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Iván durmió plácidamente durante unas 2 horas aproximadamente. Otro ruido fue el causante de que se despierte pero, esta vez, la causante de ese ruido fue su amiga, maite (Mayichi) tocando la puerta. Él se levantó a duras penas para abrirle. Con pocas ganas introdució la llave por la cerradura, viendo así la cara de la chica. Ella lo abrazó al momento, había pasado tiempo de que no encontraban.
El santafesino invitó a pasar a la señorita, la cual aceptó con mucho gusto, ya que, había ido en tren desde Villa Urquiza hasta General Rodriguez para verlo.

Un rato después, ellos estaban en la cocina esperando que el agua termine de hervir para poder hacer mates. También se estaban actualizando sobre sus vidas, porque normalmente se juntaban para hablar de boludeces o chisme, no de cosas personales.
Cuando el agua ya estaba caliente, mai agarró y la puso en el termo. Mientras tanto, Iván estaba llevando el mate y el azúcar a la sala principal (donde normalmente se tomaban mates).

- Y bueno, ivi, es todo un tema. - habló sin algún contexto.
- Sí, es todo un tema. - rió un poco por el comentario de su amiga.
- Amigo, ¿"Vemos casados con hijos"?
- ¿Qué es esa pregunta? - ella se rió con fuerza.
Él agarró el control y prendió la televisión, para después empezar a cambiar de canal hasta llegar a "Telefe", donde estaba en una propaganda de perfumes.

Un par de horas después, ya se les había hecho bastante de noche, entonces pidieron algo de un restaurante de la zona para comer, pidieron unas milanesas napolitana con papas fritas y les llegaron en 40 minutos aproximadamente. Se pusieron a comer viendo Heartstopper.
Después de comer levantaron todo y se fueron para la sala secundaria para seguir viendo la serie ahí. Se acostaron en el sillón y se la quedaron viéndolo. Más tarde, aproximadamente a las diez de la noche, Maite se dio cuenta que Iván se había quedado dormido.
Ella se puso más cómoda, ya que a un Iván dormido no lo despierta ni un tornado. Al estar ya más estirada, cerró los ojos, en un intento de quedar dormida. Un rato después, el timbre de la casa sonó y maite se levantó del sillón para ver quién era esa persona que llamaba tan tarde. Al acercarse a la puerta principal y se asomó a ver la mirilla¹  viendo a un chico de aproximadamente su edad con el pelo castaño, ella le abrió la puerta, lo que no sabía ella es que ese chico era Juan, que no esperaba ver a una chica en la casa de Spreen.

Él la miró de arriba a abajo, para después romper el silencio. - Hola, soy Juan.
- Hola, - ella estiró la mano, él la agarró moviendo por unos segundos para después soltarla.- soy Maitena.
- Pregunta, ¿Qué haces en la casa de Spreen?
- ¿Ivi? - preguntó la chica intentando recordar - Ah, sí. Lo vine a ver hoy al medio día.
- Ah, ok. - forzó una sonrisa. - Cuando lo veas dile que me llame.
- Sí, sí, no hay problema. - ella sonrió.
- Bueno, chau. - Él se dio media vuelta y se fue.

Maite, con una gran cara de pocos amigos por la frialdad de aquel chico, volvió al sillón, donde Iván seguía dormido.

Immortal she, return to me... Primer Libro // SpruanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora