RubiusBowl Month

Extra 3 - DESPERTAR - Parte 1

Flashes en la oscuridad, así comenzó su despertar, imágenes de Auron diciéndole que todo estaría bien, del doctor poniendo la anestesia, del dolor en su espalda baja después de la epidural... el llanto de los bebés, Vegetta...

Gruñó de forma involuntaria, le dolía la cabeza y había un sabor metálico en su boca, sus extremidades se sentían pesadas, como si no las hubiera movido en mucho tiempo. Era extraño, cómo si no fuera la primera vez que intentara despertar, aunque parecía como si esta vez fuera más fácil. A su cabeza llegó un recuerdo extraño, cómo si antes de ese momento una fuerza oscura y aterradora hubiera estado impidiendo que abriera los ojos... pero ese día de pronto se había desvanecido y él al fin tenía la fuerza para mover sus párpados...

Parpadeó varias veces, enfocando cada vez más efectivamente la mirada, hasta que por fin logró distinguir con más claridad lo que estaba frente a él, y reconoció lo que parecía ser un domo de cristal cubriéndolo, cómo si fuera una...¿tumba?. La loca idea de que había muerto aquel día en que dio a luz y lo habían guardado en una urna para verlo todos los días le llegó a la cabeza... tal vez había sido idea de Vegetta...

-Vegetta...- el rostro de su amado apareció en su cabeza, asustado, triste, con lágrimas en los ojos, le pedía despertar, le pedía regresar, le pedía que no lo dejara solo...

Levantó los brazos con algo de dificultad y sintió un dolor punzante en el dorso de su mano derecha, se dio cuenta que había una aguja en ella, fue entonces que cayó en la cuenta de que la cápsula no era una tumba sino más bien... algún tipo de aparato médico. Las cosas tuvieron más sentido cuando se dio cuenta de eso, todo lo que parecía un sueño era en realidad un recuerdo de lo que había pasado después de que nacieran los niños... antes de haberse quedado dormido.

-¿Cuánto tiempo he dormido?- se enderezó con esfuerzo, abriendo la cápsula sin mucha dificultad, al parecer no estaba diseñada para permanecer herméticamente cerrada. Le alivió saber que no estaba encerrado, y que aún conservaba un poco de fuerza a pesar de no estar seguro del tiempo que había estado inconsciente.

Con cuidado sacó la aguja de su mano y se quitó varias cosas que tenía pegadas a los muslos que no había tomado en cuenta antes, estaba casi desnudo a excepción de una especie de pantalón corto que cubría lo suficiente. Pero eso no le importó, lo que deseaba más que nada en ese momento era salir de ahí para buscar a Vegetta y a sus hijos... Eso era lo más importante.

Logró salir de la cápsula más fácilmente de lo que esperaba, sus extremidades parecían mantener la fuerza suficiente como para ayudarlo a mantenerse en pie sin problema, aunque obviamente había cierta debilidad y pesadez por todos lados. Se tambaleó un poco cuando estuvo alejado de la cápsula, y fue entonces que se fijó en su vientre ahora plano, al parecer los flashes que había visto al despertar no estaban equivocados. Aunque una duda hizo que desviara su camino de la puerta a la ventana, sosteniéndose de la pared para no caer, fijándose en que había luna llena y que una copiosa lluvia estaba cayendo sobre la ciudad. Pero él se había acercado para confirmar si aún seguía en Karmaland, porque algo dentro de él le decía que Vegetta sería capaz de llevarlo a una ciudad más desarrollada sólo para mantenerlo con vida, pero un alivio se extendió en su pecho cuando se fijó que seguía en su hogar...

-¿Rubius?- se sobresaltó al escuchar la voz detrás, pero sólo fue un breve instante, porque enseguida la reconoció.

Volteó despacio, aún un poco débil y cansado, pero detrás de él se encontraba su persona favorita en todo el mundo, justo a quien tenía pensado buscar en cuanto saliera de la habitación y buscara a alguna enfermera o doctor que le ayudaran. Aunque seguía sintiéndose inseguro, así que se le quedó viendo un segundo, enfocando su mirada para comprobar que era él, e incluso pronunció su nombre de forma involuntaria...