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Se había acabado mi verano, el cual iba a ser el mejor de todos y no podía haber acabado peor.

¿Cómo era posible?

Todos los planes y aventuras que había pensado hacer no se habían llevado a cabo, ninguno de ellos.

No quiero volver a la rutina de las clases, los deberes, el estrés y mucho menos el tener que madrugar.

No quiero volver al instituto y menos ahora, menos ahora que ha pasado todo esto con Shawn.

No tengo ganas de nada, ni de verlo por los pasillos, ni de miradas incomodas.

Busco mi mochila y la saco del armario para después mirar los libros de las asignaturas que tenia este año.

Mi último año.

Me ducho intentando dispersar mis pensamientos de todo el caos.

Al salir le dije a mi madre que no tenía gana de cenar y me fui directamente a dormir.

Cuando suena la alarma solo pienso en que espero que sea una broma.

Primer día de clase.

Todo el mundo tiene parte de ganas por empezar y parte no.

Hay ganas de volver para ver a los amigos los cuales no has visto en todo el verano, de ver la gente nueva que va a entrar y todo eso. 

Por otra parte no hay ganas de volver por la rutina, por los deberes, el tener que estudiar hasta las tantas, el estrés de "No me da tiempo"  y el tener que levantarse a las siete de la mañana.

Me levanto desganada y a los dos minutos escucho los pasos de mi madre acercándose hacía mi puerta.

Escucho como hace el movimiento como para llamarme y hablo antes de que lo haga.

-Mamá estoy despierta.

-Esta bien.

Dice y escucho sus pasos bajando las escaleras.

Voy al baño, me lavo la cara, los dientes y me peino para luego ir al armario a vestirme.

Me pongo lo primero que veo cómodo y me lo pongo sin pensar.

Me pongo lo primero que veo cómodo y me lo pongo sin pensar

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Me miro al espejo y me doy cuenta de que voy vestida de manera despreocupada, pero me da igual porque voy muy cómoda.

También es el primer día de instituto de mi hermano y está muy nervioso.

Nos montamos en el coche y no deja de hablar de estupideces de lo histérico que esta.

Me bebo un zumo mientras vamos de camino y mi madre le dice a mi hermano lo que tiene que hacer nada más llegar.

Cuando llegamos ambos nos despedimos de mi madre y bajamos, noto a mi hermano nervioso casi tiembla.

Le paso el brazo y le rodeando la espalda mientras andamos hacía la entrada.

-Tranquilo que no es para tanto, mucha suerte y si necesitas algo búscame o envíame un mensaje.

El asiente, nos chocamos la mano y cada uno tira por el pasillo al que debe ir.

Al llegar a la clase entro y me siento delante las gemelas ya que las mesas están distribuidas de dos en dos.

Aún no les he dicho nada sobre la discusión que tuvimos Shawn y yo ayer, pero no tardaran en saberlo.

Cuando Shawn entra me giro mirando al frente evitando así de todas las maneras posibles que nuestras miradas se crucen.

Lo veo por el rabillo de mi ojo que se sienta con Nash y empiezan a hablar de algo.

Al instante la profesora entra con Matt al lado.

Matt siempre ha ido a la modalidad humanística, la cual mezcla un poco el científico con el de letras pero me comentó que este año se cambiaría a nuestra modalidad.

Así que iría a nuestra clase.

-Buenos días chicos y chicas, primero quería daros felicitaciones estáis en vuestro último año así que no lo desaprovechéis, y bueno Matt escoge sitio.

Se sienta a mi lado y le doy una colleja a lo que el se ríe.

-Compañeros de clase Leah, ¿Que te parece?

Yo me río y saco mis libros.

Matt no se calla ni debajo del agua durante la clase, le he dicho unas veinte veces que se calle mientras intento coger apuntes de la primera clase.

Si, en nuestro primer día de clase ya damos materia y mucho más si es el ultimo año.

Cuantas más veces lo digo más fuerte suena, es imposible que ya esté en el último año, es de locos.

Suena la campana y todos salimos al pasillo, Shawn seguramente va con los demás así que yo les pido a las gemelas que vayamos a la cafetería a almorzar.

Cuando entramos veo a mi hermano a lo lejos con sus compañeros y le veo bastante bien.

Cogemos la comida de los estantes y nos sentamos en una mesa.

-¿Que pasa con Shawn?

Dice sin darme un segundo más.

Les explico toda la situación sin suavizar nada, cuento todo tal cual ha pasado y me sorprendo a mi misma al darme cuenta de que no lloro diciéndolo, pero quizás sea porque estoy rodeada de un centenar de personas.

Ellas se quedan sorprendidas sin saber que decir y es así como me quedé yo misma ayer en la playa, cuando en cambio de decirme un quédate me dijo un ¿Te veo en clase?.


"El chico de intercambio" Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora