Temporada 2 (Capítulo 40)

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T/n.

Me quedo en silencio pensando en lo que había dicho Erick, no quería responder.

—Tengo mis razones...— murmuro

—Si tú lo dices— me dice en tono sarcástico

Pasan horas ahí mientras esperábamos, ya me había levantado de dormir y andaba contestando mensajes.

Veo a mi costado a Erick que ha Sido gran compañía a mi lado.

Comenzamos a hablar de nuestras vidas y chismosear como señoras.

—¿Entonces fue por eso que terminaron?— me pregunta

—Sí, y ahora estoy muy arrepentida— digo

—Debiste pensar mejor las cosas antes de arruinarlas de esta forma, León ha cambiado muchísimo, es... más distante, y ahora sí quieres volver a recuperarlas, tendrás que esforzarte porque así por así no lo recuperarás nuevamente, y cuesta.— me dice como regañandome

—Sí, lo sé, y realmente lo quiero, voy a intentar sacar lo mejor de mí y... intentar hablar con él— digo

—Él te sigue amando T/n, puede que él lo niegue pero se nota, pero ten en cuenta que no porque te ame dejará que las cosas vuelvan a la normalidad nuevamente, él es muy egocéntrico y orgulloso— me dice y yo resoplo

—Lo sé, lo conozco y sé que no será fácil...— digo y me da un abrazo consolador— Gracias— digo

—Lo necesitas— me dice y sonrío un poco

—¿Familiares del señor Jean Carlo León Espinel?— pregunta la enfermera y doy un respingo al escuchar su nombre para luego ponerme a la altura de la enfermera

—¿Cómo está?— pregunto

—El paciente tuvo un grave accidente automovilístico, la doctora me dijo que esta operación tardará mucho para poder estabilizar bien al paciente— me dice y asiento con preocupación

—Lo entiendo— digo

—Con permiso— dice y yo miro a Erick

—Me iré a casa entonces...— digo

—Claro, yo también me iré, pedí que me avisarán cualquier cosa— dice

—¿No se quedará nadie aquí?— pregunto

—Pues...— se escucha el sonido del elevador y vemos a Diana salir

—Buen momento para irnos— le digo y el asiente

Pasamos por su costado y ella al parecer no se dió cuenta.

Erick me lleva a mi casa y el camino estuvo en silencio.

—Te veo el lunes— me dice y asiento

—Hasta luego— me despido de él y salgo de su carro.

entro a casa y suspiro, no llegué con buenas ni malas noticias.

—¡Mami!— Ares y Shelsy me abrazan

—Hola mis niños— los saludo

—Te ves fatal— escucho decir a Alex

—¿Quieres comer algo?— me pregunta Anthony y niego con la cabeza

—Estoy llena, gracias, iré a mi habitación— les digo y subo las escaleras y voy directo a mi habitación

Cierro la puerta y lágrimas abordan mi rostro.

Lo necesito y me aterra la idea de que pueda morir en la operación.

Quito mis tennis y mis jeans y me acuesto en mi cama en bragas.

Me arropo y me duermo.

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Me levanto y noto que aún sigue iluminado, yo frunzo el ceño y miro la hora.

Me sorprendo al notar que dormí toda la noche y ya son las 5:00 A.M.

Veo a mi costado y noto durmiendo a mis hijos.

Les doy un beso a cada uno para luego levantarme e ir a bañarme.

Saliendo me pongo mi uniforme de siempre y me comienzo a peinar, me maquillo un poco y agarro mi bolso para luego salir de casa, uso el carro de Anthony y cada vez me repito que necesito comprarme un auto.

Llego a la empresa, firmo mi asistencia y uso los elevadores para subir a la oficina de Erick.

Toco y me deja ingresar.

—Buenos días— saludo

—Hola T/n— me sonríe

—¿Tienes noticias sobre León?— pregunto y noto como se tensa.

Piensa un buen rato su respuesta y lo único que hago es esperar.

—Estamos en el trabajo... Debemos hablar de asuntos laborales— dice

—Tengo preocupación Erick, necesito saber si está bien— le digo y él niega

—Ya oíste, lleva estos papeles a recepción por favor— dice y los tomo de mala gana

—Con permiso.— digo y abro la puerta encontrándome con Michelle.

La miro de pies de cabeza y si se ve sexy.

—Llegaste temprano— me dice y asiento.

—Debo irme— digo y ella asiente para luego pasar y yo salir, cierra la puerta y voy directo a recepción.

Entrego los papeles y voy al baño.

Me miro y tomo aire para calmarme y no ponerme a llorar.

10 minutos después salgo del baño y nuevamente voy a la oficina de Erick.

Levanto la mano para tocar pero mis oídos escuchan otra cosa.

—Dios, que grande la tienes...— escucho gemir a una chica y mi cerebro procesa lo que acabo de escuchar.

Michelle, Michelle entro a la... Oh por Dios.

Tapo mi boca del asombro y proceso, ¿Michelle se está follando a Erick?

Sonrío un poco, se nota que le gustaba.

—¡Vas a romperme!— escucho que gime nuevamente

—Quiero romper el buen culo que te cargas, Mich— dice y prefiero irme a otro lado y no escuchar más.

Uso mi celular por un buen rato y luego vuelvo a ir a la oficina.

Veo a salir a Michelle con cara de recién follada y el labial corrido.

No sé si sea porque la beso o porque se la mamó.

—¿Qué sucede con Erick?— pregunto y ella sonríe

—Luego te cuento, me acaba de dar la follada de la vida— me dice y yo ruedo los ojos sonriente

—Luego me cuentas, ve a arreglarte que se nota— le digo y se va contenta.

Doy dos toques a la puerta y me permiten entrar.

Ingreso y inhalo el aire de sexo, esto es un poco incómodo.

—¿Entregaste los papeles?— pregunta agitado y asiento cabizbaja

Miro el suelo y noto un poco de semen.

Me da todo con lo que debo de trabajar el día de hoy y lo miro.

—Permiso para retirarme— le digo

—Adelante— dice él y yo sonrío

—Limpia eso y no dejes a tus diminutos hijos ahí tirados antes de que alguien lo vea— digo y él frunce el ceño para darse cuenta y ponerse rojo

Salgo de la oficina riendo un poco, pequeña historia de amor que va comenzando...

Llevo todo a trabajar y comienzo con mi trabajo.

Era difícil de trabajar sin saber nada de él, Erick no me quiso dar información y no tengo ni la menor idea de cómo esté.

Sé me es difícil de concentrar pero hago lo que pueda...

Yes daddy +18 (Jean Carlo León) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora