5.

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Jeongin se daba topes en la pared, ahora que podía usar toda su capacidad mental sin sentimientos intensos de por medio, sólo por el hecho de haber besado a _____ en frente de todo un público.

Después del fatídico día, su relación ficticia se hizo pública. Las mujeres mayores se acercaron al pelinegro y lo felicitaron con euforia por conseguir entrar en una relación, a pesar de su mala actitud.

Muy al contrario de él, cierta rubia no había dejado de sentirse confundida por las palabras que Jeongin le había dicho. Quiso mantenerse alejada de aquello, sin embargo, le pudo más curiosidad y terminó tratando de reunir información sobre ello.

Además de aquel alboroto, la señora Yang continuó desconfiando de su hijo y su mejor amigo. Ella ya tenía un futuro resuelto para Jeongin al lado de Yuna. Había hecho algunas amistades y había formado el resto de la vida perfecta para que su hijo no tuviera que sufrir, pero la llegada de la extranjera comenzaba a mermarle los planes y entre ello, poniendo en riesgo su única fuente firme de ingresos. Debido a ello, Yang Hyo-ri se prometió hacer lo posible para que Jeongin siguiera la línea que había dibujado especialmente para él...

****

La mañana de sábado era sombría. Las nubes eran oscuras y amenazaban con la llegada de una fuerte lluvia. Los pronósticos de tiempo afirmaban que habría una tormenta más tarde y recomendaban mantenerse en sus casas, resguardados.

—¿Cerrarán temprano?

—Estamos obligados a hacerlo —respondió el mayor, encogiéndose en hombros—. ¡Jeongin, no te olvides del cachorro!

Justo en ese momento, entró el más joven con una bola de pelos en brazos. La rubia sonrió encantada y se acercó al pelinegro en busca de darle caricias al perrito. El pequeño lucía emocionado ante la muestra de cariño excesivo hacia su ser, sacudió la cola emocionado, expresando su felicidad hasta casi caerse de los brazos que lo sostenían.

Hyunjin sonrío por la imagen frente a él. Aunque no quería admitirlo, Jeongin había cambiado gracias a _____. El hecho de hacerla pasar por su novia frente a su madre y luego tener la obligación de tratarla como tal por su equivocación impulsiva, le habían motivado a ser menos gruñón, sin embargo, todavía era un tanto grosero con los clientes y _____.

—¿Lo llevarás a casa?

—No, lo dejaré en la oficina, ahora ¿Me permites?

_____ dio un paso al costado, dejando el camino libre para Jeongin. Se quedó parada ahí, viendo como el otro se alejaba hasta perderse en la puerta de empleados.

—No ha maldecido en todo el día, así que supongo es un gran avance, ¿no crees?

_____ sintió el brazo del más alto, rodeando sus hombros, ambos mirando a la misma dirección. La rubia suspiró, mirando a su amigo, dispuesta a responderle, sin embargo, el impacto de un rayo apagó las luces y quedaron espantados por la cercanía del relámpago con la tienda. Jeongin salió corriendo cuando el trueno se escuchó, pero se quedó quieto cuando vio frente a él la imagen de Hyunjin y su novia aferrándose entre ellos por el susto.

—¿Quieren que me vaya? —preguntó, de mala gana.

Hyunjin se alejó de la otra y se acercó a la puerta, ignorando las palabras de su amigo sólo para presenciar cómo se desataba la tormenta prevista por las noticias. El teléfono de la rubia comenzó a sonar y respondió a la tercera tonada, anticipando el reclamo de su primo.

—Hola.

Dime que sigues en la tienda, con ese estúpido indagó, con velocidad en sus palabras.

Be Kind || Yang JeonginDonde viven las historias. Descúbrelo ahora