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-Narra Leah-

Segunda semana consecutiva en el hospital.

Aunque he pasado media de estas dos inconsciente se cuenta como tiempo que he pasado aquí dentro.

Shawn dice que es muy pesado tener que ir al instituto en muletas, subir y bajar escaleras con todo ese lío. Se queja de que los exámenes de recuperación son muy difíciles y que deberían haberle puesto preguntas fáciles porque dice que con el golpe ha perdido inteligencia.

Pero yo creo que estar encerrada aquí es mucho peor.

Las horas pasan como días, los días como semanas y las semanas casi como meses.

He conocido a mitad de la plantilla del hospital e incluso me he hecho amiga de una de las auxiliares.

Se llama Annie, tiene cincuenta años y dos hijos. Tiene un carácter dulce y entrañable, siempre anda sonriendo por ahí haciendo reír a la gente que más lo necesita.

Siempre que viene a sanarme la cicatriz de la operación me dice que le recuerdo a su hija pequeña. La describe como dicharachera y muy divertida, cosa que me alegra que le recuerde a mi.

Se queda a charlar conmigo cuando mis padres me dejan sola por el trabajo y ella me hace compañía.

Shawn viene todas las tardes a pesar de que tenga que hacer deberes y estudiar.

Le digo mil veces que no hace falta que venga todos los días. Que con que venga dos o tres soy feliz, pero parece no escucharme.

Aunque en el fondo me encanta verle la cara todos los días.

Esta semana le quitan las escayolas y está loco por que llegue el viernes.

En cuanto a mi, no se cuanto tiempo voy a tener que pasar aquí pero espero que sea poco.

Han empezado a hacerme ejercicios de movilidad en la pierna y duelen como el demonio.

Supongo que no me mandarán a casa hasta que estén seguros de que puedo arreglármelas sola. Pero tengo tantas ganas de irme que se hace eterno.

Hellen y Taylor me llaman a diario. Me preguntan todas esas cosas que te pregunta una persona que realmente se preocupa por ti.

Me comentan que  los profesores han estado hablando sobre el viaje de fin de curso y que les han dejado caer que sera al extranjero. Estoy deseando salir de aquí aunque sea para ir al viaje de fin de curso.

Me agobio de pensar en todos lo exámenes, deberes y cosas que tendré que hacer retrasadas.

En estos momentos estoy con Annie, quien esta senada en el sillón de invitados mientras estamos viendo un programa en la televisión.

En mitad de una noticia suena su teléfono.

Me muestra una sonrisa cortes y sale de la habitación.

Puedo ver su cara tras la gran cristalera de la habitación, su sonrisa se rompe y empieza a llorar como si le hubiesen roto el corazón.

Se lleva las manos hacía el pecho con desesperación  y no me puedo imaginar lo que ha podido pasar.

Me levanto tan rápido como puedo. Cojo mis muletas y me acerco a la puerta donde me la encuentro tapándose el rostro con las dos manos.

-¿Que ha pasado Annie?

Digo asustada.

-A Mery le ha dado un ataque al corazón.

Mery es su hija pequeña, la que tanto le recuerda a mi.

-¡Tienes que marcharte Annie! -Digo sin poder creer lo que acaba de decir- ¡Ve a ver si está bien!

Aquellas fueron las últimas palabras que cruzamos frente a frente. Ni siquiera fui capaz de darle un abrazo a la señora que tanta compañía me ha hecho.

Los siguientes días pasan rápido, sin  señales de la existencia de Annie.

 Está mañana ha venido otra enfermera a curarme, ya han venido cuatro distintas desde que se marcho y no he podido evitar preguntarle por ella.

Con cara de lastima me dice que con el fallecimiento de su hija ha cogido la baja.

Que no tenia los ánimos para venir a trabajar. Recalca diciendo las palabras textuales de Annie.

Las lagrimas salen solas de mi sin yo poder controlarlas. Que tu hija pequeña de apenas nueve años fallezca de tan brusca manera debe de ser un dolor por el que ninguna madre debería de pasar.

Le digo si hay alguna manera en la que yo pueda ponerme en contacto con ella, si me puede dar su dirección para mandarle cartas o su numero de teléfono.

Ella se hace de rogar pero finalmente me da su dirección.

Accede solo por el simple echo de que sabe cuanto la aprecio y sabe que Annie también me apreciaba a mi.

-Esta prohibido transferir datos personales de los trabajadores del hospital a los pacientes, pero esta vez haré una excepción. -Me mira con una sonrisa canalla- Se que la aprecias mucho, espero que puedas ponerte en contacto con ella.

Tras decir esto coge sus cosas y se larga a curar a otros pacientes.

Quiero escribirle una carta diciendo cuanto lo siento así que le pido a Shawn que cuando venga me traiga hojas y bolígrafo.

Cuando llega no espero ni un segundo en pedírselos, pero en cuanto me pongo frente al papel no se que escribir.

"Annie me he enterado de lo sucedido, e de decirte que lo siento con toda mi alma.

Eres una de las mujeres más honradas y dulces que he conocido en toda mi vida.

Nadie se merece pasar por donde esto, pero tu mucho menos.

Quien ayuda a los demás dando todo de si para hacerlos felices.

Tengo que darte las gracias por suavizar mi estancia en el hospital, has hecho de esto un paseo cuando en realidad es más parecido a una cárcel. Tu y yo sabemos de que hablamos.

Se que es egoísta por mi parte pedirte esto pero, si algún día te sientes con ánimos me gustaría acompañarte a llevarle flores a Mery.

Se cuanto le gustaban y se que te gustaba verla coger flores de todas partes.

Quiero que sepas que tienes todo mi apoyo aunque no sea suficiente para atravesar esto.

Espero que todo mejore con el paso del tiempo.

Te doy todo mi pésame, Leah."

Cuando termino de escribirla Shawn ya se ha marchado, es de noche y hace rato que me han traído la cena.

He estado tan metida en escribir las palabras correctas para no meter la pata que ni siquiera me he dado cuenta de lo demás.

Al día siguiente mi madre le envía por correo y espero con ganas su respuesta.






Ya no quedan muchos capítulos para terminar la primera temporada pero aún hay algunos.

Se que estoy tardando bastante en editar la novela pero es muchísimo más trabajo del que podáis imaginar. Ademas mi situación tampoco ha ayudado mucho a progresar últimamente pero espero tenerla subida entre esta semana y la siguiente. 

Había pensado en hacer una página de Facebook para que allí deis like, podamos comentar la novela, que os gusta, que no tanto y tener un tu a tu más cercano. 

¿Que os parece? Dejarme lo que opináis en los comentarios.

¡Gracias por leer!

"El chico de intercambio" Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora