♡ Little Hazzie ♡ | l.s

sevenɞ

Louis miró a Harry con ternura, su respiración estaba calmada y sus cachetes colorados.

—Ya estoy aquí bebé— susurro y dejó un suave beso sobre su frente, acariciando brevemente sus rizos.

Harry se removió un poco y siguió chupando su dedo pulgar.

Louis suspiro y miro todo a su alrededor, llamó por teléfono para mover su reservación a otro día y se puso manos a la obra.

Primero levantó la ropa del rizado y la colgó, no pudo evitar ver las lindas ropas de Harry, todas olían como a fresa, había desde blusitas muy pequeñas hasta enormes sudaderas y suéteres. Después limpió el piso y trapeo todo muy bien, por último, ordeno y limpio el desastre sobre el escritorio del chico y cuando por fin termino, apago la televisión y miro a Harry aun dormido, no sabía si el rizado tenía el sueño pesado o solo era así cuando era pequeño, o tal vez estaba muy agotado, a Louis se le partía el corazón de imaginar a Harry agotado de tanto llorar.

El debió haberlo previsto, debió haber entrado mucho antes, debió haber sabido que algo andaba mal.

Harry se movió en la cama, frunciendo el ceño aun con los ojos cerrados, sacó su pulgar de sus lindos labios rosados y se sentó en la cama, tallo sus ojitos con sus puños y bostezo grande una última vez, le costó un poco enfocar la vista con sus ojitos hinchados y recién despertados, su pelo estaba muy alborotado y toda su carita tenía un lindo color rosado, más en sus lindas mejillas.

Louis sonrió porque Harry era adorable, con esa camiseta enorme y recién despertado, podría fallecer en ese mismo momento.

Harry miró a Louis parado frente a él, y solo pudo hacer un puchero y estirar sus brazos para después abrir y cerrar sus manitas, en señal de que quería que Louis lo cargara.

Louis se acercó y tomo en sus brazos a Harry, abrazándolo, para después recargarse en el respaldo de la cama con Harry sobre su pecho ronroneando como un gatito, Louis esperaba que una vez que el chico despertara fuera un Harry grande (por así decirlo), sin embargo, no fue así, y no se puede quejar en lo absoluto.

—Lou... ¿Hazzie malo? ¡Lo siento!... y-yo no quelia estar solo...

Harry se acurruco más en Louis, enterrando su cara en su pecho.

—No pequeño, no fuiste malo, lo siento por no venir antes ¿sí? — Louis acarició sus rizos y dejo un beso sobre ellos.

—¿Hazzie no malo?

—No mi vida, Hazzie es un buen bebé, el mejor.

Harry sonrió satisfecho y restregó su carita emocionado en el pecho de Louis, Louis también sonrió.

—Bebé bueno ¿chupón?

Harry miró hacia arriba donde Louis lo observaba atento, los niños buenos pueden tener su chupón, y Louis acaba de decirlo, por lo que Harry ahora quiere su chupón.

—Uh amor, yo... no tengo ninguno, ¿Hazzie tiene uno?

El rizado asintió con su cabeza y una linda sonrisa, señaló con su dedito a la caja fuerte sobre su cajonera.

—Okay bebé, espera aquí.

Louis se levantó hacia la caja, Harry lo espero ansioso sobre la cama, aunque como temía Louis, la caja estaba cerrada y no se sabía la contraseña.

—¿Bebé, sabes cual es la contraseña? — miró a Harry sobre la cama, quien solo inclino un poco su cabeza e hizo un puchero para después bajar la mirada.

—H-hazzie no lo sabe, Hawy no gusta chupi y-y ¡Hazzie intento! — Hazzie levantó sus manos lastimadas hacia Louis para que pudiera ver su esfuerzo.