Unther the Devil's Law

Capitulo 22 : Jason

Liz estaba sobre un escenario, con una copa de wiski en la mano y un micrófono en la otra. Los hombres del bar la miraban con deseo mientras ella bailaba y cantaba la canción Smells like Teen Spirit, de Nirvana.

Iu be ou nou ENTERTAIN US! - Gritó Liz sacudiendo su trasero con toda la energía y la desinhibición que el alcohol le daba. - Wuuu!! - Gritó levantándose la remera, todos los hombres del lugar empezaron a gritar eufóricos y a aplaudirle para que siga bailando. Ana subió al escenario, le saco el micrófono y la arrastró por el brazo para que baje.

Lo siento chicos, ¡es hora de que la artista descanse! - Gritó por el micrófono, todos los hombres del bar la abuchearon y le tiraron papeles. - ¿Estás loca?

No, estoy ebria - Dijo Liz tentada de risa - ¿Por qué no me .... Dejas seguir?

Estas ebria - Dijo Ana seria. - Al final no me dejaste que te cuente nada, te emborrachaste apenas entramos. - Liz se golpeó la frente con la palma de la mano, e intentó ponerse seria pero no podía por la cantidad de alcohol que tenía encima.

¡Lo siento An! ¡No era mi intención! Ay mierda. Vamos a mi casa y me contás, por favor, perdóname. - Dijo tirándose a los pies de Ana en modo de disculpa.

Ya, ya, vamos que te llevo al departamento y te cuento. - Dijo Ana, no podía enojarse con Liz, era su mejor amiga y siempre estuvo para cuidarla en las borracheras de ella.

Llegaron al departamento extremadamente rápido, el bar en el que estaban no quedaba lejos, y el auto de Ana estaba estacionado en la puerta. La verdadera lucha comenzó cuando al llegar el ascensor no andaba y tenían que subir por las escaleras. Ana terminó tirando de Liz y llevándola a rastras. Cuando logró entrar en el departamento y llevar a Liz al sillón ya se le había agotado la paciencia y casi todo el amor que le quedaba.

Bueno Liz o te bañas o te dormís, no soporto más el olor a wiski que tenés. - Le dijo a su amiga, esta solo la miró y esbozó una sonrisa. No podía hacer mucho más tampoco. - Liz, ¿Cómo se supone que te cuente si no vas a recordarlo mañana? - Liz la miró de nuevo y esta vez hizo el intento por pararse e ir al baño, terminó en el suelo maldiciendo el momento en que tomó tanto.

Ya vvvv... oy - Dijo Liz intentando nuevamente ponerse de pie, Ana la levantó por el brazo y la acompañó al baño - Gdazia mana - Del latín "Gracias hermana".

De nada - Dijo Ana y la dejó que se metiera en la ducha. Liz salió fresca como una lechuga, algo más consiente y menos ebria, Ana le dio un café y ambas se sentaron en el sillón a charlar.

Perdón Ana, No debería haber tomado tanto, me pasé de la raya - Se disculpó la morena.

No importa, ya está, siempre estuviste conmigo cuando yo estuve así, era hora de que te devuelva el favor jajajaja - Ambas dos se echaron a reír. - Liz, conocí a un hombre... - Liz la miró con la boca abierta.

¡CUENTAME TODO! ¡Ya ya ya ya ya! - Ana no esperaba esa reacción, Liz siempre la sobreprotegía.

Bueno, se llama Jason, es... No sé, es el amor de mi vida - Dijo con ojos de soñadora.

¡Tranquila Julieta! Seguro que hasta su ropa interior es linda - Dijo Liz pícara sabiendo que su amiga era algo ninfómana (adicta al sexo). Ana la miró perpleja.

No lo digo por eso, de verdad lo quiero, muchísimo, es casi como mi otra mitad.

Bueno, ¿Por qué no arreglamos para verlo?

Es que lo vimos - Liz la miró aterrorizada ¿ESO CUANDO PASÓ? Pensó Liz - Estabas muy borracha para acordarte, estaba en el bar, cuando te pusiste a bailar arriba del escenario llegó, le pedí que vaya a buscar algo de comer y que viniese para acá, ahí te traje.

Ahhh - Dijo Liz comprendiendo todo sin comprender nada - ¿Viene para acá? ¿Cuándo?

Me dijo que en veinte minutos está acá - Dijo Ana. Liz abrió los ojos como un búho de sorpresa y se levantó de un salto.

¡Podrías haberme dicho antes! ¡El departamento es un asco! - Le gritó desesperada.

No te hagas problema, cámbiate que estas hecha un desastre, yo limpio. - Liz negó con la cabeza y se puso a limpiar, en menos de 15 minutos logró que el departamento se vea limpio y ordenado sin haber barrido, solo faltaba eso, barrer y limpiar la mesa ratona. - Wow, ¡ni quince minutos y ya parece recién comprado! - Se emocionó Ana.

Solo en apariencia An, ya me acostumbré a hacer esto, cada vez que me avisan que llegarán de sorpresa - Dijo Liz, luego de una mínima pausa - ¿Te importaría barrer un poco y pasarle un trapito a la mesa?

No, anda a vestirte, yo lo hago. - Dijo Ana mientras Liz se encaminaba a la pieza pensando en que ponerse, hasta que se dijo a si misma que no tenía que pensarlo mucho. Llegó a su pieza, tomó unos jeans, una camisa cuadrillé y unas zapatillas, con eso era más que suficiente.

Sonó el timbre justo cuando Ana terminaba de barrer y Liz salía del dormitorio vestida.

Yo voy An - Dijo Liz encaminándose a la puerta. Al abrir se llevó la sorpresa de su vida, quién estaba del otro lado era un ex novio de ella, con el que salió solo un par de semanas antes de que la engañara y ella lo dejara. - ¿Jason? - Dijo Liz enarcando una ceja - ¿Este es tu Jason?

¡Si Liz! - Dijo Ana corriendo a la puerta, abriéndole del todo - Hola Jase, pasa - Dijo con cara de idiota enamorada. Liz no podía creerlo, no porque fuera su ex, sino porque su amiga no sabía lo mala persona que ese Jason era. - Jason ella es - Jason la cortó de golpe.

Liz, lo sé, la del bar - Mintió descaradamente, Liz lo miró con odio, lo iba a matar en cuanto se le diese la oportunidad.

Si, la del bar - Respondió la morena.

Voy a la cocina a traer unos platos para comer la.... ¿Comida china? ¡Qué rico! - Dijo Ana y desapareció.

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2x1 por hoy. Un beso enorme!