Us fue ingresado en una habitación y luego fue llevado directamente a la sala de partos, en donde él me suplicó que no lo dejara solo mientras esperaba a que Jeff se apareciera y no se perdiera el momento exacto en el que conocería a su bebé. Ahora él sostenía mi mano como si yo me fuera a desmaterializar en cualquier segundo. Apretaba mis dedos cada vez que venía una fuerte contracción hasta que se tranquilizaba y su respiración se acompasaba.
Al poco tiempo, una enfermera lo revisó y le indicó que era momento para comenzar el parto. El bebé ya venía en camino.
—¿Jeff no ha venido? —me preguntó Us, en sus ojos se podía ver el pánico que lo invadía.
—Lo siento, no traje mi teléfono y ya las enfermeras hicieron el favor de avisar. No tardará en venir.
Esa era una pequeña mentira ya que estábamos a unas dos o tres horas lejos de casa... Definitivamente él tardaría en llegar.
—No me dejes, Bible —suplicó él con lágrimas en los ojos cuando llegaron los del equipo médico para atenderlo—. Si Jeff no puede venir, por favor entra tú conmigo.
Antes de que pudiera decir algo, una enfermera negó estrepitosamente con la cabeza.
—Solo se permiten familiares... o al padre del bebé —dijo ella mientras le tomaba la presión sanguínea. La mujer debía andar por sus cuarentas pero se miraba de mayor edad gracias a la mueca de amargura permanente en su cara.
Iba a disculparme con Us, cuando él comenzó a gritar muy fuerte.
—¡Llama a Mia! —chilló otra vez justo cuando una contracción lo atacó demasiado fuerte—. Mi hermana sigue en el hotel...
Cerró los ojos y apretó mi mano hasta el punto en el que pensé que me quebraría algunos huesos. La misma enfermera amargada se acercó hacia mí y me tomó del codo, llevándome hacia el lado opuesto de la habitación, directo a la salida. Me encontraba indeciso sobre si salirme o hacer algo para quedarme.
—¡Bible! —gritó Us antes que me sacaran del todo. Su mirada me decía lo desgarrado que se sentía sin ningún conocido a su lado, sus ojos me suplicaban que me quedara con él.
Si Emilia no se hubiera suicidado hace ya tanto tiempo atrás, ella luciría muy parecida a Us ya que ambos compartían casi los mismos rasgos. Al ver sus ojos me entró el remordimiento y la culpa. Claro, Us ya sabía todo lo ocurrido con su hermana, se lo había contado meses después de su muerte, pero él nunca me culpó de lo sucedido y me ayudó a sobrellevar la carga, sintiéndose dolido porque se lo ocultara durante tanto tiempo pero a la vez logró perdonarme con facilidad por haberme callado.
Ahora era Us el que me necesitaba en este momento y yo no podía marcharme cuando lucía así de... vacío. Con cuidado me zafé del agarre de la mujer quien me llevaba de salida, y me planté junto a la camilla de mi amigo.
—Me quedo —dije con cierto tono de autoridad, dirigiendo mis siguientes palabras hacia la enfermera con expresión aburrida. Iba a pronunciar las palabras que me harían ganar el título de tonto, pero eran para ayudar a un amigo... un amigo que quería lo mejor para mí y para Build, así que lo haría, las diría—, y me quedo porque yo soy el encargado de ese bebé. Yo me hago responsable por él.
—¿Es usted el padre? —me interrogó la mujer, mostrándose escéptica.
No dije nada pero ella ni siquiera esperó una respuesta cuando ya se encontraba ladrando órdenes a alguien para que volvieran a llamar al doctor que atendería el parto. Tragué saliva, declarando una guerra interna que me hundía poco a poco. Us me dedicó una sonrisa cansada y alargó la mano para estrechar la mía.
ESTÁS LEYENDO
2. Forbidden To Obsess Over Bible Sumettikul ||BibleBuild||
Romance¿Qué puedo decirte acerca de Bible Sumettikul que no haya dicho ya? Cierto, el chico comete errores más rápido que un cohete viajando a la velocidad de la luz, pero tengo que admitir que los sabe remediar con la misma facilidad. No es difícil enamor...