── eres un enigma; nadie entiende realmente quién eres. supongo que por eso nos hemos juntado. mientras tú eres la pregunta, yo soy la respuesta. ❜
original de -elysianwriter
traducido por lueaxwin
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CAPÍTULO CUARENTA Y CUATRO enif
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Una campana suena cuando Eve entra en la ferretería local de La Push. La tienda estaba bastante vacía, silenciosa también aparte del ventilador que chirría débilmente por encima mientras gira. Afortunadamente, el edificio estaba fresco en este día caluroso y abrasador de agosto.
Eve se abanica con la mano mientras pronuncia un nombre concreto:—¿Darcy?.
La chica a la que pertenece el nombre se levanta de un salto detrás del mostrador, agitando su larga melena oscura. Sus brillantes labios se curvan en una amplia sonrisa. —Has tardado bastante. Mi descanso empezó hace diez minutos, así que llega tarde, señora.
Caminando hacia su amiga, Eve deja su bolso sobre la encimera y se inclina hacia delante, el frío de la madera le quita el calor. Ir en bicicleta hasta aquí había sido un viaje, por decir lo menos, con Paul tener que hacer recados con la manada hoy, dejó a Eve sin coche. Se disculpó, constantemente preocupándose, temiendo de que ella pudiera desmayarse, sólo pudo poner los ojos en blanco y asegurarle que si lo hacía, mejor que se despertara con él y nadie más. Y además, hoy tenía que ver a Darcy. No sólo las dos adolescentes se habían visto privadas de pasar tiempo juntas debido a la apretada agenda de Darcy con el trabajo y un jefe que encuentra entretenidos a los niños que trabajan, sino que Eve necesitaba ayuda desesperadamente. No sabía como arreglarse para la boda, para la que solo faltaba una semana.
Lo que explica por qué Darcy se agachó y sacó numerosas revistas, empujándolas sobre el mostrador ante los ojos curiosos de Eve. —Aqui, —dijo, separando su coleccion—. Encontraremos algo que te siente bien a ti y a ese vestido. Quizá algo que resalte tus tetas, ya que te quedan bien con el vestido.
Quizá fue un error enviarle a Darcy fotos del vestido. Con la cara sonrosada, Eve refunfuña a su amiga. —Es una boda, —afirma, totalmente avergonzada— ¿Por qué tengo que enseñar las tetas?
Darcy sonríe como una loca. —No sé... Quizá haga que Paul mueva la cola.
Su frente besa la encimera. —Cállate.
Se sentía raro hablar así de Paul. Después de todo, era el antiguo novio de la chica más joven, mientras que era el actual novio de Eve. Sin embargo, de alguna manera, a pesar de lo incómodo que podía verse, Darcy estaba tranquila, desde la charla que tuvieron durante el invierno, en la que explicó que no estaba disgustada porque sabía que lo de Paul y ella no iba a durar, había estado bien. Nada en ella gritaba ya que estuviera sufriendo.
