Sábado 8 de noviembre
Milán/Italia.
Shara.
Ayer en la noche, cuando regrese a mi casa encontré a mi madre tirada en el sofá rodeada de botella de tequila. No voy a negar que me sentí fatal cuando la vi, tambien me senti una mala hija por haberla dejado sola en una momento así.
En serio me duele verla asi, puede que sea una mujer fuerte ante cualquier situación, pero es débil cuando se trata de amor y de algo que enserio ama o le importa. Me aguante las ganas de llamar a Alejandro e insultarlo de una y mil maneras, pues sabía que el tambien tendria muchas cosas por decirme.
Debo confesar que aunque lo odie, es mi padre y debo guardarle respeto, lamentablemente.
Termino de subir el cierre de mi falda y camino hacia la puerta para salir de mi habitación y dirigirme a la sala donde se encontraba mi madre mirando series romanticas con un tarro de helado de chocolate entre sus piernas. La miro con angustia, lleva senta ahí toda la mañana.
—Mama.—La llame, pero no me miro.—Madre, Me acerque pero la situación siguió igual.— Samira Arlet myers estoy hablándote.— me acerque enojada y le quite la cuchara y el tarro de helado luego tome el control y apague la televisión.—No puedes seguir asi, ya basta, Alejandro Ivanov es un idiota, un imbécil.—ella me miro.—En cambio tu, eres una mujer hermosa, tienes a muchos hombres detrás, no puedes dejar que el te afecte de esa manera.
—Shara.—Susurro levantándose pero la interrumpi.
—No mama.—Alze la voz.—A el solo le importa su mafia y su bienestar, nadie más, es un egoista. Existen una y mil razones para odiarlo pero el amor no te deja hacerlo y te entiendo, por favor no sufras por el imbecil, estúpido e insignificante Alejandro Ivanov.
La mirada de mi madre paso a mi espaldas, su rostro cambió drásticamente, mostraba diferentes emociones al mismo tiempo enojo, tristeza y decepción. Su actuar me hizo darme la vuelta para ver que la habia puesto asi, por que estaba segura que no fueron mis palabras.
—Esto tiene que ser una broma.—Susurré sintiendo como el enojo me embargaba.—¿Te atreves a venir aquí y entrar como si nada?
Se quedó en silencio mirándome fijamente.
—Lárgate.—Hable intentando mantener la calma.—No lo quiero volver a repetir, tu solo sirves para destruir a las personas.—Comencé a caminar en su dirección.— ¿No te cansas?
—Shara.—La voz entrecortada de mi madre me hace detener.—Esta bien, solo hablaremos.—Mire a mi madre con el ceño fruncido.—Por favor, estare bien.—Intente objetar pero no me lo permitió.—Alexander vendrá pronto, mejor esperalo.
Mire a Alejandro por última vez antes de subir a mi habitación, cerré la puerta con fuerza y comencé a caminar por toda esta intentando calmar mi enojo. Tome mis audífonos y me los coloque con música a todo volumen, me diriji a mi balcón y me apoye a este sintiendo como de inmediato la brisa golpeaba mi rostro y había volar mi cabello.
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CADENAS DE LUJURIA. [#2] (EN EDICIÓN)
Teen FictionÚnica, tentadora y con una interpretación atrayente. Después de cuatro años Shara se reencuentra con alexander, quien ahora se encuentra mas sumido en el mundo de la Mafia. Estarán sometidos a tentaciones lujuriosas y un deseo indescifrable. ¿Lograr...