LIAM - "¿Aún querrás conocerme?"

Capitulo 14

-Buenos días a todos los alumnos y profesorado de la universidad privada "CEU San Pablo". Soy el comisario Tobias Rebas, os hemos reunido aquí para informar que han asaltado la sala de profesores de la universidad y han robado y destruido documentos muy valiosos.- Los chicos junto a Casey y yo nos habíamos colocado en una de las esquinas del gimnasio y escuchábamos atentamente las palabras del comisario.

-Esto quiere decir, que no solo se han cometido dos delitos como la destrucción de documentos de carácter privado y allanamiento de una edificación privada, en este caso la sala de profesores; sino que hay delito de daños materiales y personales además de hurto mayor. Él o los involucrados en estos acontecimientos serán llevados a juicio y expulsados de la universidad por delitos mayores y esto constará en su hoja de información, lo que quiere decir que dependiendo del veredicto del juez, podrán ser vetado del resto de universidad o incluso condenado a cárcel y además deberá de pagar una multa por daños a una institución privada y a sus empleados.- Sus palabras fueron claras y concisas y aunque para nada estaba involucrada, un nudo en mi garganta se formó al escucharle.

-En estas semanas todo el alumnado y profesorado será interrogado por el personal policial y tendrán que presentar pruebas contundentes de donde se encontraban desde las 9:30 am hasta las 10:30 am.- Un revuelto de alumnos cuchicheando en bajo se formó en el gran gimnasio.

Todos hablaban entre todos, yo en cambio no apartaba la mirada de Sebastian que se encontraba al lado de los policías.

-¿Ari donde estabas tu mientras paso todo esto?- Cas me sacó de mis pensamiento, me giré para poder verla y no darle la espalda al hablar.

-Estaba reunida con Sebastian.-

-Entonces tu no tendrás problema con tus pruebas.- Dijo Tomas.

-¿Donde estabais vosotros?- Pregunté a los chicos.

-Habíamos salido a comprar fuera de la universidad unos cafés.- Seguramente en el local que se encontraba al lado de la universidad.

-¿Había mucha gente?- Pregunté.

-No la verdad, éramos los únicos junto a dos chicas que estaban allí.- 

-Entonces tampoco tendréis problemas, el personal que os atendió puede confirmar que estabais allí.- Los chicos se miraron entre ellos al darse cuenta de que podría justificar donde se encontraban.

-¿Cas donde estabas tú?-

-En clase con el sr.Pintos, tiene constancia de que estuve allí, nunca suele pasar lista y hoy si la pasó.- Todos podíamos justificar donde nos encontrábamos y me quedé mas tranquila sabiendo que ninguno de ellos estaba involucrado.

El comisario bajó del escenario improvisado dejando paso a Sebastian.

-Os informó que todos los datos personales de los alumnos serán facilitados y nadie podrá oponerse a los interrogatorios, en caso de negarse a contribuir, habrá consecuencias iguales a las personas involucradas.- Sus palabras hicieron que se creara un silencio absoluto.

Aunque la policía imponía autoridad y respeto, en este caso Sebastian los sobrepasaba sin dudas.

-No me quiero imaginar al subdirector cabreado.- Marco, que había estado riendo hasta que habló Sebatian, había cambiado su semblante a uno serio y preocupado.

-Ya lo esta, y creo que podría tenerle mas miedo a sus represarías que a las de la policía.- Afirmó Dani.

Miré de nuevo a Sebastian, este me observaba desde la distancia con una expresión que me decía que, cabrearlo, era lo último que debía de hacer.