CapÍtulo 1

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Lucia llega exhausta y mortificada a casa después de la escuela.
Salió corriendo al hacerle una broma pesada a una chica con la que se lleva mal. La cual terminó golpeándose de forma dura y seca contra su propio carro, dejándole una abolladura y mucho dolor en el cráneo. Simple y sencillamente se le salió de las manos a la morena.

Por suerte huyó a tiempo y no se tendrá que preocupar hasta el lunes por esa lenta y estúpida chica iracunda e irritante.

Solo queda avisarle a su hermanita menor que ya está en casa aunque indudablemente le haya oído llegar con prisas.

- ¡Ya llegué, Luz! – Se recarga en la puerta tras cerrarla.

- ¡Ok! – Se oye a su hermanita desde la cocina, un punto ciego desde la entrada.

Lucia bota su mochila al lado del sillón mientras pasa. Su hermanita le vuelve a dirigir palabra.

- ¡Luci, recuerda que está aquí Ami, aunque ya casi llegan por ella! – Pareciera ser que Luz quiere presentarle a alguien con enorme entusiasmo, pero Lucia no tiene ganas de ver a ni una sola alma por el resto del fin de semana.

- Bien cualquier cosa avísame. –Lucia emprende la huida a su habitación, dando curva larga del pasillo que conectaba con la entrada, sin dignarse a voltear a ver a la amiga de su hermana, cierra la puerta detrás sellándolo con su peso, evitando que su hermanita abra al girar la manija.

Logra escuchar a su hermana dirigirse a su nueva amiga.

- Perdón, ella a veces es así de ¡Grosera y mal educada! - grita para que su hermana escuché completamente su reproche.

- ¡Déjame en paz, luego me presentas a tu novia! – Se ríe de su propia broma

- ¿Qué?, ¡No es mi novia!

Tocan el timbre.

- ¡Lo que digas! ¡No abras al menos que sepas quien es!

Lucia se quita de la puerta y camina entre el mar de ropa desperdigada en el suelo de la habitación, se quita la chaqueta verde tirándola al suelo junto a la demás ropa, y se recuesta en su cama, aliviándose de poder regocijarse en paz en su espacio 100% "Lucia".

Escucha como Luz abre la puerta.

- ¡Wow! Eres la hermana de Amity sin duda – Suena fascinada - Pasa, solo guardaremos las cosas – Se le oye correr en reversa hacia la cocina arrastrando a su amiga.

Lucia piensa: Rayos, visitas. Justo quiero tomar agua. Bueno, paso de rápido y me voy.

Lucia estira lentamente sus brazos hacia arriba antes de impulsarse para levantarse y salir de su cuarto a recorrer el pasillo, en seguida ve al par de niñas terminando de guardar sus cosas de la sala. Mas, No puede dar crédito de lo que afirman y le revelan sus ojos.

La niña es pequeña, pálida, prediciblemente irritante para ella y tiene el cabello tintado de verdementa.

- ¡Hey! No me digas que- Es empujada contra la pared alzada de la camisa.

Efectivamente, Amelia Blight (A quien molestó excesivamente) está dentro de su casa. Ahora sabe a donde ir para cobrar todas sus faltas.

- ¡Hola, Noceda! - Saluda Amelia con una terrible sonrisa cruel y tono de voz de intimidantes.

Amelia asfixia levemente a Lucia para que no grite o hable, y se voltea hacia las menores.

- Dennos un momento niñas, ahorita venimos. - Dice con una voz dulce y suave como si les estuviese llamando a comer a sus adorables hijas amadas, y no asfixiando a la integrante de la casa en donde se encuentran todas frente a niñas.

Hasta tenerte enfrente (Human AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora