♡ Little Hazzie ♡ | l.s

seventeenɞ

Louis no sabe que pasa, el rizado esta algo extraño, no ha hablado en todo el camino, no canta las canciones del auto, aunque sean de programas infantiles o de Conan Gray, no lo entiende, solo puede ver como observa por la ventana, se ve algo triste ahora que lo piensa.

No le ha preguntado sobre los golpes aun, no quiso hacerlo por la mañana para no arruinar el tiempo juntos, y ahora que iban al trabajo del rizado, no cree que sea un buen momento.

En serio quiere saber, fueron muchas cosas, está intentando descifrar que es lo que pudo haber pasado, pero solo se está volviendo loco, el golpe en la frente y los moretones en sus muslos, no tiene sentido, no sabe cómo conectarlos ni nada por el estilo, o con lo que dijo Harry sobre no ser una chica, sin embargo, hay una idea en su cabeza, lo hace sentir náuseas y enojo al mismo tiempo, pero definitivamente no lo dirá ahora, el rizado necesita trabajar, y el necesita pensar como abarcar el tema de la mejor forma.

Harry jamás tuvo un viaje tan incomodo y doloroso, no abrió su boca porque sabía que si lo hacía lo único que saldría sería un patético gemido de dolor, porque su espalda dolía horrores, no se la ha podido curar correctamente porque no alcanza, no puede ver las heridas ni que tan graves son, pero estar recargado en el asiento del coche en movimiento fue una tortura.

Se despidió de Louis tan rápido que ni lo recuerda, paso todo el día en el trabajo muy sensible y al borde del llanto por los roces de su ropa en su espalda, ya no soportaba, quería ir a su cuarto y dormir boca abajo, espera que mañana sea mejor, en realidad lo espera.

El tiempo era pesado, pero cuando por fin llego su hora de salida, se fue cuanto antes, no quería caminar, pero no traía el dinero suficiente para un taxi y no sabe usar el autobús.

En el camino la gente pasaba a su lado de prisa, algunas veces chocaron contra él, no fueron bruscos, pero él estaba tan sensible, en serio lo estaba, no pudo evitar llorar, era mucho, tenía tantas cosas en su cabeza, no puede pensar en nada pero está pensando en todo a la vez, no puede caer porque está en la calle pero quiere hacerlo, eso lo haría sentir un poquito mejor sin embargo no quiere comer mucho estando en su espacio, ya está demasiado gordo para eso.

De la nada un auto se estaciono a un lado de donde pasaba y toco la bocina, eso lo hizo espantarse tanto, su corazón latía a mil por hora, el auto negro se detuvo en medio de la noche, justo a su lado, tocando esa molesta bocina.

—¿Harry?

El rizado apenas y pudo distinguir la voz e identificarla, cuando ya estaba sintiendo unas manos en sus mejillas frías y la mirada de esos bonitos ojos azules.

—¿Qué pasa amor? ¿Estas bien? ¿Alguien te hizo algo?

Harry negó con la cabeza, pero pronto se dio cuenta de que ahora asentía, y lloraba mucho y balbuceaba, ya no era Harry, era Hazzie, claro que sí, no paso ni un segundo de sentir a Louis para dejarse caer, claro que lo hizo.

Él es su lugar seguro después de todo.

Louis se llevó al pequeño a su casa, no quería tener que entrar con Harry en ese estado a los dormitorios y tampoco esperar a que alguien abriera la puerta y entrar a las residencias, no, definitivamente no, iba a cuidar al pequeño, se veía muy alterado y sensible, además era sábado así que tenían tiempo, tenía tiempo para cuidarlo y mimarlo toda la noche y si el universo lo permitía, mañana por la mañana.

Condujo al departamento con el rizado en su regazo ya que este no quiso alejarse, y como Louis no quería que llorara lo hizo, lo llevo en su regazo, sentía en su pecho como el rizado lloraba, pero el llanto fue parando con el tiempo, en un inicio pensó que se había dormido, pero supo que no era así cuando lo escucho balbucear la melodía de las canciones de la radio.