Nueve

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         -Hemos recorrido el perímetro de la manada y no hay ningún vampiro, los guardias dicen que todo está tranquilo – le digo a Einar, Anoki y yo nos encontramos sentados en las sillas frente al escritorio de nuestro Alfa, luego de llegar de u...

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         -Hemos recorrido el perímetro de la manada y no hay ningún vampiro, los guardias dicen que todo está tranquilo – le digo a Einar, Anoki y yo nos encontramos sentados en las sillas frente al escritorio de nuestro Alfa, luego de llegar de una recorrida por la manada.

-Bien, parece que están obedeciendo al pedido de Arinka – asiente Einar y un cosquilleo recorre mi cuerpo al sentir el nombre de mi mate.

-Nuestra – me gruñe Lohan.

-Como sea.

-¿Ya podemos ir a verla? Tal vez sí esté despierta y podamos marcarla, desnudarla, y recorrer esa piel de porcelana con mi lengua. Mmm eso me gustaría mucho, también podemos...

Cierro el link con mi lobo, sacudiendo mi cabeza, mi temperatura corporal había empezado a subir gracias a las imágenes que Logan estaba poniendo en mi cabeza.

-¿Todo bien Otto? – Me pregunta frunciendo el ceño Einar y yo solo asiento con mi cabeza mientras suspiro - ¿Has hablado con Arinka?

-No, la fui a ver, pero estaba dormida y no quise despertarla.

-¿Y después no volviste? – me pregunta Anoki y yo niego con mi cabeza, él iba a volver a hablar pero la puerta del despacho se abre de repente y por allí aparece Aitana con sus mejillas muy rojas.

-Ustedes van a hacer que mi parto sea prematuro – entra quejándose - ¡Dios! ¿Pueden ser tan idiotas los hombres cuando quieren? – Pasa una mano por su abultado vientre – Espero que si eres un varón no me des tantos dolores de cabeza como estos hombres – bufa.

-Yo me estoy portando súper lindo – dice Anoki a mi lado, nuestra Luna frunce el ceño levemente y después asiente con una sonrisa.

-Eso es verdad, eres el único que no me ha dado dolores de cabeza últimamente – dice y se acerca a él para dejarle un beso en la cabeza, el gruñido de nuestro Alfa hace que ella ponga los ojos en blanco, sonrío por eso, amaría tener la relación que ellos dos tienen.

-¿Se puede saber quién te hizo enojar ahora Luna? – le pregunta Anoki.

-¡Todos! – Gesticula con los brazos – Él no deja que Arinka salga de la habitación – señala a Einar y después me apunta a mí – él no ha ido a hablar con su mate, y mi hijo mayor casi hace que muera de un infarto cuando lo vi trepado a un enorme árbol – lleva su mano a su pecho y camina hacia su mate, para sentarse en sus piernas e inhalar su aroma – Y este otro, que no se sí es nena o nene, pero por lo que me ha hecho maldecir hoy, seguro es varón, lleva pateando mis costillas desde hace rato.

-Ey pequeño, ten cuidado con mamá – le dice Einar a la panza mientras deja suave caricias en ella, Aitana suspira y se acomoda aún más sobre los brazos de su mate.

Una Vampiresa para el DeltaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora