Beomgyu era solo un niño al que le encantaba la música, quedarse en casa y comer bocadillos. No tenía amigos, solo estaban él y toto en su diminuta habitación. Sin embargo, no quería nada más, por supuesto que se sentiría bien si tuviera amigos, pero no quiere solo "amigos" con los que pasar el rato en la escuela. Él quiere verdaderos amigos que lo acepten tal como es, que no intenten forzarlo a salir de su habitación, que no intenten arrojárselo a otro chico gay solo porque ambos son gay, que no se burlen de Toto, no burlarse de su ansiedad y preocupaciones. Solo verdaderos amigos para aceptarlo y no verlo como un proyecto lleno de fallas para que ellos lo arreglen.
Pero también sabe que no suplicará que eso suceda, sabe cómo estar bien solo con él y Toto a su lado, en su pequeño mundo. Todavía llora antes de dormir, tiene pesadillas y manos temblorosas, pero cree que estará bien.
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Era temprano en la mañana, pero beomgyu se despertó de todos modos con música relajante en sus oídos, rápidamente se dio cuenta de que sus auriculares estaban tocando música desde anoche cuando se quedó dormido. Deseaba que la música relajante también aliviara la extraña sensación en su estómago.
Se levantó rápidamente... demasiado rápido... así que se sentó de nuevo con las manos en la cabeza hasta que el dolor desapareció y luego se levantó de nuevo, esta vez con cuidado.
se duchó, se puso el uniforme escolar, desayunó, tomó su almuerzo, tomó su mochila y toto, por supuesto, se despidió de mamá y luego montó su bicicleta a la escuela.
Rezó en su corazón para que nadie viniera tan temprano a la escuela y la mayoría de las veces nadie lo hizo. Está acostumbrado a ir a la escuela temprano y a irse temprano porque se pone demasiado ansioso en las multitudes, y el hecho de que haya una pandilla en su escuela que acosa a personas como él lo pone aún más enfermo y más paranoico en mañanas como esas.
En su camino hacia la azotea donde solía sentarse todas las mañanas escuchando música hasta el primer período, notó que alguien corría en el campo de fútbol, un niño pelirrojo, no puedes dejar de notarlo, el niño parece que se estaba divirtiendo. así que beomgyu siguió caminando hacia su destino, hasta que sintió que el balón de fútbol le caía encima y le costaba mantener el equilibrio.
Cayó al suelo y luego escuchó pasos cerca de su cabeza
- ¿estás bien?... Lo siento, no quise decir t-
Beomgyu lo miró brevemente a los ojos temblando un poco, el pelirrojo había estirado su mano hacia él para tomarla pero beomgyu tomó su mochila y se levantó rápidamente solo dejando atrás al otro chico.
Se sentó en el techo con manos ligeramente temblorosas, de inmediato buscó toto en su mochila, quiso abrazarlo fuertemente contra su pecho para poder calmarse y controlar su respiración nuevamente, pero no pudo encontrarlo. Beomgyu no pudo encontrar a toto. Empezó a temblar aún más y a balbucear palabras.
- tu..estás bien..está bien..toto, toto donde esta toto-
sintió que las lágrimas lo asfixiaban y luego escuchó los ruidos de los niños, lo que significaba que todos estaban aquí y que debería ir a su primer período pronto ... pero eso solo hizo que quisiera vomitar, y lo hizo.
comenzó a hiperventilar, apretando las manos sobre el pecho y cuando ya no podía respirar sintió que el mundo daba vueltas
- n-no..no puedo..no va a pasar..
Trató de atrapar cualquier cosa que sus manos pudieran alcanzar, deseaba desesperadamente quedarse pero no podía. La oscuridad era demasiado fuerte, demasiado fuerte cuando Toto no está allí.
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se despertó en una cama suave con sábanas blancas y limpias y rápidamente supo que estaba en la clínica de la escuela, solía estar aquí mucho, así que estaba bien hasta que recordó todo lo que sucedió esta mañana y, además, estaba temblando un poco y perdido en sus pensamientos hasta que escuchó su voz
