꧁𝓣𝓔 𝓞𝓓𝓘𝓞꧂. 🚨"EN PAUSA"🚨

Capítulo 24

Sentia que la ansiedad me invadia y mis manos sudaban a más no poder, ya había transcurrido al menos media hora desde que estoy esperando a que el señor Min llegue, de hecho la comida servida ya estaba fría, pero aún no hacía su aparición.
Miles de preguntas invadian mis pensamientos pero tampoco me atrevía a ir a buscarlo, no sabía cómo se encontraba de ánimos en esos momentos y por más valiente que me crea ahora, lo menos que necesito es que se la desquite conmigo.
Hoy tae no se encuentra en casa, está presentándose en un casting de modelaje y jungkook lo acompañó como siempre, aunque se a demorado más de lo que debería porque ya oscureció y aún no a llegado, estoy preocupado por el, solo espero que lo que se invente sea tan bueno como para que Yoongi no sospeche nada de él y su guardaespaldas.
-- En que piensas que te veo negando con la cabeza -- escuche decir a Min.
Me encontraba tan absorto en mis pensamientos que no me percaté en que momento llegó y se sentó en su silla, me miraba con una de sus cejas levantadas, mientras tenía sus codos en la mesa y apoyaba su barbilla en sus manos entrelazadas.
-- Yo, yo no pensaba en nada señor -- le conteste nervioso.
-- Tu cara dice todo lo contrario -- dijo mientras mantenía su rostro frío y calculador, como si tratara de escuchar lo que pienso.
Hay momentos en los que creo que este hombre me puede leer la mente, así que siempre que estoy frente a el trato de mantener mi mente en blanco, se que es imposible, pero si soy sincero ya con el no se que esperar, ni pensar.
-- Solo, solo... estaba preocupado por usted señor -- hable por lo bajo.
-- Que es lo que te preocupa? -- pregunto.
-- Escuche a su amigo hablar de... de Jackson y ...
-- Tu no tienes porque pensar en nada de eso, solo estás aquí para...
Hizo silencio y dejó escapar un suspiro pasando sus manos por su rostro.
-- Se que solo estoy aquí para complacerlo, para hacer todo lo que desee, se que solo soy su juguete -- dije con la voz quebrada.
Se perfectamente cual es mi papel en esta casa, se me a dejado claro miles de veces y no solo por Yoongi, si no por todos, pero aún así me duele cuando el se expresa así.
-- Permiso señor Min -- dije levantándome del asiento.
-- A donde vas? No vas a comer? -- pregunto curioso.
-- Ya no tengo hambre -- dije y me dispuse a salir de allí.
Un fuerte agarre en mi muñeca me detuvo.
-- Jimin pequeño, no quize decir...
-- Se muy bien lo que quiso decir y tiene razón, yo no soy mas...
De pronto sentí como mi cuerpo perdió el equilibrio debido a que me empujó hacia a el cayendo sentado en su regazo.
-- Bebé perdón -- decía mientras una de sus manos acariciaban mi mejilla -- Solo estoy molesto y hablé sin pensar -- decía sonriendo.
Cruze mis brazos he hize un puchero, tratando de verme lo más inocente y tierno que pudiera, se que eso le encanta y lo utilizaré a mi favor.
Vi como su lengua recorría su labio inferior y una pequeña sonrisa se reflejaba para luego morder su labio, lentamente se acercó a mi con la intención de besarme pero yo me aleje un poco.
Sus cejas se fruncieron y un frío recorrió mi cuerpo ya que la última vez que lo rechacé no la pasé para nada bien, pero me arriesgué, ya no soy el mismo Jimin de hace unas semanas.
-- No lo puedo perdonar así de fácil -- dije manteniendo mi puchero, su rostro cambió al escucharme y alzo una de sus cejas.
-- Entonces que harás? Vas a castigarme por ser malo contigo? -- hablo de manera juguetona.
Al oírlo sentí como mi cuerpo se relajó, había logrado mantener la situación bajo control.
Lleve una de mis manos a mi barbilla y finji pensar.
-- Pueeeesss... si, será castigado -- dije levantándome de sus piernas y sentándome a la orilla de aquella gran mesa frente a el, en tanto lamia mis labios provocandolo.
Lentamente comenze a desabrochar mi camisa dejando ver mi pecho, aquel lugar que tanto le gusta morder mientras tenemos sexo, comenze a recorrer con mi mano todo mi torso hasta llegar a mi miembro que ya se encontraba duro imaginándome de que manera haría sufrir a Yoongi.
Puso una de sus manos en mi muslo, yo incline mi cabeza hacia un lado mientras daba un pequeño golpe en ella para quitarla.
-- No tiene permitido tocar -- dije con voz sensual.
-- Como? -- pregunto confundido.
-- Su castigo será ver como juego con mi cuerpo pero no podrá tocar -- hable en lo que me retiraba mi pantalón junto a mis boxers, subiendo mis piernas a la mesa abriendolas lo más que podía.
-- Eso no es justo -- dijo en un susurro sin quitar la vista de mi cuerpo mientras se lamia los labios.
-- Como que no? Es lo menos que se merece por su maltrato -- dije en tanto llevaba dos de mis dedos hacia mi boca lamiendolos para lubricados.
-- Ya te pedí disculpa pequeño -- decía mientras intentaba acercarse pero con una de mis piernas lo empujé hacia el asiento.
-- Dije que sentado y sin tocar -- mis dedos ya bien humedecidos los lleve hacia mi entrada colocandolos poco a poco dentro de mi mientras gemía por lo bajo sin quitar la vista de su rostro, me gustaba ver como trataba de contenerse, se que le gustaba lo que estaba viendo por lo que seguí con mi tortura.
-- Aaaaaah -- jadeaba mientras que introducía aún más mis dedos -- Daddy, aaaaah.
-- Dime bebé?
-- Daddy....
-- Sabes que me estas matando verdad? Es la pero tortura que conosco -- decía con la respiración irregular.
-- Alfa quiero aaaaah, quiero ver como te masturbas mientras me ves tocándome, aaaah -- le pedí sin vergüenza alguna.
Inmediatamente lo vi como obedecía mi orden retirando su pantalón para acomodarse una vez más en la silla agarrando aquel enorme trozo de carne que me hace gritar de placer.
-- Así bebé?-- yo asenti, su mano se movía de  atras hacia delante dejando ver lo exitado que se encontraba en tanto una gota de presemen se dejaba ver.
Por más que quería seguir con mi juego, sentia que no podía más, solo pensaba en tenerlo dentro de mi.
-- Ponte de pie y acércate, pero no toques -- dije demandante y como todo un chico bueno lo hizo.
Me acosté en la mesa tirando hacia un lado todo lo que allí se encontraba, lo menos que me importaba en aquel momento era que me escucharan.
Con la mano que me quedaba libre agarre mi miembro y comenze a estimularlo aún más subía y baja tratando de alcanzar mi clímax pero mis pequeños dedos no llegaban a tocar mi punto dulce.
-- Alfa , aaaah necesito de ti, aaaaah te quiero dentro -- hable como pude.
Sin perder un solo segundo se colocó entre mis piernas y senti como su pene comenzó abrirse camino dentro de mi haciendo que un grito escapara de mi boca y mi espalda se arqueara en el acto, lo deseaba tanto que no pude seguir con aquel tonto juego.