tiempo?

— ¿Te gustó la película?—salimos de la sala después de que la película finalizara, entrecerré los ojos por el cambio de luz y me giré hacia Sunoo.

— Sí, estuvo buena... Ah, necesito ir al baño, espérame aquí, ya vuelvo.—salí casi corriendo al baño, por eso no me gustaban mucho los cines, siempre estaban tan helados que me daban ganas de orinar.

Entré a un cubículo e hice mis necesidades, justo en ese momento comenzaron a escucharse voces de un grupo de chicas.

— ¿Sabes quién es Sim Jaeyun?—iba a bajarle al baño cuando escuché el nombre de Jake, bueno, podía ser cualquier otro Sim Jaeyun.

— ¿El sexy australiano del departamento de Física?—oh, bueno, sí hablaban de Jake. Pegué mi oreja para escuchar de qué hablaban.

— Hay un rumor... La gente está diciendo que es virgen y que ni siquiera ha besado a una mujer.—hice una cara de asco queriendo decir "¿y? ¿en qué les afecta?".

— Igual escuché uno, dicen que es gay y que golpeó a su pareja en Australia, por eso vino a Corea...—solté un resoplido bajándole a la cadena y salí del cubículo fulminando con la mirada a las chicas. Me acerqué a lavarme las manos y ellas siguieron hablando como si nada.

— Disculpen que me meta... Pero no deberían esparcir rumores que no les consta que sean ciertos, ¿les parecería gracioso que los rumores fueran de ustedes? No, ¿verdad? Así que no hagan cosas que no les gustaría que les hicieran.—sequé mis manos y me fui de ahí, ni siquiera vi sus reacciones. ¿Así era la vida universitaria? 

Volví con Sunoo, quien me estaba esperando mientras miraba las imágenes que habían de películas en las paredes del cine. Luego nos fuimos al restaurante donde tenía la reservación, era lugar algo elegante y sentí que mucha gente se me quedó viendo por mi atuendo pero los ignoré.

— Noona, tengo algo que decirte.—levanté la mirada del menú y miré a Sunoo.— Te invité porque... Había invitado a una chica que me gusta mucho pero me rechazó, ya había pagado todo pero tampoco quería venir solo, así que te invité, lo siento... —respiré aliviada y me pasé una mano por el cabello.

— No te disculpes... Creí que gustabas de mí y estaba un poco nerviosa, no me malentiendas, eres guapo y todo pero ya tengo suficiente con mi vida amorosa como está ahora.—soltó una risa.

— Entiendo... ¿Te gustaría hablar de eso?—el mesero se acercó y pedimos la comida, yo pedí un platillo barato, todo estaba demasiado costoso para mí.

— ¿Recuerdas el chico que se nos quedó viendo ayer? Mi roommate... Es también mi amor de secundaria.—dije avergonzada.— Las cosas entre nosotros están incómodas porque el otro día se me confesó y lo rechacé apesar de que... Aún siento algo por él.

— ¿Por qué?

— No lo sé, siento que está enamorado de la persona que fui antes... Y odio como era en ese entonces, si él me hubiera dicho que saltara de un puente lo hubiera hecho... Estaba muy desesperada por amor que hubiera hecho cualquier cosa por tenerlo.—hablé bajando la mirada. En ese momento nos trajeron la comida, le agradecimos al mesero y comenzamos a comer en silencio.

— ¿Sigues enamorada de él?—Sunoo rompió el silencio. Me puse a pensar, ¿seguía enamorada de él? Más bien, ¿en algún momento estuve enamorada de verdad?

Después de una situación que me pasó me puse a reflexionar si alguna vez había amado a alguien de verdad o era que simplemente buscaba el amor en hombres ya que no me sentía amada por mi familia. Cuando iba a terapia, el psicólogo me dijo que padecía de carencia afectiva pero no llegué a la parte de trabajarlo para poder superarlo.

— La verdad no lo sé.