Son las 7 de la mañana, es miércoles, la alarma que puso Louis la noche anterior lo despertó, se estiro para apagar la alarma que le martillaba la cabeza por el insistente ruido, pero cuando lo hace, el ruido sigue ahí, pero no es su alarma, es el llanto del rizado, está llorando muy agudo y gimotea constantemente, está cerca de Louis aun acostado junto a él, su chupón ya no está en su boca y pesadas lágrimas caen de sus ojos.
Louis sabe que tocara el trabajo difícil.
No sabe a qué hora Harry debe ir a la escuela, sabe que sus horarios varían esta última semana, así que no puede simplemente buscar su horario.
—Shhhh, bebé no pasa nada, estoy aquí...
Louis intenta acunar a Harry, es un poco difícil porque Harry no quiere separase, pero de todos modos lo logra y lo arrulla un poco, el rizado pronto se calma y a falta de su chupón, el pequeño empieza a chupar su dedo pulgar. Louis piensa que eso calmara su llanto, pero después de algunos segundos el rizado abre sus ojos y empieza a llorar de nuevo, Louis piensa que es gracioso, porque el rizado realmente no está llorando, solo finge hacerlo para llamar su atención, y después de eso balbucea.
—Opita...
Louis se ríe por que el pequeño es muy tierno y le causa mucha gracia el cómo dejo de fingir llorar para pedir... Lo que sea que haya pedido.
—¿Qué dices, bonito?
—¡Opiwta!
Louis no sabe que es eso, pero Harry se mueve cada vez más inquieto en su regazo así que decide dejarlo libre, el rizado puede caminar de la forma más torpe del mundo, y está muy inquieto, agarrando cada cosa que ve a su alcance y llevándolo sobre la cama, como libretas, una lámpara e incluso el tenis de Louis.
Harry se ríe cuando Louis toma su tenis de la cama y se lo pone, el rizado lo ve como algo muy gracioso y procede a tomar el otro tenis de Louis y acercarlo al pie del ojiazul e intentar ponerselo, el castaño ayuda a Harry a hacerlo.
El rizado camina por todos lados, con pasos demasiado torpes y rozando contra cada mueble en su camino, pero sin golpearse, era un poco gracioso porque él ya es bastante alto, vio como abrió la puerta del baño y después salió con las manos llenas de productos, como el jabón, shampoo, esponja...
—Okay bebé, esto es genial, pero tenemos que ponerlo de nuevo en su lugar...
—Lugal...
Harry miro las cosas que había traído y empezó a ponerlas donde estaban, de forma desordenada y algunas muy difíciles de poner en pie simplemente las dejo caídas.
—¿Opita?— pregunto Harry una vez volvió con Louis, hizo un puchero y toco su pancita.
—¿Tienes hambre? — Louis pregunto dudoso.
Harry al escuchar eso se sentó en la mesita y miro a Louis.
—Opita... chala... ¡Opita chala!
Harry aplaudió y espero paciente a que Louis le diera lo que pedía.
Louis soltó un suspiro y se acercó a Harry, por más tierno que fuera ahora, tenía que hacer que volviera, además no sabía que era una opita...
—¡Pipí!... Opita...
Harry solo estaba repitiendo las palabras opita, chala, lugal... Pero cuando Louis lo escucho decir pipí...
—¿Tienes pipí en tu pañal corazón?
Louis realmente espera que no, porque no cree poder cambiarlo sin verlo, o por lo menos hacerlo bien sin verlo.
Harry abre mucho sus ojos y hace con su boquita una "o" para después taparla con sus manitas.
ESTÁS LEYENDO
♡ Little Hazzie ♡ | l.s
RomanceDonde Louis conoce a un chico muy tierno y torpe que no la está pasando bien en su trabajo o donde Harry está siendo molestado por no poder pronunciar las palabras con "r". Harry con little space.