Bree; la hermana de Verstappen │Charles Leclerc│

CÁPITULO 2

Habíamos llegado a una cafetería muy bonita en Mónaco, de hecho todo lo que había visto hasta ahora de Mónaco ahora mismo me encantaba.

-¿Qué propuesta era? –pregunto revolviendo mi chocolate caliente, cortando un trocito de tarta y llevándolo a mi boca.

-Sabemos que te gusta mucho donde hay nieve y frio, entonces estábamos pensando en irnos de vacaciones por una semana a Italia, exactamente a Courmayeur –dice Martina con un acento al final que nos hizo reír.

Una sonrisa enorme se hace en mi rostro, la idea de irme a un lugar solamente con mis amigas, con nieve, esquiando o mejor, patinando, me fascinaba de una forma increíble.

-Me encanta esa idea, sería un sueño –digo viéndolas a ambas quienes me sonreían.- Pero debo de hablar con mi papá.

-Uf –rodó los ojos Emilia- Siempre ese señor arruina todos tus planes.

-Bueno a ver, no seamos negativos. Pensemos en que podrás ir y haremos todo lo posible para que así sea.

Finalmente nos pasamos la tarde allí y con ellas era fácil olvidarme de todo el resto de las cosas que sentía cuando llegaba a casa.

-¿Y Lotte? –pregunté terminando de tomar el chocolate.

-Ella está en Francia, aún no vendrá a Mónaco.

-Por cierto –Emilia miró a Martina- ¿ya le contaste lo del trabajo de tu padre?

Alcé una ceja, volteando la mirada hacia Martina esperando a que me contara.

-Es que sé que tu hermano es de ese mundo y es de un equipo contrario...-dijo Martina, bajando la mirada.- Mi papá tendrá un puesto en Ferrari.

Abro mis ojos con sorpresa, pero sonreí estirando mi mano hacia ella, tomándola.

-Mira, esa rivalidad solamente la creó mi papá, ninguno de los dos odia a ningún equipo Martu, es un deporte y todos están por el mismo objetivo, pero mi papá jamás lo vió de esa forma –dije acariciando sus nudillos.- Me alegro mucho, es un muy buen trabajo.

-Bueno...supongo que alguna de las dos me llevará a esas carreras, ¿no?

-Por supuesto, tendrás un pase vip –reímos las tres.

Ahora pensaba en eso, no sabía muy bien cómo funcionaba todo eso, pero a mí me gustaba, no me desagradaba en hecho de ir a las carreras y disfrutar junto a mi hermano. Me alegraba pensar que eso sería junto a mis amigas. Claro que me preocupaba el hecho de que Martina tuviera el equipo "rival" según mi papá pero no pensaba por nada del mundo separarme de ella, jamás.

Finalmente llegué a mi casa, era temprano aún. La salida con mis amigas y ver mi mamá, me había renovado bastante.

-Qué bueno que llegas, te quiero presentar a alguien –dijo mi hermano que justo venía bajando las escaleras.

-¿A quien? –cuestiono con una sonrisa, caminando junto a él al comedor.

-A tu cuñada, ven –camine a su lado hacia el gran comedor, allí había una chica hermosa y alta conversando con mi papá muy simpáticamente.

-Al fin conozco a Brianna –dijo esa chica acercándose a mí, dándome dos besos.- Jos, tienes una hija hermosa.

-Un gusto Kelly –dije con una sonrisa.

-Sí, lástima que decidió no seguir mis consejos, pero bueno.

Mi sonrisa se borró poco a poco, asi que decido ir hacia mi lugar en la mesa, tomando asiento.