Justina había cancelado todos sus trabajos por el resto del mes. Había pasado dos semanas en Argentina, con el teléfono en modo avión todo el tiempo. Lo había conectado sólo la primer noche para escribirle a su mánager que no iba a trabajar por un tiempo. Pablo se volvió loco, pero cuando escuchó la angustia en la voz de la modelo, la entendió, y canceló todo sin chistar, pero no sin antes advertirle que esto la perjudicaba. Justina no cambió de opinión. Habló con Euge por videollamada y le contó todo por arriba; le dijo que había terminado mal con Elías y se las había mandado con los chicos, así que desaparecería por un tiempo, su amiga le dijo que estaría para lo que necesite. También les dejó un mensaje a cada uno, a Enzo y a Julián. Sin leer nada de lo que ellos le habían escrito antes, les dijo que había viajado y no sabía cuándo volvía, pero que estaba todo bien.
Para ella era una despedida, se había terminado todo entre ellos y le parecía lo mejor, aunque le doliera. No quería entrometerse entre sus amigos, no quería pasar más vergüenza; sabía que no sería posible volver a mirarlos a la cara.
En Argentina compartió tiempo con su familia, y con amigos. Comió la comida de su madre, durmió todas las noches con su perro, que ya estaba canoso y le rompía el corazón, y para terminar sus vacaciones, decidió llevarse a su madre a Punta Cana, donde se instalaron una semana únicamente a comer, beber, e ir a la playa. Era una de las últimas noches, y se sentía satisfecha de haberse ido de Inglaterra, le hizo bien distenderse.
Con Elisa habían cenado en un restaurante italiano precioso, y como anunciaban lluvia para el otro día, decidieron bajar a la playa para aprovechar las últimas horas de buen clima. El hotel contaba con un bar All-inclusive en la playa, así que tomaron de todo, y se estaban cagando de risa sentadas en la arena, mirando como la luna se reflejaba en las olas de la costa.
-Bueno, basta, que sino no voy a encontrar la habitación. –Dijo Elisa, levantándose, le costó muchísimo y fue peor cuando se empezó a tentar, la morocha se sumó a las risas. -¿Vos estás bien, hija? –preguntó, sincera.
-Sí, ma. Mejor. –Sonrió.
-Se te ve mejor, mi vida. –le devolvió la sonrisa, acariciándole la cara. –Un día me vas a tener que contar bien qué te pasó. –Justina suspiró y asintió con la cabeza, con la vista fija en el mar. –Que descanses, mi amor.
Elisa caminó cruzando la playa, saludó al personal del bar, y se perdió tras las puertas del lobby del hotel. A diferencia de los demás días, donde su teléfono había quedado en la habitación, esta vez lo traía en la cartera. No estaba segura de por qué lo había agarrado, pero lo tenía ahí. Estaba sola, y tranquila, y el alcohol le daba la cuota de valentía que le faltaba. Respiró hondo, conectó el wi-fi del hotel y escribió "whatsapp" en el buscador, tocó el ícono de la aplicación y seleccionó "Descargar".
Se pidió un Gin Tonic en la barra, y volvió a sentarse en la arena, con el celular apoyado sobre su muslo, mientras esperaba que la aplicación termine de descargar todos los mensajes.
Tenía mensajes, fotos, y audios de Eugenia que aparentemente había usado su chat como un diario, Justina escuchó algunos de los mensajes de voz y sonrió. Leyó los mensajes de su mánager que le mandaba castings y distintas propuestas de trabajo, "por si quería tenerlas en cuenta", según él. Había chats de gente menos importante, pero observó que Enzo, además de mandarle varios mensajes por privado que ella no se molestó en leer, había creado un grupo nuevo "Los tres mosqueteros, parte 2", y los había metido a todos los viejos ingredientes. Había conversaciones entre los dos pero ella no las leyó, salió enseguida del grupo. Ya tenía mensajes privados de Julián, pero le acababa de caer uno más. Cuando tocó la notificación, le cayó una nueva y tocó esa por accidente.
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Un juego peligroso. | Julián Álvarez, Enzo Fernández.
Fanfiction"-¿Enzo te pusiste colorado? -No. -Estás bordó, -se rió ella- hasta la frente tenés roja. -Andáaaa, tarada. -Se pasó la mano por la cara. -Rojo tiene el orto tu novio con el partido de hoy. -¿Por Julián lo decís?, no es mi novio. -No parece. " - Len...