Aquí encontrarás diferentes escenarios con algunos personajes de TOKYO REVENGERS.
Contiene lenguaje vulgar y contenido no apto para menores. (Luego no digan que no se los advertí). Recordemos que la historia es un Fanfic y sirve sólo como entretenim...
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El reencuentro con su familia había sido una de las cosas más esperadas para (___), después de todo su familia siempre había sido unida y tener que separarse de ellos aún siendo joven fue realmente duro.
No solo para ella sino también para sus hermanos, principalmente para su mellizo Takashi y ni hablar de sus pequeñas hermanas y su adorada madre, por suerte todo eso ya se había terminado. Fue realmente sorprendente ver de nuevo a toda su familia junta, en aquel esperado reencuentro las lágrimas se hicieron presentes representando la alegría que sentían todos.
Los días pasaron con tranquilidad y le encantaba ver los diseños de su hermano Takashi quien ahora había encontrado una nueva fuente de inspiración. El joven no paraba de confeccionar ropa para su melliza, lo que los hacía pasar más tiempo juntos, gracias a eso conoció a los hermanos Shiba quienes le son de ayuda a su hermano.
Ella había regresado con una idea bastante clara en su mente, deseaba abrir su propio restaurante ya que le encantaba cocinar y en eso se había especializado durante su estancia fuera del país.
Fue algo sorprendente para su familia pero aún así le brindaron su apoyo, inesperadamente el nuevo restaurante fue un gran éxito debido a la extravagante comida. Algo poco común en los restaurantes cercanos o populares.
Estaba muy agradecida con las personas que habían sido sus primeros clientes y aquellos quienes recomendaban el lugar. Le costó un poco de trabajo ponerse al corriente de la situación, ya que ahora había un grupo bastante conocido por su mala fama.
Bonten.
Había resultado ser algo inesperado pero fue lo primero que escucho al regresar, no había persona que no sintiera temor al escuchar sobre aquel grupo mafioso. Si bien se había alejado de Rindou eso no evitaba que ella se sintiera algo culpable al recordar lo cruel y cobarde que fue ante la situación. Pensar en como debió sentirse aquel hermoso chico de ojos violetas sólo empeoraba las cosas.
Ya no tenía caso pensar en eso, seguramente tenía a muchas mujeres a su alrededor y posiblemente se había olvidado de ella. De ser así, ella también debería seguir con su vida y enfocarse en otras cosas. Quizás debería soltar el pasado y prestar atención al presente para después enfocarse en el futuro.
— ¿Seishu?. — Pregunto extrañada al ver al joven rubio de cerca. — Creí que hoy era tú día de descanso.
— Si, aunque en realidad no tenía nada que hacer así que decidí venir un rato. — Habló con algo de vergüenza. — ¿Te molesta?
— Por supuesto que no, siempre eres bienvenido.
El rubio sonrió agradecido, aunque tampoco podía evitar sentir su corazón latir con fuerza cada vez que estaba cerca de ella.
Era una persona tan linda y dulce que no hacía más que intrigarlo con respecto a toda aquella situación por la que había pasado. Si bien ellos no tenían mucho de conocerse se podría decir que ya habían formado un lazo de amistad bastante fuerte.
Seishu no pudo evitar sentirse confundido y molesto cuando escucho a (____) decirle la verdadera razón de su viaje fuera del país. En un principio su hermano había dicho que se fue a estudiar a otro país pero, saber que la verdad razón fue por culpa de uno de los Haitani era algo que le molestaba.
Nunca en su vida habría imaginado una posible conexión entre ellos en un pasado debido a que su hermano pertenecía a Toman en aquel entonces y Rindou a Tenjiku simplemente no era lógico.
Imaginar a una chica que parece la encarnación de un bello ángel que inspira paz y tranquilidad. Por otra parte Rindou era todo lo contrario, era peor que una bestia a la que le encantaba el sufrimiento ajeno.
Incrédulo le pregunto si alguna vez ese idiota la obligó a hacer algo en contra de su voluntad. (___) inmediatamente lo negó y explico a detalle como era el Rindou que ella solía conocer un chico lindo y dulce quien jamás le podrían un dedo encima y nunca la obligó a hacer nada.
Siempre pensaba en sus sentimientos y pedía el consentimiento en muchas situaciones, solía darle regalos y llevarla a muchos sitios diferentes cada que tenían una cita. Era muy protector y presumía su relación con los demás cada vez que podía incluso con su propio hermano.
— Me habría casado con él sin dudarlo. — Mencionó mientras sonreía con nostalgia.
El joven Inui pudo verlo con claridad en sus ojos, (___) había quedado profundamente enamorada de Rindou. Tanto que aún después de largos años ella seguía hablando de el con tanto amor y cariño.
— Me gustas.
Sin saber cómo reaccionar la chica de cabellos lilas sólo le miro con sorpresa, analizo el rostro del chico buscando una pizca de burla o algo que lo delatara pero no fue así. Él se veía tan seguro de aquellas palabras.
— Yo, no sé que decir. — Murmuró suavemente, ya que no quería herir a su amigo. — Es algo inesperado, nunca creí que tú...
— ¿Aún esperas encontrarte con él?
No pudo evitar sorprenderse ante tal pregunta. ¿Tan notorio era? Ni siquiera, Takashi se había dado cuenta o quizá fingía no hacerlo. En el fondo de su corazón esperaba verlo de nuevo pero, tenía que sacar esa idea de su mente.
— Sé que no es posible, aún así yo... — Si aparece de nuevo ¿Qué le diría? ¿Una disculpa y ya? — No, creó que ya ha sido suficiente.
Si. Era mejor resignarse a no verlo nunca más, estaba segura que él la odiaba más que nada en el mundo. Y ella era una cobarde sin vergüenza que no podría hacerle frente a la situación.
