Capítulo 2

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Narradora.

Poché caminaba con prisa hacia su auto, seguida de Kim. La morena le había pedido que se quedará al cuidado de la castaña, pero la rubia, se negaba.

_ Poché, ni lo pienses_ decía Kim caminando detrás la morena.

_ Kim, sé que eres mi jefa de seguridad. Pero ahora te necesito aquí.

_ Me ves cara de niñera?_ la peliazul se detuvo, girándose para enfocar su cara. Le sonrió.

_ Te quedas aquí_ su expresión cambio drásticamente y se puso completamente seria_ es una orden_ se giró y siguió su camino, impidiendo que la rubia abriera la boca una vez más.

Mientras tanto, Daniela era acompañada por el rubio de piernas largas, hasta su habitación. Cuando entraron a la casa, pudo notar la dimensión del lugar. Definitivamente el pequeño departamento donde vive junto a su familia, no es ni la mitad de grande que el salón de Poché. La castaña miraba todo a su alrededor, intentado encontrar una vía de escape. Pero el lugar estaba rodeado por hombres armados hasta los dientes. Subió las escaleras guiada por el rubio, había varias habitaciones en la segunda planta. El hombre abrió una puerta blanca de madera y movió la cabeza haciendo un gesto para que ella entrara.

POV Poché.

Me encontraba caminando hacia el almacén abandonado. Es un lugar apartado, dónde nos reunimos para llevar a cabo nuestros encuentros clandestinos. Había un par de hombres cuidando la entrada, como siempre. Una vez dentro Marina se acercó a mí, tenía una sonrisa pícara en sus labios y me coqueteaba.

_ Entonces estuviste muy ocupada y por eso no me has llamado_ conocí a Marina cuando frecuentaba uno de sus clubes nocturnos. La morena de ojos verdes y cuerpo escultural, me gustó desde el primero momento en que la vi. Con ella tuve el mejor sexo, hasta el momento. Cogíamos varias veces por semana y para que negarlo, disfruté cada segundo con ella. Hace un par de meses atrás determiné alejarme de la hermosa ojiverde y ella nunca tuvo la culpa. Pero mi corazón terco ya tenía a otra persona en la mira.

_ Exactamente, sabes lo mucho que me consume el trabajo_ me excuse.

_ Te conozco y se que hay algo más, o mejor dicho, alguien más_ hablábamos en un tono bajo, no estábamos solas.

_ No es el momento para esto, pero respondiendo a tu pregunta. Si, hay alguien más_ me miró incrédula y le di la espalda para sentarme en mi sitio, los demás ya habían llegado y era momento de comenzar.

Gran parte de la reunión se trató sobre el futuro integrante de nuestras organización. Óscar Arteaga, el hijo menor de Marc Arteaga, un exitoso y reconocido empresario a nivel internacional. Un niño de papi, arrogante y prepotente, pero con un capital suculento.

_ Me ocuparé de investigar más sobre él_ dijo Mateo, un prestigioso abogado de barba tupida y traje elegante. Estaba marcando la línea de los treinta y era todo un Casanova. Siempre es muy precavido para los negocios. Pero tiene un punto débil. Las apuestas.

_ Yo voto por qué lo dejemos ser parte de nosotros... Su padre tiene varias empresas y necesitamos nuevas opciones para el lavado_ está vez hablo Jon. Llevaba un sombrero vaquero y botas de cuero, tenía toda la pinta de bailar música country. El moreno de barbilla partida y asento colombiano siempre mantiene un carácter divertido y elocuente. Nos presentaron una noche durante una fiesta a la que fui invitada y desde ese entonces somos buenos amigos. El tipo es él matón más reconocido al sur de la ciudad, un hombre inteligente.

_ A mí no me convence_ dijo Pérez. Tiene pinta de intelectual, usa gafas y siempre lleva el pelo perfectamente acomodado. En realidad, se dedica al tráfico de drogas. Este señor exporta y abastece a gran parte de Miami_ escuché comentarios sobre él, es un idiota que solo sabe meterse en pedos. No necesitamos a un niño de papi aquí_ yo me mantenía en silencio, escuchando el debate que tenían entre ellos. La verdad es que a mí tampoco me gusta la idea de que Arteaga forme parte de nuestro grupo.

MI OBSESIÓN (Poché G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora