Extended Play - GAP The Series

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Siempre me ha gustado viajar a través de mi memoria, emprendiendo una travesía en la que suelo visitar los recuerdos más antiguos que aún mantengo en mi cabeza. La idea de concentrarme hasta recordar algunos detalles que con el paso del tiempo había olvidado me resultaba tan intrigante que muchas veces la tomé como un desafío personal. Pero, por más lejos que mi mente quisiera viajar, siempre recordaba aquella fantasía que tenía desde que era una niña.

Un pensamiento constante en el que me veía a mí misma encima de un escenario, transmitiendo todos mis sentimientos a través de las canciones que ansiaba escribir y acompañada de las personas que estarían dispuestas a escucharme hasta que mi voz se desvaneciera y las luces del recinto se apagaran.

Muchos años fueron los que soñé con alcanzar ese éxito que ansié de manera enfermiza cuando comencé mi carrera, momentos en los que estuve dispuesta a hacer todo tipo de sacrificios para alcanzar aquello que me propuse desde que empecé a priorizar mis deseos antes que las opiniones de todos los demás.

Y contrario a lo que muchos pensaron, tuve mi momento de gloria. Fue diferente a como lo había imaginado, pues cuando conseguí ese éxito que busqué durante tanto tiempo lo hice contigo y junto al resto. No fue algo que me incomodara, pues disfruté cada momento que tuve como integrante de Diversity y cada momento que estuve a tu lado. Recuerdos que ahora estaban borrosos en mi memoria y que anhelaba recuperar.

Ambas teníamos la misma ilusión y la perseguimos. Perseguimos la fama juntas, pero de haber sabido que esa sería la responsable de nuestro fatídico final, nos habría frenado sin dudarlo. Porque sí, durante mucho tiempo creí que la fama sería lo mejor que iba a pasarme en la vida, pero ahora que lo pienso a detalle puedo asegurar que me quitó mucho más de lo que me dio.

Entrecerré los ojos en un incómodo intento para acostumbrarme a la nueva iluminación del set, el cual estaba lleno de personas que tenían la misma misión; preparar todo antes de que el programa saliera al aire.

Intenté tranquilizarme a mí misma, recordándome que no era la primera vez que hacía algo parecido. Había asistido a incontables programas de televisión cuando Diversity estaba en la cima del mundo, sin embargo, esta era la primera vez que tendría al entrevistador exclusivamente para mí.

Nunca estuve sola. Me había acostumbrado a que el mismo grupo de personas me acompañara... uno en el que tú estabas presente, asegurándote de que yo no dijera algo demasiado imprudente debido a mi evidente inmadurez durante nuestros comienzos.

La nostalgia me invadió cuando caí en cuenta de que no podría buscar tus ojos en caso de sentirme intranquila y que tampoco tomarías mi mano disimuladamente para reconfortarme. Evidentemente no iba a contar con tu apoyo incondicional ni con tus réplicas evasivas cuando la entrevista se volviera turbia o incómoda.

No te tenía ahora y, de haber sabido lo desgarrador que era el simple hecho de pensarlo, habría botado todo para quedarme contigo.

Desafortunadamente era demasiado tarde para arrepentirme, pero esperaba que aún me quedara tiempo para hablar. Fueron muchos años en los que me mantuve en silencio y estaba cansada. Así que ahora, después de un lustro tan tortuoso que me pareció una eternidad, estoy dispuesta a contar la verdad. Nuestra verdad.

Mi verdad.

Así que tomé una gran bocanada de aire y me permití a mí misma viajar a través de mis recuerdos una vez más, dispuesta a revivir todo. Dispuesta a recordarte.

Porque el día de hoy yo, Kornkamon, antigua vocalista de la aclamada banda de rock Diversity, haría que el mundo entero estallara después de escucharme.