Cool like ice → WonSol/SolWoo

7

Tenían una semana para disfrutar de Jeju pero Wonwoo no podía sacarse de la cabeza cuánto debía de estar calmado.

Se sentía tan tenso y relajado a la vez..

En su mente palabras como "cálmate", "concéntrate", "tranquilizate" ahora eran mantras.

Se los repetía cada vez que se emocionaba mucho.

Lo cual era demasiado evidente cada vez que sucedía pues aunque si tenían normalmente todas las mañanas ocupadas con conferencias, juntas, reuniones, incluso la compañía se había tomado el tiempo de planear actividades recreativas para todos.

Buceo, ir al acuario, botes de pedales, pádel, salidas a comer, desayunos, la actividad de playa que quisieras nombrar seguro la harían en algún momento.

Y es que le ponía tan feliz que esto estuviera sucediendo, al mismo tiempo que lo compartía con la persona que le gustaba.

Tenía que repetirse casi a cada momento que estaba ahí para disfrutar, no para complicar sus momentos felices.

Por las noches normalmente paseaban solos así que ese día aprovecharon para acercarse un poco más al puerto que tenía muchas tiendas, muchos turistas y mucha actividad de todo tipo.

Inevitablemente al llegar a una tienda de recuerdos entraron para comprar algo.

Sus ojos fueron inmediatamente a unos gatitos que estaban plasmados en cerámica con muy variados diseños y es que el cartel que están sobre ellos decía "gatos de la suerte".

Se acercó sin pensarlo.

"Compraré el más lindo" Pensó y extendió su mano hasta un gato color blanco con detalles rojos que lo hacían parecer como un león emulando un pelaje muy alborotado.

No esperó que justo instantes antes de tomarlo sus dedos chocarán con los de Hansol quién también lo iba a tomar, en cuanto fueron conscientes de la distancia entonces se separaron de inmediato.

—Uh lo siento Wonwoo, puedes quedartelo.

—No, tú lo viste primero Hansol..

Entonces ambos se sonrojaron un poco, avergonzados por la situación, Hansol se llevó la mano al pecho.

—Yo..

—Adelante, en verdad.

Y aunque Hansol lo dudó otro minuto en cuestión de un movimiento tomó el muñeco entre sus dedos pues le cabía en la palma de la mano.

—De acuerdo, entonces te ayudaré a escoger uno a cambio.

Después de tomar con su mano libre el muñeco que quería volvió la otra para tocar con las yemas de sus dedos las cabecitas de varios.

De pronto sus ojos se iluminaron por completo y tomó uno exactamente igual al que ya llevaba pero en lugar de tener detalles rojos eran azules.

—Mira, es muy lindo ¿No?

Volteó en dirección de Wonwoo haciéndole sonrojarse de inmediato y es que las luces le hacían brillar más sus ojitos, resaltaban sus rizos castaños, su belleza ante sus ojos se hacía más notoria.

"Que guapo ¡En verdad tú eres lo más precioso del mundo!"

No se contuvo de pensarlo, la brisa de nieve llegó de inmediato incluso tomando por sorpresa a Hansol quién cerró los ojos sorprendido.

Fue tan fuerte y Wonwoo fue tan incapaz de contenerla que pronto comenzó a caer nieve por todo el puerto haciendo que incluso los turistas se detuvieran a contemplarla.