LIAM - "¿Aún querrás conocerme?"

Capitulo 30

Hades me ayudo a salir por una de las puertas de emergencia sin ser vista.

Necesitábamos tiempo antes de las 20:00 para recaudar información. Aun teníamos dos horas por delante.
Llamé a Casey y después de explicarle todo, salió del hospital sin muchos problemas y nos reunimos en un parque cercano.

-Ari, ¿como si quiera encontraremos una pista?- No hacia falta pensar mucho.

-La noche que me persiguió en casa de Liam, intentó pasar por una puerta con un cerrojo de cadenas, después de golpearlo con el cuchillo no lo logró.- Dije poniéndome el cinturón

Iríamos en el coche se Cas, ya que ir a mi casa ahora seria perder tiempo y si mi madre se enteraba de que no estaba en el hospital, pondría el grito en el cielo.

-¿Ari eso quiere decir que si hay marcas en la puerta es porque estuvo allí?-

-Si.- El cuerpo de Cas se había tensado por mi respuesta.

Después de media hora y muchas indicaciones llegamos a casa de Liam.
Por seguridad de que Liam no estuviera alli decidí llamarlo, ya que explicarle todo a Liam seria que se preocupara por mi y me intentara convencer de que debía descansar.

-Liam.- Descolgó después de varios pitidos.

-¿Estas bien princesa? ¿Pasa algo?- Preguntó alarmado.

-No, no... solo quería saber como estabas y si habías llevado mis pertenencias a tu casa.- No me gustaba mentirle pero, a fin de cuentas no era del todo una mentira.

-Si, he cogido tus cosas pero tengo un contratiempo encima, cuando salgas del hospital iremos directamente a casa y yo bajaré todo y no te preocupes por nada, tienes que descansar princesa.- Liam era mas que considerado.

-Muchas gracias Liam, y no te preocupes por mi estoy bien, te quiero.- Era la primera vez que le decía "te quiero".

Me había salido de manera natural y todo por él.

-Y yo a ti princesa, no sabes cuanto.- Ambos colgamos, ya teníamos la confirmación de que no se encontraba en casa y eso quería decir que podríamos entrar.

-Vamos.- Dije abriendo la puerta del coche.

Sabia donde guardaba Liam unas copias de las llaves, por suerte estaban en el macetero de una de las plantas de la entrada.
Abrí las enormes puertas, Cas y yo pasamos con cuidado de dejar todo como estaba antes.

-¿Sabes donde es exactamente?- Preguntó Cas mirando a todos lados viendo las grandes dimensiones del alojamiento de Liam.

-Si es uno de los pasillo que hay en el comedor.- Para ser más exactos, justo al lado de la entrada del pasillo había una pequeñas mesa.

Recuerdo que tropecé con la misma la noche que tuve aquella horrible pesadilla.

-Por aquí.- Dije señalándole el camino a Cas.

-Esta todo muy oscuro.-

-Si, se por donde tenemos que ir, ahora la primera puerta es la que comunica las habitaciones. Te parecerá un laberinto pero se por donde debemos ir.- Tenía que cruzar un par de puerta y daríamos con la que buscábamos.

Al llegar y ver la entrada cerrada perdí algo de esperanza.
Me acerqué a la misma viendo que esta estaba cerrada con llave.

-Creo que no...- Me giré para ver a Casey pero cuando vi que se abalanzaba sobre mi me dejé caer a un lado.

El sonido de la madera y el metal se escuchó retumbar por la casa vacía.
Casey había abierto la puerta con un gran adorno de metal, exactamente una vasija.