CAPÍTULO TREINTA Y SIETE

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CAPÍTULO TREINTA Y SIETEhassaleh

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CAPÍTULO TREINTA Y SIETE
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Se suponía que los cumpleaños tenían que ser felices. Eve recordaba despertarse todas las mañanas del diecisiete de junio y encontrarse a Jordan pidiéndole que bajara; siempre les preparaban el desayuno a los gemelos mientras sus padres los colmaban de regalo en regalo. Cuando eran más pequeños, sus padres siempre organizaban fiestas en las que la familia y los amigos abarrotaban la pintoresca casa para que sólo el pastel y el helado llenaran los estómagos de todos y el cumpleañero y la cumpleañera fueran agraciados con aún más regalos. Era su día. Se suponía que deberían pasarlo con ellos siendo felices, sin embargo, mientras Eve mira al techo de su habitación, con las piernas extendidas sobre las sábanas desaliñadas, se siente enferma.

No el tipo de enfermo que se encontraría agachado sobre un retrete, con la espalda torpemente arqueada mientras vomita en sus entrañas. Se sintió terrible en el momento en que abrió los ojos hace unos minutos.

Al principio, sintió ese repentino estallido de emoción; oficialmente tenía diecisiete años, pero a medida que el peso de la guerra se abatía sobre ella, se desvanecía. Ha pasado tan rápido que Eve no recuerda haberse sentido feliz antes.

Lo único en lo que podía concentrarse era en la batalla. No sabía si estaba ocurriendo en ese momento, si ya había tenido lugar o si estaba a punto de hacerlo. No sabía si Jordan ya estaba ahí fuera con los Cullen, intentando actuar con calma y serenidad mientras gritaba y lloraba mentalmente (siempre le pasaba lo mismo en situaciones de estrés). No se sabía si Paul ya estaba allí, en fase o todavía disfrutando de su piel humana mientras montaba guardia junto a su manada, preparándose para el momento adecuado para atacar. Para matar.

Su conciencia no se callaba. Lo único que podía preguntarse era qué pasaría si... e imaginarse las escenas más oscuras y horribles que posiblemente nunca tendrían lugar.
El pavor era tan horrible, tan absorbente, que se incorporó de repente, encorvándose sobre las rodillas hasta que se le saltaron las lágrimas. No podía soportarlo. No podía con el día de hoy.

CATCH THE STARS ━━ paul lahoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora