Cambio

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Se sintió mareada y si no fuera porque Muffet estaba a su lado hubiera caído al suelo.

- ¿Qué....hiciste...qué?- dijo horrorizada por lo que acababa de escuchar.

- Yo ...¡Lo siento! ¡Siento mucho causar problemas!

Janet se soltó de los brazos de Muffet y caminó con rapidez hacia Alphis, su postura y andares eran amenazadores. Dejaba ver sus dientes, apretados por la ira. Alphis se espantó un poco ante su postura y retrocedió un poco, casi parecía que la iba a golpear.

- ¡¿Cómo pudiste dejar que pasara?!- sin quererlo, su poder creó varias agujas a sus espaldas dispuestas a lanzarse hacia Alphis a la mínima que la tuviera enfrente.

Alan se interpuso entre ambas, deteniendo a Janet.

- Es suficiente.- dijo serio.

- ¡¿Acaso no entiendes lo que significa?!- dijo enfurecida.- ¡Ha creado una máquina que fue peligrosa en su tiempo y sin funcionar, ahora que funciona correctamente! ¡Piensa los peligros que traerá!

- ¡La amenazaron!

- ¡La necesitaban viva para hacer la máquina, jamás le hubieran puesto la mano encima!

- ¡Pero si a sus seres queridos!- gritó Alan enfadado por la poca empatía que mostraba la chica.

- ¡Nosotros hubiéramos peleado! ¡Podíamos haberlo evitado si solo se hubiera impuesto a las órdenes! ¡Podíamos haberlo evitado antes de que comenzara!

- ¡Aún podemos arreglarlo!

- ¿¡ Cómo piensas arreglarlo!? ¡Una sesión de terapia no arreglara nada! ¡Dejad de ser tan jodidamente ingenuos y creer que las palabras bonitas resolverán todo!

- ¡Es suficiente!- dijo Toriel.

Todos callaron inmediatamente.

- No es momento de echar culpas a nadie, estamos en una situación donde debemos mantenernos juntos. Dictaremos los castigos adecuados cuando todo termine.- Dictaminó con un tono autoritario.

- Toriel tiene razón.- apoyo Muffet.- no podemos pelear entre nosotros. Si queremos parar esto debemos hacerlo unidos.

Janet y Alan se miraron unos segundos aun con miradas intensa. Janet la apartó hacia un lado y chasqueó la lengua molesta, le dio la espalda.

- Tenéis razón, no es el momento.- dijo más calmada.- Pero me gustaría saber como la justicia resolverá esto.- Miró de reojo a Alan con ojos molestos.

Alan solo frunció sus cejas, pero no dijo nada.

- P-podemos usar el chip.- Alphis se armó de valor para hablar delante de Janet.- Solo tenemos que incorporarlo al dije, tendremos 15 minutos.

- Entonces no perdamos más tiempo. No se escucha ruido desde hace rato, no es buena señal. Toriel y Paz, id por Sans y Saki, quedaos con ellos, si están tan débiles solo serán un estorbo. Asegúrate de evitar que atrapen el alma de Saki. Los demás, vamos a buscar al rey y acabar con esto.

Los grupos se separaron. El primer grupo, conformado por Janet, Muffet, Zowei, Papyrus, Alan Y Alphis subieron hasta el piso donde creyeron escuchar los últimos golpes, siguieron las zonas más desgastadas y derruidas de la zona.

Al fondo de un pasillo vieron a dos figuras moverse entre escombros. Una mucho más alta y otra más bajita y menuda. Alphis la reconoció al instante.

- ¡Undyne!- grito con las lágrimas saltadas y una sonrisa.

La fusión se giró al escuchar el nombre de una de las personas de las que estaba creado y al verla correr con rapidez hacia ella sintió como una parte de su ser se separaba. La fusión se separó y Undyne no tardó en ir corriendo hasta ella y levantarla del suelo dando vueltas con ella en sus brazos.

Psiquetale (Au Undertale)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora