Tonto Amor - Kyuhyun y Tú

Capítulo 24

El sonido de la ambulancia se escuchaba por toda la cuidad de camino a la clínica, llevando a dos a urgencias. Pensaban lo peor, pero aún así tenían esperanzas aún que fueran muy pequeñas.

-Vamos _____ -la voz de Eunhyuk quien estaba sangrando del brazo por una bala que le rozó, pero nada grave comparado con lo de _____ y Kyuhyun-. No cierres los ojos...no lo hagas, por favor.

Lloraba en su regazo apretando los párpados para no llorar, pero le era imposible, aquella chica había conquistado su corazón como ninguna lo había echo en años. No creía en el amor, si no hasta que la conoció a ella, a _____.

En menos de seis minutos llegaron a urgencias, los para médicos de inmediato pusieron manos a la obra para impedir que uno saliera sin vida de esto, estaban muy grabes y corrían peligro. ______ con su cadera perforada por una bala, una de sus costillas rotas además que había perdido mucha sangre. Kyuhyun con una perforación en el pecho, muy cerca del corazón, estaba peor que ______, mucho peor.

Las horas pasaron, Eunhyuk y Alice eran los únicos fieles que esperaban alguna noticia de Kyuhyun y _______, ellos por suerte no corrían peligro estando sanos y salvos, pero con el miedo de perder a los que más les importaba.

Por otro lado Dave, no descansaba en paz, quería a _____ a su lado. Había escapado cuando la policía había llegado, yéndose con una van de su gente. Pensó en irse del país, pero sus ganas de estar con ______ eran más grandes. ¿Cómo aquella chica lo había cautivado y hechizado sin siquiera dirigirle la palabra?. Simple. Desde siempre había seguido todos sus pasos, sus movimientos, sus gestos, hasta que se enamoró completamente de ella perder la razón. Estaba loco de amor por ______, una obsesión.

~•~

Narra _____.

No sentía dolor alguno, todo era como en un sueño donde todo es hermoso, de esos sueños donde lo peor que te pueda pasar sea romperte la rodilla. Los árboles, las flores, el aire, los pájaros, todo simplemente era perfecto.

Algo me llamó la atención, una mariposa que volaba muy alto pero aún así la seguí, sus colores eran unos que nunca había visto. La mariposa cada vez se iba hasta lo más feo, donde en un rincón todo era oscuro y sombrío, pero solo miraba la mariposa volar. No me di cuenta cuando estábamos cerca de una pequeña casa, era como una habitación reducida, se notaba que estaba abandonada. La puerta estaba entre abierta por lo que la mariposa entró sin problemas, luego escuché ruidos y gritos muy fuertes, me asomo por la puerta por miedo a saber lo que estaba pasando ahí dentro. Logré ver a tres personas, dos mujeres y un hombre discutiendo a gritos, luego un disparo, mi corazón se quedó quieto por unos escasos segundos, luego vi otro hombre acercarse a una de las mujeres, ella se parecía a mi, los mismos ojos, el tono de piel, el cabello, los labios, era como yo en un futuro. El hombre con el arma le apuntó sobre las costillas, la mujer muy asustada rogaba porque no le hiciera nada, el otro hombre sin el arma le gritaba que no le hiciera daño....que lo matara a él, sentía mis ojos humedecerse, me dolia el pecho. La otra mujer acorraló al hombre apuntándole con el arma en las caderas, los hombres sin armas rogaban por sus vidas, mientras que los con armas se miraban victoriosamente y ahí pude ver sus caras, los conocía muy bien, y en menos de un segundo los disparos llenaron el lugar. Mi corazón saltó y no pude evitar pegar un grito, los que estaban con armas giraron a ver de quien se trataba, mirándome. Me quedé inmóvil por el miedo, miedo a ellos y de lo que me pueda pasar. Abrieron la puerta y pude ver dos cadáveres en el suelo, mi alma se estrujó y un fuerte dolor me vino al pecho, lo sentía tan real, como si una electricidad me recorriera el alma enviando ondas a mi corazón.

Abrí mis ojos y el aire llenó mis pulmones, pudiendo respirar agitado y un sudor por todo mi cuerpo. Estaba en un hospital donde todos los que estaban en la sala sonreían felizmente.

-La hemos recuperado -dijo uno de ellos muy contento.

Miraba a todos con la garganta seca, me pesaba el cuerpo y hasta solo pestañar dolía. Un fuerte dolor se apoderó de mis costillas y caderas, mordi mi labio por el fuerte dolor, escuchaba voces desde lejos, me dolía la cabeza, luego un fuerte dolor en mi brazo. Después de unos largos minutos el dolor fue desapareciendo dejándome sin energías, me pesaban los ojos y otra vez todo se fue a negro.