CONTRAST (Markhyuck)

Capítulo 23 (Persecución)

No podía dejar de ver el reloj en el escritorio del policía, sus amigos estaban tardando demasiado con la información personal que tenían que traerle. El policía escribía rápidamente en el teclado, sus ojos pegados al monitor, casi como un zombie, digitando los datos que Jisung le acababa de proporcionar.

— ¿Ésta seguro que es mayor de edad? — preguntó el policía, inspeccionando al chico con una ceja alzada. Jisung asintió levemente, había tenido la cabeza baja, desde que lo sacaron de la celda — ¿Con quién vive?

El policía golpeó sus dedos rítmicamente sobre el escritorio de madera, honestamente, el joven le estaba colmando la paciencia porque no cooperaba en darle información, estaba demasiado retraído.

Jisung, estaba en su propio mundo hace horas, era un reflejo de autodefensa para sí mismo, ante la situación tan tensa que estaba viviendo. Sus ojos estaban rojos, su cuerpo estaba ahí, pero su mente seguía con Chenle, en la celda.

— ¿Con quién vive? — repitió el señor. Odiaba su trabajo, solo quería ir a casa.

Notó que la camisa del oficial no le tallaba, un botón amenazaba con dispararse y revelar su estómago peludo. Jisung agitó la cabeza, quitando el cabello de sus ojos.

— Ni siquiera yo sé — respondió a la ligera — vivo aquí y allá, a veces en mi carro, a veces con mis amigos y en raras ocasiones, en la casa en la que me críe.

El policía estaba a punto de decir algo al respecto, pero recibió una llamada.

El oficial contestó el teléfono que se encontraba a un costado de su escritorio y tan pronto como lo hizo sus ojos se agrandaron; luego, le dio un par de miradas disimuladas al joven frente a él y susurraba cubriendo su boca.

Jisung no le prestó mayor atención, le daba igual lo que ese hombre estuviera susurrando.

— Bueno, sigamos — dijo al mismo tiempo que colgaba la llamada — Terminemos esto rápido, porque hay alguien que quiere verlo con urgencia.

Jisung levantó por fin la cabeza, y frunció el ceño, quién quisiera verlo aparte de sus amigos ¿Su mamá quizás? Aunque era muy poco probable.

— ¿Algún familiar a quién podamos contactar? — el oficial claramente cambió de actitud con Jisung, su voz sonaba más gruesa e irritada.

— Mi tía.

Jisung contestó rápido, ahora se sentía mucho más alerta y receptivo. Le entregó el nombre y teléfono celular de su tía. Rápidamente respondió a todas las demás preguntas que le hizo, los datos eran importantes, ya que todo eso quedaría archivado en su historial criminal.

El oficial recibió otra llamada, pero esta vez fue rápida y corta.

— Sus documentos están aquí — el hombre empujó un papel y una almohadilla de tinta, frente a Jisung e hizo un gesto con la mano al aire, llamando a otro de sus compañeros. Otro oficial tras él, le quitó las esposas, tomó su mano y comenzó a llenar sus dedos de tinta uno a uno, para presionarlos sobre el papel.

— Luego llévalo al cuarto de interrogación — el oficial le dijo a su compañero, en voz baja.

— ¿Por qué? Es una violación a la ley, no un asesinato... — el otro oficial estaba tan confundido como Jisung.

— Solo has lo que te digo — contestó el otro entre dientes.

El oficial dos, terminó de registrar sus huellas dactilares. En ese momento Jisung vio a Chenle, estaba notoriamente triste, sin esposas y custodiado por dos hombres de traje. Caminaban hacía la salida trasera de la estación de policía.