En un mundo donde la jerarquía de alfas y omegas define el destino de cada individuo, Izuku Midoriya sueña con convertirse en un héroe. Desde pequeño, su vida ha estado marcada por su determinación y coraje, pero también por el vacío dejado por Tomu...
Los días pasaron, convirtiéndose en dos semanas en las cuales pasaron diversas cosas en la vida del omega.
Entro nuevamente a la escuela en donde lo recibieron mejor de lo que esperaba, sus maestros y compañeros eran amables, lo que le facilito adaptarse, sus clases le eran sencillas sentía que no necesitaba esforzarse tanto y aun así obtenía los mejores resultados.
No había hecho amigos pero no le daba importancia, se había visto con todoroki en varias ocasiones, se reunían para hacer tareas o simplemente para pasar el rato juntos, su amistad había crecido al nivel que el alfa comenzaba a ser más expresivo con el omega.
Con tomura todo iba relativamente bien, su vínculo se fortalecía con cada día que pasaba volviéndose mucho más íntimo, después de que el alfa se asegurará de que ya no lo seguían al omega, reanudaron los entrenamientos por petición de izuku, el peliverde no quería perder todo lo que había logrado solo haber renunciado a la UA. Cada que el peliceleste intentaba hablar sobre el one for all izuku lo detenía diciendo que no necesitaba comprobar si aún lo tenía o no, ante las negativas el alfa dejó de intentar. Aunque no todo era entrenamiento, se juntaban para jugar video juegos, leer y ver películas, en ocasiones se quedaban a dormir en la bodega o en él cuarto del peliverde.
De parte de la UA no había recibido ninguna llamada, era como si nunca hubiera asistido a esa academia, todoroki le había contado que cuando regresaron de las pasantías les informaron que ya no regresaría sin dar muchos detalles, al momento que dieron el aviso todos en el aula comenzaron a hacer preguntas que no fueron contestadas, pero no duró mucho la preocupación de sus compañeros ya que fue sacado del grupo del salón y ninguno se había comunicado con él para preguntar si estaba bien o algo.
Las emociones que se habían desarrollado en el en las últimas dos semanas eran diversas, por un lado se sentía tranquilo y feliz de no tener que darle explicaciones a nadie pero por otro lado se sentía triste y molesto ante la notoria realidad de que él no era alguien necesario ya que fue desechado en cuestión de días.
Evitaba pensar en todo lo relacionado con los "héroes", pero en momentos se ponía a analizar en qué instante dejaron de lado el verdadero significado que había detrás. No lo decía en voz alta pero quería hacer algo, justo como le había dicho a todoroki pero no sabía cómo comenzar, porque cada que pensaba en eso recordaba las pruebas de las que tomura le había hablado, las cuales aún no veía por miedo porque en el fondo no quería aceptar que todas esas cosas fueran reales.
Ese día en específico se sentía demasiado curioso, había pasado la mañana sin poner atención a sus clases pensando en cómo pedirle a tomura que le mostrará las pruebas, no sabía de dónde había salido la seguridad pero no iba a desaprovecharla.
Cuando salió de la escuela se despidió de sus compañeros después de organizarse para un trabajo en equipo, mientras caminaba saco el celular que le había dado el alfa marcando su número.
- tenko - dijo izuku en cuanto escucho que respondo la llamada - ¿estas ocupado?
- no ¿sucede algo? - de fondo se escuchaba una canción de Mario kart - Nuestro entrenamiento es más tarde
- quiero ver las pruebas - susurro observando que nadie lo escuchara
- oh - se quedó en silencio unos segundos antes de volver a hablar - está bien, te veo en la bodega
Corto la llamada guardando su celular para sacar el otro, le envió un mensaje a su mamá para avisarle que llegaría más tarde.
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